NACIÓN
Joven deportista de 15 años de edad fue asesinada en Amalfi, Antioquia
El homicidio de la joven futbolista Yenifer Loaiza se cometió en la vereda La María.
Este sábado hubo dolor en el municipio de Amalfi, ubicado en el departamento de Antioquia, por el asesinato de una joven promesa del deporte nacional, quien tenía apenas 15 años de edad.
El crimen, que fue cometido en la vereda La María, en el municipio antioqueño este viernes 12 de febrero, según dijeron conocidos de la víctima a medios locales, fue contra Yenifer Andrea Loaiza Marulanda, quien pertenecía a la Corporación Coreda de Amalfi.
Una de las compañeras de Loaiza Marulanda afirmó que a la adolescente “la asesinaron en su propio hogar, en la vereda La María, esa vereda que la vio crecer. Al igual que ella, y muchas otras jóvenes, siempre nos sentíamos seguras, si estábamos jugando fútbol, o simplemente se llegaba la noche, no sentíamos miedo de llegar a casa, ¿miedo de que? si en esta vereda no pasa nada, decíamos…”.
En su lugar natal, la joven era reconocida como una líder juvenil que hacía parte de la Selección de Fútbol Femenino de Amalfi.
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El activista político Gustavo Mestre denunció en su cuenta de Twitter: “Este 12 de febrero de 2021 en la Vereda La María del Mpio de Amalfi, Antioquia, asesinaron a puñaladas a la lideresa juvenil y promesa del fútbol colombiano Yenifer Andrea Loaiza Marulanda, Integrante de la Corporación Coreda de Amalfi”.
#Justicia #NosEstánMatando #NiUnaMas |Este 12 de febrero de 2021 en la Vereda La María del Mpio de Amalfí, Antioquia, asesinaron a puñaladas a la Líderesa Juvenil y promesa del fútbol colombiano YENIFER ANDREA LOAIZA MARULANDA, Integrante de la Corporación Coreda de Amalfí. pic.twitter.com/fRhFJr7QhB
— Gustavo Enrique Mestre Cubillos (@guenmecu) February 13, 2021
Esta joven, además de ser reconocida por su liderazgo, pertenecía a la Selección de Fútbol Femenino de Amalfi. Entre sus compañeros y Coreda recogieron los fondos para darle cristiana sepultura”, agregó el defensor de Derechos Humanos.
Otro caso de feminicidio se registró este viernes, en esta ocasión en la Cañada de Guajimía, del sector de Herrera, en Santo Domingo. La víctima, Génesis Crismel Arias, una menor de 17 años de edad, quien fue acuchillada, asfixiada y sumergida en un tanque de agua con las manos atadas, presuntamente por su novio identificado como Argenis Mambrú, de 39 años.
De acuerdo con medios locales, una vez cometió el crimen, el hombre se dirigió a la habitación de su padre Juan Antonio Mambrú, quien vivía en la misma casa, y le narró lo que había hecho con la adolescente. A propósito, el padre del agresor contó que la pareja mantenía discusiones constantes.
Además, se estableció que la menor se había ido a vivir con su novio Argenis Mambrú, a pesar de que la familia de ella no estaba de acuerdo con dicha relación.
El presunto homicida fue capturado y enviado a prisión preventiva, mientras avanza el proceso judicial en su contra que tiene consternados a los familiares y amigos de la adolescente.
Al momento del traslado del presunto asesino a la cárcel, fue necesario un fuerte dispositivo policial para evitar que lo lincharan.
Mientras que la semana pasada, la juez 27 penal con funciones de control de garantías de Cali acogió la petición de la Fiscalía y dictó medida de aseguramiento, consistente en detención preventiva en establecimiento carcelario, en contra de Anderson García Restrepo, de 27 años, como presunto autor material del delito de feminicidio agravado.
García Restrepo fue capturado el pasado 6 de febrero por agentes de la Policía Metropolitana (Mecal) en el barrio Las Orquídeas de la capital vallecaucana, luego de que fueran informados sobre una riña que se presentaba en un inmueble.
Al llegar al lugar, los uniformados fueron atendidos por la tía del hoy capturado, quien les dijo que su sobrino estaba encerrado en su cuarto con su pequeña hija de 4 años desde el día anterior, y que amenazó con hacerle daño si alguien de la familia trataba de ingresar a la habitación.
Otro familiar del procesado trató de mediar durante 20 minutos para que el hombre abriera la puerta, pero este respondía con negativas y les decía supuestamente que necesitaba un arma. Posteriormente, con una barra de hierro, los agentes derribaron la puerta y al ingresar encontraron a la niña sobre la cama desmayada y, aunque enseguida fue trasladada a un hospital, llegó sin signos vitales.