NACIÓN
José Félix Lafaurie se pronuncia tras denuncias de invasiones de tierra en Antioquia: “¿Quién los respalda?”
Uno de los ganaderos denunció que un grupo de personas ingresó de forma ilegal y se apropiaron de su terreno para parcelarlo y venderlo.
Desde la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán) hicieron una alerta que tiene encendidas las alarmas de los empresarios y ganaderos del país. Según una denuncia de Alejandro Tirado, propietario de la finca Villa Julia en Nechí, Antioquia, decenas de personas invadieron su finca para parcelarla y destruirla.
Reclama que esto no solo lo afecta a él, sino a los empleos que genera y la alimentación que genera de su trabajo.
La denuncia también fue compartida por el presidente de Fedegán, José Félix Lafaurie, quien envió un fuerte mensaje cuestionando que los invasores tengan más derechos y garantías que los mismos empresarios y ganaderos.
#ATENCIÓN #URGENTE #EsNoticia
— José Félix Lafaurie (@jflafaurie) February 5, 2024
¡Increíble que los grupos invasores de tierras tengan más derechos que ganaderos, agricultores y empresarios del campo que ven cómo entran a sus fincas, queman cultivos, parcelan el terreno, amenazan y agreden!
¿Quién los respalda? ¿Quién los… https://t.co/PmSRlVgh2i
“¡Increíble que los grupos invasores de tierras tengan más derechos que ganaderos, agricultores y empresarios del campo que ven cómo entran a sus fincas, queman cultivos, parcelan el terreno, amenazan y agreden! ¿Quién los respalda? ¿Quién los envalentona para que lleguen a una finca específica? ¿Cómo es posible que cientos de personas invadan una finca, se instalen, destruyan y no pase nada? ¡No hay derecho!”, cuestionó Lafaurie.
Tendencias
Según contó Tirado, la invasión se registró el pasado jueves 1.° de febrero, lo que ha generado una situación tensa. Dice que el administrador le contó sobre la invasión y que desde hace días estaba el rumor de que eso sucedería. La calificó como “la noche más amarga de la vida”, relató.
El administrador le contó que eran alrededor de 300 personas, quienes llegaron hasta su finca y lo amenazaron diciendo que le quemarían la casa. “Fue muy fuerte. Al otro día tenía la esperanza de que las cosas estuvieran distintas. Hablé con la alcaldesa y me dijo que pusiera el denuncio”, contó Tirado.
Dice que siguiendo esas instrucciones instauró la denuncia al día siguiente, pero no logró que salieran los invasores. Cuenta que al día siguiente esa pesadilla continuó y que las personas tenían lazos y pitas con las que empezaron a demarcar lotes y se los apropiaron para venderlos en 300 mil pesos cada uno.
El ganadero aseguró que han pasado varios días y que llegó la Fuerza Pública, pero la situación no se ha podido cambiar. Señala que ha conversado con distintos mandos de la Policía a nivel regional sin lograr mejorar lo sucedido.
“La alcaldesa dice que eso no se puede permitir, que es gente que no tiene necesidad, que parece que se quieren robar eso. Es un problema demasiado grande. No sé qué pasa que el inspector va y habla con ellos y vuelve y habla con ellos, y este es el momento donde yo sigo invadido y donde la gente sigue adentro y hacen lo que les da la gana”, reclamó Tirado.
El ganadero dice que ya no sabe qué hacer, porque, por ejemplo, en los últimos días había empezado a sembrar arroz con un tractor. Además, dice que paga impuestos por su finca, además de empleados que le ayudan con ese trabajo como agricultor.
Cuenta que la finca fue herencia de su papá y que siempre se ha caracterizado por ser una “tierra hermosa” que ha estado enfocada en el ganado o la siembra de arroz y que ha sido una tradición familiar.
“No tiene un solo problema, es de una sociedad que es Agropecuaria S.A.S. de la cual yo soy representante legal y único dueño. Esto no es una tierra ni con problemas, ni con extinciones de dominio, ni con el uno ni con el otro. Es una tierra mía y gracias a Dios, al trabajo y al esfuerzo de mi papá, porque era de él y él se murió y ahora es mía como hijo”, contó el ganadero, quien pidió ayuda a las autoridades.