Insólito: 60 vacas habrían muerto tras un supuesto ataque de osos en el Quindío

Campesinos que habitan la vereda La Palmera, ubicada en la zona de cordillera del municipio de Pijao, en el Quindío, encuentran cada mañana varias de sus vacas muertas, luego de haber sido brutalmente atacadas por animales salvajes, los cuales las dejan tiradas en el bosque o en las quebradas adyacentes.

Según la denuncia hecha ante las autoridades ambientales, en los últimos dos meses se habría presentado la muerte de 60 cabezas de ganado y los supuestos perpetradores serían tres osos de anteojos que viven desde hace meses en la zona.

“Los campesinos están temerosos por la presencia de estos osos y ya le han pedido a la CRQ (Corporación Autónoma Regional del Quindío) que actúe en este caso, pero nadie ha hecho nada. Amenazaron con tomar justicia por mano propia si las autoridades no se hacen cargo de estos animales, pues un día pueden ser ellos o sus familias los atacados”, explicó Paola García, líder social de la región.

Para los ambientalistas quindianos el caso genera estupor y escepticismo, pues como explica Néstor Ocampo: “Estos animales son evidentemente vegetarianos y en casos muy extremos consumen cadáveres de otros seres vivos, o sea carroña. Ahora, cazar y matar a otro ser vivo es insólito y hasta cierto punto inconcebible. Nunca había oído algo similar”.

Paola García reveló que los osos ya han llegado hasta la vereda La Argelia, contigua a la suya, donde se ha visto en varias ocasiones a un oso de gran tamaño, muy agresivo y amenazante. Los campesinos se han armado con machetes y escopetas y han salido en grupos de caza para hallar al animal.

“El viernes pasado el oso atacó a una ternera que era propiedad de mi papá y la mató. Comprobamos que no solo la mató, sino que se comió parte de ella. Estamos muy asustados”, comentó.

El director de la CRQ, José Manuel Cortés, afirmó que ya se tiene conocimiento sobre los daños que los campesinos denuncian que ocasiona el oso y se está conformando una comisión y generando un plan para asumir el problema. Cortés explicó que este es un animal que no ataca ni al ganado ni a la gente y, por el contrario, se asusta y huye cuando hay presencia de seres humanos.

El funcionario de la autoridad ambiental confirmó, además, que ya han hecho contacto con la fundación WCS en Colombia, especializada en este tipo de animales silvestres, para que se encargue de hacer todas las acciones encaminadas en disminuir la vulnerabilidad al oso e investigue las denuncias hechas por los pobladores.