POLÉMICA
Destituciones a quienes denuncian irregularidades en la Policía
La Comisión Disciplinaria de la Policía destituyó en menos de 15 días a dos uniformados que han denunciado hechos graves en la institución. La defensa pide a la Procuraduría vigilar los procesos.
Cada vez son más sonados los casos de uniformados con nexos criminales, hechos que han llevado a que sea pisoteado el nombre de una de las instituciones más respetada por los colombianos, y que ha venido cayendo en lamentables episodios de corrupción, y narcotráfico.
Sin embargo, al interior de la institución hay una lucha diaria que se refleja en inconformidades de los uniformados, que pelean por salarios justos, jornadas más equitativas y mismas oportunidades para los ascensos.
Muchas de estas problemáticas han pasado a los medios de comunicación. Entre las más sonadas está, la que hizo el capitán Ányelo Palacios sobre las denuncias por la llamada ‘Comunidad del anillo’, que se refiere a una red de prostitución masculina dentro de la institución.
Ello, sin olvidar, el video que se propagó en redes sociales en la que el patrullero Rubén Darío Rozo, que junto a otros policías encapuchados criticó al presidente Juan Manuel Santos, cuando por norma la Policía es un cuerpo que no puede deliberar. Precisamente, al romper esta norma, dicha intervención fue vista como un acto de oportunismo político
Los protagonistas de estas dos polémicas recibieron en los últimos días un golpe para su carrera profesional, puesto que el Comité Disciplinario de la institución decidió destituirlos. ¿Qué tan justo fue este proceso?
Para el abogado Jesús Vergara, existe una persecución contra las personas que denuncian las condiciones laborales de todos los integrantes del nivel ejecutivo en la Policía. “Estamos esperando que la Procuraduría asuma el poder preferente en estos casos porque consideramos que no hay garantías judiciales para los patrulleros”, dijo.
Aseguró que los argumentos de la destitución de los dos uniformados no están debidamente soportados y por eso confía darle la vuelta a la decisión.
Los casos
La sanción contra el patrullero Rubén Darío Rozo, se convierte en la más dura que ha tomado la Policía al imponerle una sanción de 17 años, por divulgar una serie de videos en Youtube acompañado de otros uniformados encapuchados para denunciar irregularidades dentro de la Institución.
Según el fallo disciplinario de mi primera instancia de la Oficina de Control Disciplinario Interno de la Policía, Rozo cometió una falta gravísima al "realizar y promover actividades tendientes a paralizar total o parcialmente la prestación del servicio en la policía”.
El patrullero denunció en sus videos acoso laboral, maltratos, vulneración de derechos y desmotivación de los integrantes de la institución que no forman parte del cuerpo de oficiales. Asimismo fue denunciado penalmente ante la Justicia Penal Militar por los presuntos delitos de amenazas, injuria y utilización ilegal de uniformes.
Cabe recordar que esta destitución se conoció pocos días después de la destitución en primera instancia del capitán Ányelo Palacios, relacionado con el escándalo de la ‘comunidad del anillo‘.
La decisión señala que Palacios fue destituido durante 12 años, por injuria y calumnia. “Es destituido, por haber incurrido en una injuria, por denunciar los hechos que tienen que ver con la ‘Comunidad del Anillo’ (…) es un fallo muy curioso porque dice que él replicó unas situaciones que tienen que ver con aspectos deshonrosos de algunas personas cuando realmente lo que él está denunciado son hechos que le ocurrieron en calidad de víctima”, señaló el abogado.
A pesar de esta determinación el capitán Palacios seguirá vinculado a la Policía de Bogotá, a donde fue transferido hace un mes, mientras se resuelve en otra instancia su situación legal.
Estos casos se suman a decisiones como la destitución de la a capitán Tania Rodríguez. Ella es la oficial que desde marzo de 2014, siendo la jefe de talento humano de la Escuela de Carabineros de Vélez (Santander), Mayor General Manuel José López Gómez, denunció serias irregularidades con el manejo de varios recursos de la Escuela, que dejaban al descubierto mensuales desfalcos millonarios en el centro de formación policial.
Dichas denuncias involucran directamente al coronel Jorge Evelio Palomino López, hermano del entonces director de la institución, el general Rodolfo Palomino.
Todos estos casos están pendientes de una segunda evaluación para quedar en firme. Los uniformados, que dicen haber cumplido con su deber de haber denunciado las irregularidades al interior de la institución, esperan que la justicia falle a su favor y sean restituidos a sus funciones.