POLÍTICA
La curiosa fobia de Sergio Fajardo que le impactó su forma de hacer política
El exgobernador de Antioquia señaló, no obstante, que le ha sacado provecho a esta situación, pues le ha permitido hacer otro tipo de política.
Las grandes reuniones en plaza pública, con multitudes y pronunciando vehemente discursos desde una tarima, son el escenario ideal de los líderes políticos, se mueven con fluidez, se sienten cómodos. Es su escenario natural.
Sin embargo, en el caso de Sergio Fajardo esto no es así. A pesar de su experiencia como gobernador de Antioquia y sus candidaturas presidenciales, le tiene fobia a subirse a una tarima. Es una experiencia que le resulta “incómoda”.
“Yo nunca me he sentido cómodo en las tarimas, aprendí en política (…) Con ese hecho de subirse a una tarima con un montón de gente enfrente y empezar a hablarle a esa multitud no me siento cómodo”, confesó el exgobernador de Antioquia en diálogo con SEMANA.
Sin embargo, asegura que le ha sacado provecho a esta fobia, pues esto le ha permitido hacer política de otra manera: a pie, caminando.
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“Es una gran riqueza que hemos construido a pie, yo aprendí a dar la mano, aprendí a mirar a los ojos, aprendí a escuchar, aprendí muchas cosas que no sabía y aprendí en la calle, uno por uno”, expresó Fajardo.
El precandidato presidencial de la Coalición Centro Esperanza criticó a quienes prefieren no ir a reuniones políticas en las que hay pocas personas, pues para él es clave el contacto uno por uno.
“Yo aprecio a una persona. Hay muchas veces en política que le dicen a usted ‘¿y cuantas personas van a ir a la reunión?’, X {refiriéndose a un número bajo] y dicen ‘no, para que se va a gastar el tiempo yendo reuniones tan chiquitas’, y para mí —como le digo—, [que] aprendí de a una persona, me marcó en la vida en términos políticos y me sigue marcando”, apuntó.
El exgobernador señaló también que está jubilado desde hace unos años y contó que el dinero que recibe de su pensión es suficiente para vivir porque tiene una vida “austera” y piensa en las cosas básicas, sin interés de enriquecerse.
En este sentido, aseguró que tiene una pensión de alrededor de diez millones de pesos. “Vivo bien, esa es mi mesada, sigo siendo privilegiado porque en Colombia no todos tienen acceso a una pensión, solo una de cada cuatro personas se pensionan y necesitamos que todos pronto lo hagan, por eso soy un afortunado y vivo con todo lo que necesito”, comentó.
Además, aseguró que su intención nunca ha sido ser millonario o algo parecido porque es un “científico y un profesor, y uno no piensa en hacer plata”.
Adicional a lo que recibe de su pensión mensualmente, tiene un ingreso extra debido a que es profesor en el Instituto Tecnológico de Monterrey “y me pagan por ser profesor”, afirmó.
Por otra parte, habló de las enseñanzas que le dejó su padre: “Mi papá era un ser maravilloso que nunca hablaba mal de nadie, disfrutaba de que a los demás les fuera bien, lo que es muy raro de ver aquí en Colombia, entonces aprendí a ser noble y respetuoso con los demás”.
Finalmente, aseguró que vive muy feliz y enamorado de su pareja. “Este corazón está muy, pero muy lleno de amor”, dijo.
Vale la pena recordar que Fajardo se encuentra en una relación con la excanciller María Ángela Holguín desde hace varios años luego de separarse de Lucrecia Ramírez Restrepo.