Santos, a cinco días de cumplir una promesa de campaña

6 de junio de 2014. Colombia vivía días de crispación por cuenta de la campaña presidencial. Óscar Iván Zuluaga, candidato del uribismo, se había impuesto en la primera vuelta y al presidente Juan Manuel Santos le quedaban dos semanas para revertir el resultado de las urnas y conseguir su reelección.

Faltaban dos semanas para la segunda vuelta y Santos, en su condición de presidente candidato, ponía toda la carne en el asador para asegurarse el triunfo. Por las mañanas atendía sus funciones como jefe de Estado mientras que en las tardes lideraba actos proselitistas, como el de aquel 6 de junio.

Ese día tuvo un evento con los adultos mayores, luego otro similar con los pensionados. Allí Santos hizo público un compromiso, apoyar un proyecto de ley para reducir la contribución de los jubilados al sistema de salud. Un viejo clamor de esta población. Dos semanas después Santos resultó reelegido. Desde entonces los pensionados esperan que aquellas palabras sean ciertas.

“Sé que un anhelo de todos los pensionados es que se reduzca la contribución a la salud. Hay un proyecto de ley en el Congreso de la República y yo voy a apoyar ese proyecto de ley”, dijo el presidente antes de recibir un aplauso del público. (Ver video en el minuto 8:38)

Tres años después Santos tiene en sus manos la decisión de cumplir la promesa. Esta semana la Cámara de Representantes le envió las leyes aprobadas en los últimos días de legislatura, y entre ellas está el proyecto de ley del representante Alirio Uribe (Polo) que reduce el aporte en salud de los pensionados del 12 al 4  por ciento.

“En plata blanca quiere decir que al reducir el gasto se aumenta el ingreso”, dijo el presidente Santos el día de su promesa.   

Contexto: Cuatro leyes le costarían al Estado más de 4 billones de pesos anuales

El proyecto liderado por el Polo no tuvo un trámite sencillo, sobre todo en su recta final. Antes del debate definitivo en la plenaria de la Cámara de Representantes, el Gobierno manifestó que cuatro de los proyectos de ley con impacto social podrían costarle al país más de 4 billones de pesos anuales. Uno de ellos, precisamente, era el de los pensionados.

Aún así la plenaria del Senado hizo caso omiso a las recomendaciones del Ministerio de Hacienda, y por mayorías fue aprobado el proyecto. Sin embargo, para que este entre en vigencia necesita la sanción presidencial. El proyecto ya está en el despacho del mandatario, que según la ley tiene seis días para sancionarlo, pues tiene menos de 20 artículos (así lo señala la Ley Quinta). 

Si el presidente Santos sanciona la ley, con su firma cerraría uno de los compromisos que asumió en campaña, cuando buscaba la reelección. Si no lo hace o la ley es objetada la promesa no se cumpliría, al menos por ahora, pues le queda un año de gobierno.

Pero todo apunta a que esta será una de las promesas incumplidas. Por eso un grupo de pensionados radicó una carta al presidente de la república en la que pidieron sancionar la ley aprobada en el Congreso. La carta fue respaldada con más de 500.000 firmas. El último recurso de los jubilados para que el presidente cumpla la promesa del 6 de junio de 2014.