JUSTICIA
Así fue la negociación de Santrich con el cartel de Sinaloa
A pocas casas de la Dijín en Bogotá, el exguerrillero montó su casa y centro de operaciones, que era monitoreado por la DEA y las autoridades colombianas. Según Estados Unidos, planeó el envío de 10 toneladas de coca y alcanzó a recibir un pago de USD 3 millones.
En el momento en que la Fiscalía y la DEA adelantaban una investigación en contra de poderosos integrantes del cartel de Sinaloa que planeaban comprar cocaína en Colombia, comenzaron a salir en las interceptaciones unos inesperados vendedores. Se trataba de nada menos que el exjefe del equipo negociador Jesús Santrich, acompañado de Fabio Simón Younes Arboleda, Marlén Marín y Armando Moreno, alias el doctor.
Los acercamientos se hicieron en la propia casa de Santrich, una vivienda de dos plantas ubicada en la carrera 73C No. 25 F-14 del barrio Modelia, a tan solo pocos metros de la sede de la Dijín en Bogotá. El exintegrante de las Farc fue monitoreado cuando ofreció la mejor calidad de droga, la cual tenía a disposición en laboratorios clandestinos y manifestaron tener acceso a aviones registrados en Estados Unidos para su envío.
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Un año después de la firma del acuerdo de paz con las Farc, el primero de noviembre de 2017, se hizo entrega de una pequeña pero significativa muestra de la calidad de droga que tenía para ofrecer el exguerrillero. Ese día, en el lobby de un hotel de Bogotá, Santrich envió como señal de su capacidad y seriedad 5 kilogramos de cocaína. Así lo revela el indicment, con el que las autoridades estadounidenses solicitaron circular roja de Interpol, para la captura de Santrich y sus tres colaboradores en cualquier parte del mundo, así como su extradición a los Estados Unidos.
"Participaron en una serie de reuniones en las cuales discutieron proveer miles de kilogramos de cocaína a otros individuos. La droga sería importada a los EE.UU. y finalmente decidieron darle a esos individuos una muestra de 5 kilogramos"
Un día después de esta muestra, se realizó una reunión documentada por las autoridades estadounidenses en la casa de Santrich. Lo que demandaban los integrantes del cartel de Sinaloa eran 10 toneladas de cocaína por lo que se acordó un pago de 15 millones de dólares en Estados Unidos. El indicment asegura que el 8 de febrero del año 2018, Santrich y uno de los implicados se reunieron de nuevo con los compradores de la cocaína en la casa de Modelia para hacer la operación de cierre.
Durante el encuentro, convinieron que este dinero sería entregado a otro de los integrantes de la organización en Miami. SEMANA conoció que se habría hecho un primer pago de 3 millones de dólares de Estados Unidos en cumplimiento del pacto, que incluía la entrega de 7 toneladas de cocaína para una fecha cercana al 8 de marzo, y las 3 restantes después.
Santrich aparece en las conversaciones como el coordinador de toda la operación desde Colombia. A su lado trabajaron Marlon Marín, un sobrino de Iván Márquez; Armando Gómez España, padre de la exreina Carolina Gómez; y Fabio Simón Younes Arboleda. Los cuatro fueron solicitados en extradición mediante circular roja de Interpol y deberán responder por conspiración para exportar cocaína a los Estados Unidos, a que se refiere el Título 21, Código Penal Federal.
La operación contó con la interceptación de las comunicaciones telefónicas, los seguimientos de los integrantes y hasta contacto con el laboratorio de cocaína a cargo de proveer la droga. El indicment es tan detallado que revela hasta las conversaciones que sostuvo Santrich en la sala de su propia casa y en las que se comprometió a dar cumplimiento con el envío de droga.
Incluso, en uno de los apartes, el documento asegura que Santrich le dijo a sus interlocutores que también vendía droga a otras organizaciones mafiosas.
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La finalidad de la orden de captura es la extradición, por lo que a partir de este momento comienza el trámite que tendrá un primer capítulo ante la Jurisdicción Especial para la Paz; después ante la Corte Suprema de Justicia y la decisión definitiva en cabeza del presidente de la república. En la noche del lunes, Juan Manuel Santos aseguró que no habrá tolerancia con integrantes de las Farc que siguieran delinquiendo después de la firma de acuerdo. "La construcción de paz requiere del absoluto cumplimiento de la ley, es lo que exige el pueblo colombiano", dijo.
Durante los operativos de captura, el Departamento de Estado de Estados Unidos y las autoridades colombianas adelantaron conjuntamente allanamientos en las oficinas y residencias de los integrantes de la organización.
"Los detenidos traicionaron los valores y principios de los acuerdos de paz. A todos los reinsertados que permanecen en la legalidad los invito a perseverar en la democracia y en el cumplimiento del orden legal. Para ellos todas las garantías de la Fiscalía, así como el respeto y la protección del Estado de derecho", dijo el fiscal Néstor Humberto Martínez.