HISTORIA

De paramilitares encarcelados a abogados

Una docena de internos recibieron títulos como profesionales del derecho, entre ellos, cinco exjefes paramilitares.

20 de abril de 2016
Cinco exjefes de las Autodefensas Unidas de Colombia recibieron el título de abogados. | Foto: Cortesía Inpec

Sencillamente estaban irreconocibles. Ya no tenían el aspecto recio con el que muchos años amedrentaron zonas enteras de Colombia como jefes paramilitares. Esta vez, con toga y birrete, cinco exjefes de las Autodefensas Unidas de Colombia recibieron el título de abogados.
 
Entre los graduandos estaban Edgar Ignacio Fierro (‘Don Antonio’), Luis Eduardo Cifuentes Galindo (el ‘Águila’), Nelson Martínez Cano (‘Camilo’), Óscar Ospina Pacheco (‘Tolemaida’) y Óscar Zuluaga. Todos cumplieron con los requisitos del programa de pregrado en Derecho de la  Corporación Universitaria de Colombia -Ideas-.
 
Ocurrió este miércoles en una auditorio del Inpec, en Bogotá. Los graduandos, antes peligrosos hombres del paramilitarismo, se acogieron a la Ley de Justicia y Paz y han colaborado con la Justicia, decidieron educarse.
 
“En las crisis aflora lo mejor de las personas”, fueron las palabras del director de la institución penitenciaria, general de la Policía Jorge Luis Ramírez, que felicitó a los graduandos y les auguró éxito en su vida personal y profesional puestos al servicio del país, no obstante encontrarse privados de la libertad cumpliendo la pena impuesta por las autoridades.
 
Por su parte, el interno Edwar Cobos Téllez agradeció al Inpec y a todos los que hicieron posible la culminación de sus estudios, e hizo énfasis en  lo que puede realizar la reclusión cuando está al servicio del desarrollo comunitario.
 
“Lo que hoy cuenta no es el origen, ni las causas que nos trajeron aquí, cuando iniciamos este camino de estudio universitario, sino las motivaciones y los propósitos que lograron darle alas a nuestro sueños y permitirnos volar hacia el futuro”, dijo.
 
Lo anterior demuestra que los programas de resocialización sí se pueden cumplir en medio de una crisis penitenciaria que parece no tener solución a la vista.