La nueva guerra criminal que amenaza a Barranquilla y tiene al Clan del Golfo como protagonista

La alianza criminal entre la banda de los Pepes y el Clan del Golfo es un hecho en Barranquilla y el Atlántico. Así se lo dio a conocer a SEMANA una fuente judicial. Han sido varias las alertas dentro de la Policía Metropolitana por atentados de grupos ilegales como las disidencias de las Farc e, incluso, la llegada de una nueva sección del Clan del Golfo, que quedó en evidencia el pasado lunes 12 de agosto, pues más de 20 banderas fueron colocadas en diferentes puntos del departamento.

Esta situación fue advertida por SEMANA un día antes, pero, al parecer, no fue suficiente el esfuerzo de la Policía Metropolitana para evitar esta horrorosa acción que causó pánico en la ciudad y los municipios del Atlántico. Desde la aparición de las banderas, los panfletos a empresas transportadoras no se hicieron esperar, y el Gaula de la Policía junto con el del Ejército Nacional encendieron las alarmas y ahora realizan las verificaciones correspondientes.

En Barranquilla, Soledad, Malambo, Puerto Colombia e, incluso, Galapa hay una guerra sin precedentes por las rentas criminales que las autoridades judiciales no han podido contener, y se puso de manifiesto con los casos de homicidio, pues las víctimas, en su mayoría, tienen nexos con estas organizaciones criminales, como los Pepes (aliados al Clan del Golfo) o los Costeños.

De dicha guerra ya se han conocido los crímenes de pesos pesados, como el de Wilmer Ariza Sánchez, de 51 años, alias Matacaballo, jefe financiero de Digno José Palomino, máximo líder de los Pepes, y a quien le dispararon cuando salía de un gimnasio el pasado viernes 9 de agosto.

Según los testigos, Ariza Sánchez fue abordado por un hombre que lo baleó por la espalda y lo dejó sin vida en el lugar. El sicario, al parecer, huyó en un vehículo con rumbo desconocido y las autoridades nada han dicho sobre el responsable. Tras el crimen, SEMANA conoció mediante una fuente judicial de inteligencia que esta orden la habría entregado alias Castor, y efectivamente la banda de los Costeños lo confirmó días después por medio de un panfleto en el que aseguraron que no permitirán la alianza entre los Pepes y el Clan del Golfo.

Otra fuente de alto crédito sostuvo que, aun cuando los cabecillas, como Digno José Palomino y Jorge Eliécer Díaz Collazos, se encuentran en un centro carcelario, nada se mueve afuera sin su consentimiento.

“Hay unas personas individualizadas, pero estamos recolectando material probatorio para poder dar golpes a los que están liderando el accionar criminal desde afuera. Hay capturas, pero siempre se relevan los puestos dentro de la organización”, precisó. Entre esos se encuentra un sujeto conocido con el alias de Inglaterra; así lo revelaron desde el nivel central. Lo que llama la atención es que en Barranquilla y el Atlántico poco es lo que se sabe de este sujeto, que estaría dando órdenes sanguinarias.

De igual manera, afirmó que no descartan la complicidad de servidores públicos en medio de este entramado criminal que hoy vive el Atlántico, incluyendo a su capital. “Hay pruebas que apuntan a la complicidad de algunos integrantes de la fuerza pública, pero es necesario tener todas las pruebas para acusar a las instituciones. Es complicado, porque hay cooperación, pero manejan la cautela necesaria. Solo esperamos un paso en falso”, añadió la fuente.

Es tan grave lo que se vive en el Atlán-tico que tuvo que llegar la cúpula de la Policía desde Bogotá para reunirse con las autoridades administrativas locales.