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Las garras del horror: madre logró rescatar a su hijo de temida estructura criminal que drogaba niños para reclutarlos en Bogotá
La organización era liderada por un disidente de las Farc conocido con el alias de Compa, quien logró sembrar el terror en una zona de Rafael Uribe Uribe con secuestros, torturas y hasta un cementerio de víctimas en plena reserva forestal.
SEMANA conoció la historia de una valiente madre que lideró una búsqueda implacable para dar con el paradero de su hijo, quien terminó reclutado por una temida organización criminal que por años sembró el horror en un sector de la localidad de Rafael Uribe Uribe, en el sur de Bogotá.
Lo que empezó como la desaparición de un menor, terminó dejando al descubierto una poderosa estructura que lideraba un disidente de las Farc desde la cárcel.
El centro de torturas y crímenes de la estructura quedaba ubicado en un sector conocido como ‘La Finca’, y gracias al trabajo de la Fiscalía y la Sijín de Bogotá, se logró desarticular la organización criminal con la captura de 21 integrantes. Entre ellos, quedó plenamente identificado alias Compa, el disidente de las Farc que seguía delinquiendo mientras permanecía preso en Santander.
Una de las piedras angulares para dejar al descubierto la temida estructura criminal fue la desaparición de un menor que habría sido reclutado por la banda a través de drogas para convertirlo en un expendedor, campanero y esclavo de la organización que venía patrocinando el terror en el sur de la capital del país.
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SEMANA tuvo acceso a la denuncia que puso la mamá del adolescente a la Policía Judicial, en la que contó detalles escabrosos de todo lo que descubrió en la búsqueda inalcanzable que hizo para dar con el paradero de su hijo. Todo empezó el 28 de enero de este año, cuando la mujer llevó el caso ante las autoridades.
En el documento se detalla que en el sector de Puentes, en el barrio Diana Turbay, al sur de la capital, funcionaba una olla de droga desde hace por lo menos 7 años. El conocido lugar por varios habitantes de la zona era identificado como el epicentro de la venta de estupefacientes y funcionaba por el rol que cumplían varias personas para vender los narcóticos, campaneros que cuidaban la zona y hasta una menor de edad que habría reclutado a varios niños.
En la denuncia se identificó a una mujer con el alias de ‘Mamá', quien sería la madre biológica de varios de los involucrados que delinquían en la olla de vicio y hasta habría utilizado a su hija, una adolescente de apenas 15 años, para que con sus encantos físicos atrapara a otros niños que terminaban reclutados por la banda.
Uno de esos casos fue el de la valiente madre que terminó buscando a su hijo en las entrañas de la olla, y para hacerlo, tuvo que ganarse la confianza de ‘Mamá', para que le permitiera ingresar a la vivienda que todos los días era visitada por habitantes de calle y diferentes personas que iban detrás de la droga.
En uno de esos episodios en los que desconocía el paradero de su hijo, le pidió permiso a alias ‘Mamá' de ingresar a la casa donde funcionaba la olla de vicio para buscarlo y después de que consiguió la autorización, dice la denuncia que “comencé a revisar las habitaciones y en la primera habitación, me encontré un niño de aproximadamente 9 años que estaba somnoliento, como drogado”.
Ante la escabrosa imagen, la mujer tomó más fuerza para encontrar a su hijo, pero en el recorrido, relata que “pase a la segunda habitación y encontré un promedio de cuatro, cinco niñas entre los 12 a 15 años. Ellas se encontraban acostadas, durmiendo”.
Y hasta que llegó a la tercera habitación, donde “encontré que mi hijo estaba acostado en una cama y en compañía de una joven. Yo levanté a mi hijo, pero estaba muy ido, como drogado. Le dije que nos fuéramos, pero él no se quería ir conmigo”.
Finalmente, el joven salió de la olla junto a su madre y tuvo que pasar por un largo proceso de rehabilitación para superar el difícil episodio que, según la denuncia, han tenido que pasar varios jóvenes de Rafael Uribe Uribe, a quienes los vuelven adictos a diferentes drogas para terminar reclutados por la estructura criminal que sembró el terror en la localidad de Rafael Uribe Uribe.
La Fiscalía Seccional Bogotá y la Sijin lograron desarticular la estructura y dejar al descubierto como alias ‘Compa’, disidente de las Farc, se hizo con el control de la zona a través de negocios criminales como la olla que funcionaba en el sector del Puente, pero también por medio del secuestro, las extorsiones y los descuartizamientos que habrían realizado en ‘La Finca’, un sector que se habría convertido en un cementerio con todas las víctimas de esa organización.