Jefferson Cruz, de la oscuridad de las drogas a ser becado por MinJusticia y la Universidad de la Salle

Jefferson Cruz, nació en Yopal (Casanare), tiene 18 años y su historia se convierte en un verdadero ejemplo para miles de jóvenes que siguen hoy inmersos en el mundo de las drogas. Cruz hace parte del programa o del Sistema de Responsabilidad Penal para Adolescentes (SRPA) y su vida es la prueba de que las segundas oportunidades sí existen y que sí es posible enderezar el rumbo y mejorar la vida cuando la persona así se lo propone y aprovecha las herramientas que le ofrece el Estado para tal fin.

Este sistema, cabe recordar, fue creado por la Ley 1098 de 2006 y consiste en un conjunto de normas, procedimientos e instituciones especiales que tiene por finalidad atender al adolescente en conflicto con la Ley Penal.

Su historia comenzó en su natal Yopal, donde vivía con su mamá y su abuela. Allí, siendo menor de edad, y bajo los efectos de sustancias psicoactivas, cometió un error que fácilmente podría haber marcado su vida para mal, pero que él, al aprovechar la oportunidad que le brindó el Ministerio de Justicia, ha convertido en su mayor logro y bendición.

Jefferson, posteriormente, se acogió al Programa de Seguimiento Judicial al Tratamiento de Drogas del SRPA, que le permitió alejarse de malas amistades y tomar un nuevo rumbo. Hoy, después de cuatro años en el Programa, Jefferson adelanta sus estudios de Ingeniería Industrial en la Universidad de La Salle gracias a una beca del 100% que le facilitaron el MinJusticia y la citada Alma Máter.

“Su testimonio de vida es más que satisfactorio para la Dirección de Política de Drogas y Actividades Relacionadas de la cartera que lidera el Ministro Wilson Ruiz Orejuela, la cual a lo largo de cuatro años ha desplegado un trabajo arduo en varios departamentos, buscando siempre mejorar la vida de jóvenes y adolescentes que han cometido algún delito”, señala el Ministerio de Justicia.

Este joven del Casanare asegura que “con su carrera puede cambiar y mejorar la vida de sus paisanos, tal como ha cambiado la de él gracias a la ayuda que le han brindado el MinJusticia y la Universidad de La Salle”.

Pandemia y el panorama de la lucha contra las drogas

Las cifras son alarmantes. En Latinoamérica y el Caribe, 17 millones de personas de entre 15 y 64 años consumieron drogas en 2018, y 19 millones se pronostica que lo harán para 2030, según el Informe Mundial sobre las Drogas 2021 de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC).

Y es que la lucha contra el fenómeno de las drogas no para. De hecho, la pandemia empeoró la situación de las personas con trastornos por consumo de drogas, quienes enfrentan además un mayor riesgo de sufrir complicaciones de salud por la covid-19, advierte la Organización Panamericana de la Salud (OPS).

La semana pasada, la muerte de al menos 24 personas y la hospitalización de decenas más en Argentina por consumo de cocaína, aparentemente adulterada con opioides, dejó en evidencia un creciente problema de salud pública en la región, intensificado en los últimos dos años por la emergencia sanitaria por el nuevo coronavirus.

“Los usuarios habituales y problemáticos de sustancias psicoactivas constituyen una población de alto riesgo en el marco de la pandemia”, dijo a la AFP Luis Alfonzo, asesor de la OPS sobre consumo de drogas.

La incertidumbre sobre la enfermedad, los confinamientos para prevenir contagios, los cierres de escuelas, lugares de trabajo y sitios de ocio, la pérdida o deterioro del empleo, y la crisis económica en general, incrementan la predisposición al consumo de sustancias como mecanismo de afrontamiento, explicó.