Nación
Julio Gerlein, el poderoso empresario barranquillero, a imputación de cargos por la fuga de Aida Merlano
El contratista enfrenta un juicio por la financiación de la campaña al Senado de Aída Merlano en el año 2018. Justo en ese momento, le retiró el apoyo a su hermano, el fallecido Roberto Gerlein, para respaldar a Merlano, con quien tenía una relación personal.
Julio Gerlein Echeverria fue citado a audiencia de imputación de cargos por, presuntamente, ejercer presiones para que Aída Merlano no entregará su declaración ante las autoridades judiciales frente a los hechos que rodearon la compra de votos para la campaña del 2018. El poderoso contratista barranquillero fue señalado varias veces por la exrepresentante a la Cámara de haber ejercido presiones para evitar que hablara.
Gerlein Echeverria y Dejón deberán responder por el delito de soborno en actuación penal, mientras que Muñetón será imputado por los cargos de soborno en actuación penal y determinador de falso testimonio. Esto debido a que, según lo narrado por Merlano, el jurista le hizo ofrecimientos de dinero para que no rindiera declaración ante la Corte Suprema de Justicia.
La audiencia se adelantará el próximo 19 de octubre a las 8:00 a. m. ante un juez de control de garantías en Bogotá. La Fiscalía General pedirá una medida de aseguramiento.
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Gerlein actualmente enfrenta un juicio por los delitos de concierto para delinquir, corrupción al sufragante y violación de los topes o límites de gastos en las campañas electorales.
El empresario fue vinculado en agosto de 2018 con el denominado episodio de ‘La Casa Blanca’, que hace referencia al operativo adelantado el mismo día de las elecciones en la sede de Aída Merlano en Barranquilla y desde la cual se coordinó la estructurada compra de votos para favorecer a la candidata Aída Merlano y a la candidata Lilibeth Llinás.
La investigación de la Fiscalía General alerta que Gerlein fue el principal financiador de la campaña al Senado de Merlano, con quien sostenía una relación sentimental. Estas acciones permitieron que se superaran ampliamente los topes establecidos por las autoridades electorales.
Cartel de Sinaloa, el nuevo protagonista de la fuga de Aida Merlano
La Fiscalía General reveló que el Cartel de Sinaloa habría estado detrás de la planeación y ejecución de la cinematográfica fuga de la excongresista Aída Merlano Rebolledo, registrada el primero de octubre de 2019, después de ir a una cita odontológica en el norte de Bogotá. Durante la audiencia de imputación de cargos contra los hermanos Juhass y Jelissa Pineda Matallana, el fiscal del caso reveló las reuniones que sostuvieron con un hombre conocido con el alias de El Boyaco, quien haría parte del Cartel de Sinaloa, la organización dedicada al narcotráfico más peligrosa de México.
“Ya que la fuga de la excongresista estaba planeada y estaría dirigida por el cartel de Sinaloa, quienes, en compañía de alias el Boyaco, no solo se ocuparían de su fuga, sino de su salida del país. No solo con el fin de que se fugara, sino que no declara ante el alto tribunal (...). Estas afirmaciones no se hacen de manera conclusiva o haciendo inferencia sobre algún elemento probatorio. Se trata de afirmaciones obtenidas por un agente encubierto, tomadas de personas que tuvieron directamente conocimiento de las acciones ilícitas que adelantaron para la fuga”, señaló el fiscal del caso durante la diligencia judicial.
El ente investigador indicó que Jelissa Matallana es la persona que ayuda a la exrepresentante a la Cámara a levantarse del piso en el desesperado intento de fuga. Mientras tanto, Juhas Pineda era la persona que la esperaba en una motocicleta, en la esquina de la calle 116 con carrera Séptima, para emprender la huida.
Igualmente, el fiscal del caso reveló que, en medio de la investigación, varios de los agentes recibieron amenazas de muerte por parte de un número cuyo IMEI estaba en México. “En el mensaje se advierte que se trata de miembros del cartel de Sinaloa. El mensaje decía lo siguiente: ‘Si siguen molestando con la gente de la Costa colombiana, ella no va a hablar. Sabemos que ustedes seguirán haciendo lo posible por capturar a los protegidos. Así que lejos de la política con su caso. La famosa Aida no va a hablar. Los saluda Sinaloa, la guerra en las palabras’. Luego de esto salen del grupo y cancelan el número”.
El mensaje tenia la clara intención de afectar la investigación y generar miedo y zozobra en los investigadores que intentaban identificar todas las personas que habían participado en la fuga de Merlano. Durante la imputación, reveló que en la actualidad se adelanta una tercera línea de investigación que relacionaría a agentes del Instituto Penitenciario y Carcelario (Inpec) que se habrían prestado para facilitar la fuga y una obstrucción a la justicia.
Tras la pregunta hecha por la jueza de control de garantías, las dos hermanos aceptaron su participación en el delito de fuga de presos.
El pasado 28 de abril, la excongresista —pese a todas las pruebas en su contra— se declaró inocente del delito de fuga de presos que le imputó la Fiscalía General.