Hombre que amenazó con arma de fuego a ciudadanos que no participaron en protestas no es considerado un peligro para la sociedad

El pasado 8 de mayo se conoció a través de las redes sociales un video en el que un hombre que se identifica como Francisco Javier Velasco, presidente de la central obrera Unión de trabajadores de Colombia, dice públicamente que después de 12 días de paro su lucha ya no es solamente contra la fuerza pública sino también en contra de los ciudadanos que ya están cansados de las protestas, bloqueos y también de la situación que vive el país.

En esos mismos días se hizo público un video en el que se ve, él con arma de fuego atemorizando a unos habitantes de Cali que se movilizaban en una moto y que se negaron a parar en medio de las protestas. Mientras Velasco, apuntaba a los ciudadanos, otro hombre encapuchado que se movilizaba con él saca un puñal y empieza romper las llantas de la moto de los que se consideran sus víctimas.

Los dos videos entre otros elementos fuero presentados por los investigadores ante la justicia donde Velasco debe responder por los delitos de amenazas, perturbación en servicio de transporte público colectivo u oficial, obstrucción a vías públicas que afectan el orden público fabricación tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones agravado.

Sin embargo, el pasado 18 de junio el Juzgado 29 penal municipal con función de control de garantías de Cali, consideró que eso no es suficiente para detenerlo en un establecimiento carcelario, pues evaluó otros factores como que Velasco no tiene antecedentes judiciales, que no representa un peligro para la sociedad ni para el buen desarrollo de las investigaciones y además, es cabeza de hogar.

Es de aclarar que tendrá algunas restricciones, en la detención domiciliaría, solo podrá salir de su casa en el día. “La prohibición de salir de su habitación entre las 6:00 a.m y 6:00 pm”, dice el acta de compromiso jurídica. Firmada entre él en calidad de imputado y el juez.

Además, tiene prohibido acercarse a las víctimas dentro del proceso. Se tiene que presentar en los primeros cinco días de cada mes, ante la Fiscalía, someterse a la vigilancia de la Policía Nacional, entre otras condiciones.

Aunque hay una medida en su contra se han conocido reacciones de ciudadanos que la consideran muy laxa, u dicen sentirse inseguros con él en la calle. Durante los últimos años el sistema judicial ha enviado a casa cárcel a los detenidos, debido al hacinamiento carcelario. Postura que ha sido cuestionada por los índices de inseguridad que atraviesa el país.

Cabe recordar que la Conferencia Episcopal de Colombia, representada en esta coyuntura por monseñor Héctor Fabio Henao, el director de Pastoral Social, ha tomado una posición activa y de mediación en el paro nacional. Henao hace parte actualmente de la mesa de negociación nacional entre el Gobierno y los representantes del paro, para buscar una salida a la crisis.

“Consideramos que existe una crisis social profunda en Colombia y consideramos que puede agravarse aún más. Miles de personas sufren de carencia alimentaria y los jóvenes se encuentran en una altísima vulnerabilidad por la falta de oportunidades y empleo. La conferencia episcopal busca un plan de recuperación social y económica del país para reducir la inequidad existente”, expresó en su momento Monseñor.

Incluso desde el Vaticano se insiste en una salida dialogada a la actual situación de violencia del país. “El papa Francisco ha tenido tres pronunciamientos recientes sobre la crisis colombiana. Ha llamado a fortalecer el diálogo, a dar respuestas eficientes a las problemáticas sociales existentes y ha hecho referencia a las distintas formas de violencia que aquejan a Colombia. Solo el respeto y el diálogo son eficientes en estos momentos”, aseguró.