NACIÓN

Las FARC no retrocederán en enfoque de género

Semana.com habló con Victoria Sandino, miembro del equipo negociador en La Habana y encargada del tema. Dice que están dispuestos a explicar, a ampliar, pero no a ceder.

11 de octubre de 2016
Victoria Sandino, coordinadora de la subcomisión de género de la mesa de conversaciones de La Habana. | Foto: Archivo particular

El enfoque de género que quedó plasmado en los acuerdos entre las FARC y el Gobierno dividió al país mucho más de lo que cualquiera hubiese imaginado. El expresidente Uribe, el exprocurador Alejandro Ordóñez, las iglesias cristianas y evangélicas e incluso muchas comunidades católicas acusaron al Acuerdo Final con ese grupo guerrillero de querer imponer lo que ellos denominaban la "ideología de género" para acabar con los valores de la familia tradicional. 

La victoria del No en las urnas en parte radicó en que muchos colombianos creyeron ese mensaje. Por eso, estos días el Gobierno ha lanzado una estrategia para cautivar a las iglesias cristianas y sumarlas al proceso de paz. Uno de los puntos que para ellos es fundamental es el tema de género. 

Semana.com habló con Victoria Sandino Palmera, integrante del Estado Mayor del Bloque Occidental de las FARC y coordinadora de la subcomisión de género en la mesa de conversaciones de La Habana. Sus palabras no dejan lugar a interpretaciones: Las FARC se sostienen en que no van a ceder el tema del enfoque de género, para ellos una de las piezas fundamentales de los acuerdos de paz.

Semana.com: ¿Cómo los tomó el triunfo del No?

Victoria Sandio: Sabemos que hay momentos difíciles como este, pero no perdemos la disposición de salir adelante con este acuerdo que pone fin a esta guerra de más de 53 años. Con respecto a nuestra gente que está en los campamentos, tenemos tranquilidad. Sabemos que en un primer momento hubo un impacto fuerte, muy doloroso, pero inmediatamente pensamos en que la lucha por la paz seguía, más ahora viendo el ambiente de movilización en Colombia. Eso nos llena de mucha esperanza.

Semana.com: En este momento hay una fecha de levantamiento del cese del fuego. ¿Qué va a pasar el primero de noviembre?

V.S.P: Hemos oído del mismo ministro de Defensa que el primero de noviembre no es que se inicie la guerra de nuevo. Eso sería algo tremendamente lamentable. Nuestra gente ha estado preparada. Pero nosotros estamos trabajando por el cese al fuego definitivo. Y la prueba está en no se ha presentado ningún hecho que ponga en riesgo ese cese definitivo.

Semana.com: Se ha visto un cambio de tono en las FARC. Ahora suenan más conciliadores que cuando comenzaron los diálogos. Pero muchos se preguntan si ustedes estarían dispuestos a volver a la guerra de no llegarse a un acuerdo.

V.S.P: Nosotros sí estamos apostando a la paz. Esto es definitivo. No es retórica. Este es un proceso de paz que ha adquirido mucha madurez política y que es necesario defenderlo. No podemos echar al bote de la basura cuatro años y medio de conversaciones. Me preguntas que si queremos volver a la guerra. No, no queremos volver a la guerra, por supuesto que no. Pero, independientemente de ello, el pueblo colombiano sabrá responder si llegara el momento.

Semana.com: ¿Qué mensaje les envía a los promotores del No? Incluidos Uribe, Ordóñez y ciudadanos en general…

V.S.P: En un comunicado conjunto presentamos nuestra disposición de conversar, no sólo con los promotores del No. También con los del Sí y con los abstencionistas, que fueron mayoría. Estamos hablando de más de 20 millones de abstencionistas con los que tenemos que conversar. Queremos hablar con los jóvenes que se han ido movilizando, con las mujeres que han luchado por la paz, con los indígenas, poblaciones negras. Y por supuesto con los del No, que no son exclusivamente del Centro Democrático. Son muchos sectores. Tenemos disposición de hablar, de aclarar, de poder profundizar sobre todas las dudas que tengan respecto al acuerdo final.

Semana.com: Martha Lucía Ramírez proponía que quienes cometieron delitos de lesa humanidad fueran recluidos en colonias penales agrícolas, que son centros que tienen un régimen penitenciario, si mal no entiendo. ¿Estarían dispuestos a eso?

V.S.P: Si usted, que tiene la información inmediata, no lo entiende, tampoco lo entenderíamos la mayoría de colombianos. Ahora, no es cierto que no va a haber justicia, no solamente para quienes hemos estado en la guerrilla, sino para todo el mundo. Especialmente para los militares. No sé si usted conoce el pronunciamiento de los militares que están presos en las cárceles: ellos dicen que se acogen a la jurisdicción especial porque lo que hemos acordado es una nueva justicia, una justicia especial que posibilita que todos los que hemos estado en el conflicto respondamos ante esos mecanismos. Ahí no hay diferenciación. Y eso debemos defenderlo todos los colombianos.

V.S.P:  Muchos se preguntan hasta qué punto los promotores del No van a ceder, hasta qué punto el Gobierno va a ceder, hasta qué punto las FARC van a ceder. ¿No cree que todos deberían ceder algo?

V.S.P:  El tema no es ceder ante lo acordado. El acuerdo es total y estamos por la idea de que se implemente tal cual se planteó. Y segundo, no es que cedan las FARC ni el Gobierno. Aquí decidimos dos partes. Y entre los dos queremos oír a todas estas personas: a los del No, a los del Sí y la abstención. Claro que tenemos la disposición. Por eso pedimos que esas propuestas sean constructivas, para que pasada esa ronda de opiniones, de manera conjunta podamos decidir los ajustes, que no será al acuerdo como tal; sino a inclusiones, aclaraciones o adendas, que puedan facilitar la comprensión del acuerdo. Con mucho gusto lo haremos. Y que todo vaya en beneficio de fortalecer lo que aquí hemos logrado: terminar la guerra.

Semana.com: A usted, que participó específicamente en el tema de género en los acuerdos, ¿qué reflexiones le deja el debate que se dio?

V.S.P:  No solamente nos sorprendió ese debate, sino que nos dolió profundamente. Y nos duele porque se está engañando a la gente. Se les está engañando con mentiras, con falacias que no tienen nada que ver con lo pactado en el acuerdo. Porque además, por primera vez, se reconoce en un proceso de paz los derechos de las mujeres y de la población LGBTI. Y resulta que no entendemos cómo la gente se puede oponer a eso basándose en mentiras.

Semana.com: Pero ¿ustedes no estarían dispuestos a replantear el enfoque de género si de eso dependiera destrabar el proceso?

V.S.P:  En absoluto estaríamos dispuestos a excluir el enfoque de género de los acuerdos. Mal haríamos en sacar del acuerdo un asunto que vela por los derechos de las mujeres, de la población LGBTI, ¡si es que si somos más de la mitad de la población!

Semana.com: Pero si lo que buscan es hacer política sin armas, ¿no podrían elevar esas propuestas en otras instancias? ¿Vale la pena poner en riesgo el acuerdo por un asunto que se podría discutir en otro escenario?

V.S.P: Eso sería renunciar a nuestro anhelo por las reivindicaciones de las mujeres, el respeto a los derechos de la comunidad LGBTI. Esto es un avance. No es nuestro anhelo y aspiración permitir que se retroceda. Tenemos la disposición de hablar, aclarar, incluir notas aclaratorias frente al enfoque que se plantea, pero eso es distinto a que tengamos que ceder o permitir que se quite de los acuerdos el enfoque de género. De lo contrario, estaríamos retrocediendo y eso sería tremendo.