Las movidas del petrismo y el uribismo para 2022

En la competencia por la Casa de Nariño, el candidato que tiene el camino más despejado es Gustavo Petro. El líder de la Colombia Humana les madrugó a sus demás competidores y su inscripción en el tarjetón es un asunto de trámite, pues ya tiene el aval de la Unión Patriótica y lo que buscará es hacer que se sumen más partidos y aliados en la consulta interpartidista de marzo del próximo año. Allí se medirá con Alexánder López, el candidato del Polo, y con otros líderes de la izquierda, como el exgobernador del Tolima Guillermo Alfonso Jaramillo y Francia Márquez. Nadie duda de que Petro ganará holgadamente esa competencia.

Lo que sí va a ser prácticamente imposible es que logre ser parte de la coalición de la centroizquierda, pese a que esta semana la Alianza Verde autorizó conversaciones con él. Lo más probable es que esos diálogos terminen en nada, ya que líderes como Sergio Fajardo, Angélica Lozano, Iván Marulanda y Juanita Goebertus vetaron el nombre del exalcalde de Bogotá.

Por esa razón, la foto de 2018 se va a repetir en 2022, al menos en la primera vuelta presidencial, con la izquierda y la centroizquierda divididas. Ambas vertientes se disputarán el tiquete a segunda vuelta. Para lograr su objetivo, Petro destapó sus cartas y reveló parte de su estrategia al presentar lo que él llamó el “Pacto Histórico”, con el cual busca arrasar en las elecciones al Congreso. La meta es obtener 55 curules en el Senado y 86 en la Cámara, con el fin de tener las mayorías y tramitar reformas estructurales sin contratiempos. La proclama de ese pacto fue leída por la reconocida actriz Margarita Rosa de Francisco, a quien muchos quieren ver en el Senado o incluso siendo la fórmula vicepresidencial de Petro.

La ambiciosa meta del líder de la Colombia Humana para las elecciones del Congreso va más allá de tener el control del Legislativo, pues una victoria significativa en marzo de 2022 le dará fuerza electoral –y anímica a sus electores– para encarar la primera vuelta, programada para mayo. Por eso, debido al portazo que le han dado algunos líderes de la Alianza Verde, Petro busca aliados para su causa. Se sabe que tendrá el apoyo de Clara López, quien fue su fórmula en 2010; del PCN (Proceso de Comunidades Negras); del movimiento Fuerza Ciudadana, fundado por el gobernador del Magdalena, Carlos Caicedo; también, seguramente, del partido Comunes, que agrupa a los exmilitantes de las FARC, y del senador Roy Barreras, a quien tampoco recibieron en las toldas de Sergio Fajardo.

El senador Armando Benedetti, aliado clave de Petro, es más optimista frente a la posibilidad de que el líder de la Colombia Humana logre sumar más fuerzas. “Estoy seguro de que va a haber unidad, pero no será en uno ni dos meses, va a haber unidad cuando en las encuestas, o en la aceptación en la gente, una facción duplique a la otra”, dice Benedetti, quien cree que Petro llegará a la segunda vuelta y allí recibirá el respaldo de quienes hoy lo vetan. Pero hay que recordar que en 2018, Fajardo no lo respaldó frente a Iván Duque y nadie puede asegurar hoy que ese apoyo sí llegará en esta oportunidad.

En los últimos días, la más reciente encuesta de Datexco, divulgada por W Radio, reveló que Petro es el político cuya imagen favorable creció considerablemente entre octubre del año pasado y enero de 2021, al aumentar nueve puntos porcentuales (está en el 42 %). Aunque tiene mejor imagen favorable que Petro, Fajardo solo creció un punto porcentual y está en el 51 %.

Uribe, a la expectativa

Por los lados de la derecha y la centroderecha hay expectativa y se analizan las movidas de Petro y de la centroizquierda, y la posibilidad de que el rector de la Universidad de los Andes, Alejandro Gaviria, sea candidato. El expresidente Álvaro Uribe es quien organiza las movidas de este bloque, donde van a confluir los precandidatos del Centro Democrático y una lista de figuras de otros partidos como La U, Cambio Radical, el Partido Conservador, un sector del Partido Liberal y figuras independientes como Federico Gutiérrez.

La carta de Tomás Uribe, que genera entusiasmo en el uribismo, sigue vigente y nadie descarta hoy que al final decida dar la pelea por la Presidencia y aglutine a todo el Centro Democrático. De hecho, al hijo de Uribe se le vio esta semana en una reunión con concejales, diputados y congresistas del Centro Democrático en Pereira. Otros potenciales candidatos son el exalcalde de Bogotá Enrique Peñalosa y de Barranquilla Alejandro Char, quienes se vieron esta semana en la capital del país. A ambos los unen las obras y la infraestructura. Y lo más seguro es que también se lance, recogiendo firmas, la vicepresidenta Marta Lucía Ramírez, que tendrá que renunciar en las próximas semanas.

Lo que es un hecho es que esta coalición escogerá a su candidato único en la consulta que se realizará en marzo de 2022, el día de las elecciones al Congreso. El presidente del Partido Conservador, Ómar Yepes, está conversando con quienes han manifestado el deseo de representarlos y entre la baraja están los exministros Juan Carlos Pinzón y Mauricio Cárdenas. Es casi un hecho que la presidenta de La U, Dilian Francisca Toro, será igualmente candidata presidencial. En esta coalición también estarán los partidos Mira y Colombia Justa Libres.

Todos saben que el candidato del Centro Democrático será fundamental para esta coalición. El lineamiento del expresidente Uribe dentro de la colectividad por ahora ha sido hacer acuerdos programáticos, concretar los temas y buscar ayudarle al Gobierno para salir de la crisis de la pandemia y luego sí definir quién los representará. “Las candidaturas quedan quietas hasta agosto”, le confirmó a SEMANA un líder del partido, replicando la instrucción del exmandatario.

Dentro del partido saben que será fundamental el balance del presidente Duque y la imagen con la que llegue a marzo de 2022. Buscarán mejorar por lo menos en tres puntos fundamentales: el éxito del plan de vacunación, una rápida y próspera generación de empleo y la reducción de la pobreza.

A pesar de esto, ya hay algunos nombres que están seguros: Edward Rodríguez, Paloma Valencia, Paola Holguín –que ya recorre Antioquia– y Rafael Nieto. Hay una quinta posibilidad que está en espera y es Óscar Iván Zuluaga, que estaría esperando si se resuelve la situación de su hijo David y el hacker Sepúlveda y otros temas relacionados con Odebrecht.

Sobre Nieto, algunos aseguran que su distanciamiento con el Gobierno le reduciría la viabilidad de sus aspiraciones. Nieto le dijo a SEMANA que no es verdad que haya una pelea con el presidente Duque, aunque reconoció que hay un sector que así lo ha querido mostrar. Dice que con el mandatario tienen una relación cordial.

“El Gobierno tiene tres grandes desafíos de aquí a su culminación, que no son los únicos pero sí los más importantes: el éxito del programa de vacunación, evitar el deterioro y producir éxitos en materia de seguridad, y poner en marcha un gran programa de reactivación económica que se traduzca fundamentalmente en generar tanto empleo y de manera tan rápida como sea posible”, señaló Nieto.

Aún falta poco más de un año para las elecciones al Congreso, en marzo de 2022. Luego, en mayo, será la primera vuelta presidencial. En política el reloj corre más rápido de lo normal y tanto el petrismo como el uribismo se mueven para concretar sus alianzas y candidatos en la próxima batalla electoral.