NACIÓN

Esta es la declaración que hundió a Samuel Moreno

El testimonio de Inocencio Meléndez, exdirector jurídico del IDU, fue clave para destituir e inhabilitar al exalcalde de Bogotá.

9 de agosto de 2015
Inocencio Meléndez y Samuel Moreno | Foto: Archivo Semana

La semana pasada la Procuraduría dio un duro golpe al exalcalde de Bogotá Samuel Moreno por su participación en el denominado ‘Carrusel de la Contratación’.

Después de analizar más de 5.000 folios y 40 testimonios, la entidad lo sancionó e inhabilitó por 18 años para ocupar cargos públicos. La sanción está relacionada con la cesión del contrato 137 de la fase III de Transmilenio que el Grupo Nule le hizo al Grupo Empresarial Vías de Bogotá (Conalvías), en el que, presuntamente, el entonces mandatario distrital tenía intereses directos e ilegales.

La decisión del organismo no fue tomada porque sí. Uno de los testimonios claves para comprobar el vínculo de Moreno con esta cesión fue el de Inocencio Meléndez, exdirector jurídico del Instituto de Desarrollo Urbano (IDU).

Semana.com conoció las declaraciones –de más de cinco horas- que Meléndez hizo ante el procurador delegado, que terminaron inhabilitando al exalcalde de Bogotá.

El inicio

Todo se remonta al 2010, cuando Liliana Pardo, entonces directora del IDU, debía decidir si caducaba o cesionaba el contrato para la fase III del sistema de transporte masivo. “Todo con autorización del alcalde Samuel Moreno”, manifestó Inocencio Meléndez.

La contratación estaba en ese momento con el Grupo Nule y aunque ellos querían escoger las empresas con las que harían la cesión, contó Inocencio Meléndez que Liliana Pardo no dejó.

“A Liliana no le interesaba ninguna opción de los Nule, ella no quería nada con ellos. Ella desde un principio quería que fuera Conalvías”, dijo Meléndez.

Después de que se decidió que se empezaría el proceso de cesión –narró Meléndez-, Liliana Pardo le pidió al exdirector jurídico que hicieran “una cesión que no tuviera problemas”. Fue así como hicieron un plan con unos “inamovibles”.

Liliana Pardo le pidió a Meléndez que fuera a una reunión y les expusiera los requisitos a las empresas interesadas. Casualmente Conalvías fue el único que no estuvo ese día.

El contrato de cesión ponía tantas exigencias, que, según contó Meléndez, todas las empresas desistieron de obtenerlo.

El único interesado

Sin embargo, Conalvías sí estaba interesada. Aunque el representante de esta organización no fue a la reunión que Inocencio convocó, según el mismo Meléndez, ellos ya tenían el contrato porque Liliana se lo había enviado.

“Ese documento que yo dejé en correo magnético salió del correo del IDU al de Conalvías. Por eso no fueron a la reunión, porque ellos ya sabían lo que estaba pasando (…) Claro, Liliana me mandó a dar esa reunión para espantar a los otros”, dijo.

Fue así como, según Inocencio, Liliana Pardo entregó el contrato. “El argumento de Liliana fue que le entregaba la cesión a Conalvías porque era el único que aceptaba las condiciones en que se encontraba el contrato”, expresó.

Según Meléndez, el día que se firmó la cesión en el Hotel Tequendama él no estuvo y se enteró después cuando revisó un informe. “Bajo juramento se lo digo, el día que se firmó la cesión en el Hotel Tequendama, yo me enteré después de la cesión (…) A mí me expropiaron de las funciones jurídicas de la cesión (…) ¿A qué director razonable se le ocurre no invitar al director jurídico a la firma del contrato?”, dijo.

Aunque Conalvías no cumplía los requisitos para tener el contrato de cesión, en el IDU luego modificaron todo para que no hubiera problema alguno en el contrato.

“Quien hizo la evaluación financiera, técnica y legal fue Luis Rafael Barrera Márquez, la hizo como subdirector, por orden de Liliana (…) Él hizo el informe diciendo que Conalvías cumplía”, dijo Inocencio.

¿Dónde entra Moreno?

Pero Liliana no actuaba sola. Inocencio, durante toda la declaración, afirmó que Liliana Pardo le contaba que todo lo que hacía tenía la autorización del alcalde Samuel Moreno.

“Cuando ella venía al despacho decía ‘el señor alcalde me autorizó a esto y a esto’ (…) En las reuniones ella llamaba y hablaba con el señor alcalde”, manifestó.

En la declaración, Inocencio Meléndez aprovechó para asegurar que había otras personas que podrían estar vinculadas y no están siendo investigadas.

“En mayo del 2010 cuando yo salí del IDU, los únicos que estaban firmados eran los otrosí 5 y 6, que era aprobar la cesión. Los que comprometieron los recursos públicos eran del 7 en adelante, y yo no estaba ya en el IDU. Estaban Néstor Eugenio Ramírez (también exdirector del IDU) y de jurídica estaba María del Pilar Bahamón Falla, y ninguno de ellos están vinculados en nada”.