Indígenas asentados en el Parque Nacional, en Bogotá, víctimas de las fuertes lluvias

La comunidad emberá que se encuentra en el Parque Nacional, en la capital del República, se ha visto gravemente afectada por las lluvias recientes en Bogotá. Esto, en parte, también se debe al mal manejo de las basura y al represamiento de sólidos en las alcantarillas del lugar.

La Personería de Bogotá, a través de su cuenta de Twitter, señaló que “como consecuencia de las fuertes lluvias que se registraron hoy en la capital, varios cambuches de las comunidades indígenas asentadas en el Parque Nacional se inundaron. Nuestros guardianes de la localidad de Santa Fe acompañan a las familias afectadas”.

La administración del parque argumenta que estos fenómenos se vienen dando debido a la falta de control de los líderes indígenas respecto a los desechos. Afirman que no solo se han encontrado en las alcantarillas y desagües basura, sino también ropa y juguetes. “Es necesario que el Ministerio Público establezca en sus diálogos el tema de la disposición de basuras y el control de las mismas”, señaló uno de los funcionarios del lugar a Blu Radio.

La Personería ya dispuso de un grupo de trabajo para realizar acompañamiento y montó un pequeño video en sus redes sociales en el que muestran el acompañamiento que se realiza a las comunidades.

Algunos funcionarios han mostrado su preocupación por la situación a diferentes medios de comunicación. Hay quienes dicen que todos son guardianes de derechos, pero no hay equidad al ver que estos indígenas deben dormir mojados y sin techo.

Los rigores del clima se han traducido, además, en enfermedades dentro de la comunidad indígena. Autoridades de salud han reportado varios casos de gripa y otras enfermedades respiratorias, sobre todo en los menores de edad.

“Tenemos en conocimiento que a partir del 15 de octubre había nueve niños hospitalizados, además de personas indígenas que estaban en el parque nacional y a la fecha nos dicen que ha ascendido a 17″, señaló Patricia Villegas, personera delegada para protección de víctimas en entrevista con Noticias RCN.

Cabe recordar que este grupo de indígenas se estableció en este lugar como forma de protesta para que les reestablezcan sus derechos y según cifras de la administración distrital, en un principio habían llegado 350 familias y actualmente se encuentran por lo menos 1.000.

Varias han sido las reuniones entre gestores de la Alcaldía y los líderes de las comunidades, e incluso se les ha ofrecido establecer sus campamentos en otros lugares de la capital, pero estos no han aceptado y en ocasiones se han tornado agresivos con los funcionarios, como fue el caso de la coordinadora de diálogo social, a quien agredieron con garrotes y machetes el pasado 19 de octubre cuando intentó mediar.