EPM
Juez ordena a alcalde de Medellín que presente las razones por las que pidió la renuncia del gerente de EPM
Ante la solicitud de Álvaro Rendón, exgerente de EPM, un juez ordena a Daniel Quintero, alcalde de Medellín, presentar una declaración por medio de un informe con un plazo de 15 días hábiles.
El pasado 4 de marzo, el Juzgado Décimo Octavo Civil del Circuito de Oralidad de Medellín produjo una respuesta ante la solicitud de practicar pruebas extraprocesales por parte del exgerente de EPM, Álvaro Guillermo Rendón.
Esto con el fin de poder presentar una demanda de nulidad contra el decreto por medio del cual se oficializó su salida de la empresa. Según la defensa de Rendón, en su salida habrían sido vulnerados sus derechos.
El decreto mediante el cual salió el exgerente es el 085 del 1 de febrero de 2021, firmado por el mandatario de Medellín, Daniel Quintero Calle, y la secretaria privada de la ciudad, María Camila Villamizar. Por medio de este decreto “se declara insubsistente un cargo de libre nombramiento y remoción”.
Aunque entre las pruebas extrajudiciales se buscaba hacer una inspección judicial, el juez respondió que esta no era procedente. No obstante, le ordenó a Quintero entregar una declaración por medio de un informe con un plazo de 15 días hábiles.
Tendencias
¿Qué debe contener el informe?
En él se deben responder 4 solicitudes:
1. La adenda que corresponde al acta de modificación bilateral # 39 del contrato Boomt. Según Quintero, esta era un concejo al proyecto Hidroituango que buscaba beneficiar a los contratistas. El juez pidió precisión en la explicación de por qué fue una inadecuada administración.
2. Explicar la razón de la afectación que causó la carta del 31 de enero de 2021.
3. Quintero debe explicar por qué, según él, Rendón puso en riesgo la demanda en curso contra 9,9 billones de pesos contra los diseñadores, constructores e interventores de la hidroeléctrica.
4. Compilar los pormenores de la junta directiva del 1.° de febrero de 2021, en la que se oficializó la salida del gerente, además de especificar la participación de la secretaria privada María Camila Villamizar.
El contexto
La renuncia del gerente Álvaro Guillermo Rendón, quien había adelantado la demanda en contra del Consorcio CCC por la crisis de Hidroituango en 2018 y su presunta responsabilidad, fue sorprendente, pues Quintero y Rendón estaban unidos por una relación muy cercana
No obstante, por lo que se sabe, una de las razones por las que Quintero le solicitó la renuncia a Rendón tuvo que ver con la firma de un Acta de Modificación Bilateral en el que se contemplaba un nuevo plazo de obras; nada extraño que no estuviera dentro de los planes ya conocidos.
Sin embargo, todo tomó otro cariz cuando se supo que en dicho documento no aparecía referenciada la firma Camargo Correa, sino Camargo Correa Infra S. A., nacida de una escisión en febrero de 2018 y que para entonces apenas contaba con un capital de unos miles de millones de pesos. El asunto puntual es que los brasileños habían solicitado que esta firma fuera parte del Consorcio CCC y no Camargo Correa, solicitud que nunca fue aprobada por EPM.
Lo que pudo comprobar SEMANA es que Rendón no firmó el documento. Aparecen dos firmas, la de Santiago García Cadavid, como representante legal del Consorcio CCC, y la de William Giraldo Jiménez, vicepresidente de Proyectos de Generación de Energía de EPM, el hombre que tiene en sus manos todas las decisiones alrededor de Hidroituango.
Aunque en la Alcaldía están consultando las consecuencias de que dicho documento se firmara como si Camargo Correa Infra S. A. fuera parte del Consorcio, Rendón asegura que esto no reviste mayores dificultades y ya fue puesto en conocimiento como un error que se iba a enmendar.
Por otro lado, Rendón dice que las presiones de Quintero sobre EPM ya sobrepasaban lo ético. “El alcalde, la persona que gobierna hoy en Medellín, no es el mismo que conocí hace 15 años. El amigo es coloquial, gran contertulio, pero el alcalde es una persona que se encerró a no oír. Toma decisiones inconsultas, es impredecible, le cierra a uno todas las puertas al diálogo… El deterioro empieza porque él no entiende la regla de oro, la autonomía empresarial, que existe para darles confianza a los mercados. Él piensa que EPM es una secretaría de despacho”.