Quejas por rumbas en la Línea 123 de Bogotá han aumentado durante la pandemia

El Número Unico de Seguridad y Emergencias (NUSE), más conocido como la Línea 123, es la línea telefónica que reúne todos los números de seguridad y emergencias (Policía, Movilidad, Bomberos, Gestión de Riesgos, Secretaría de Salud) del Distrito Capital en uno solo. Precisamente, al analizar los motivos de llamadas a este número de emergencias durante la pandemia, cuando Bogotá y otras ciudades están atravesando una delicada situación hospitalaria por cuenta del coronavirus, llama la atención que hayan aumentado las denuncias por parte de cientos de ciudadanos desesperados por el bullicio de sus vecinos en rumbas con los equipos de sonido a alto volumen.

Según cifras reveladas por el concejal de Bogotá Rolando González, tras conocer un informe pedido a la Secretaría de Seguridad, tan solo las alteraciones de orden público se han convertido en el segundo incidente más reportado por parte de los ciudadanos a la Línea 123 y representa el 30 % de los incidentes de seguridad en las localidades.

“En las noches de los fines de semana la Línea123 recibe en promedio 300 llamadas cada hora por quejas de fiestas y reuniones en #Bogotá. Preocupa no solo porque congestiona la línea, sino porque no podemos olvidar la covid-19“, afirmó el cabildante.

El concejal también aseguró que el 56 % de las quejas en la Línea 123 se concentran en cinco localidades: Chapinero (23.171), Usaquén (22.460), Engativá (20.386), Bosa (14.600) y Ciudad Bolívar (12.736).

El informe también estableció que, en lo corrido del año, abril fue el mes de más denuncias con 40.565 reportes, creciendo un 30 % con respecto al mes de marzo (30.925). “En lo corrido del mes de mayo [hasta el 19, cuando se generó el informe] se identificaron 27.691 llamadas. El 40 % de estas llamadas se presentaron entre la media noche y las 6:00 a. m., y el 30 % entre las 6:00 p. m. y la medianoche; incluso los fines de semana se reciben más de 300 llamadas por hora en estas franjas para este tipo de incidentes”, se resaltó en el informe.

Por lo tanto, para el cabildante González, los incidentes relacionados con el ruido se han convertido en un enorme problema de convivencia entre vecinos que saturan las llamadas de la Línea 123 y que incluso han terminado convirtiéndose en riñas.

“Esto está afectando recibir llamadas por otro tipo de incidentes que afectan la vida y la integridad de las personas, el cual debería ser el principal propósito de la línea 123, tales como accidentes de tránsito, personas enfermas de gravedad o algún tipo de delito”, afirmó González.

Por último, entregó el listado de los 10 incidentes más reportados por los usuarios en la Línea 123, entre el 1.° de enero y el 19 de mayo de 2021, hallando lo siguiente:

Tipo de incidente

- Riñas: 169.802

- Alteración de orden público: 166.644

- Accidente de tránsito: 78.239

- Persona enferma: 59.914

- Verificar situación - Policía: 57.261

- Violación a medida gubernamental: 41.124

- Narcóticos: 40.425

- Embriaguez: 37.465

- Hurto en proceso: 36.748

- Vehículo sospechoso: 35.353

Lo anterior es preocupante si se tiene en cuenta que Bogotá amaneció este miércoles con un nuevo aumento en la ocupación de las camas de cuidados intensivos (UCI) covid-19, pues en este momento el 97,5 % están ocupadas, mientras que el martes el dato llegaba al 97,1 %, lo cual mantiene en alerta máxima a los servicios de salud de la capital, que enfrenta su mayor ocupación desde que se inició la pandemia en marzo del año pasado.

Al observar las estadísticas de UCI para atender la covid-19, se puede notar que el registro viene aumentando considerablemente desde el inicio de la semana pasada, pues de las 2.231 camas reportadas ya han sido asignadas 2.175 (97,5 %) a pacientes en estado grave por complicaciones relacionadas con el virus.

Es decir, que en este momento solo quedan 56 camas de este tipo, en un momento en el que Bogotá está registrando cerca de 6.000 casos diarios de coronavirus, como ocurrió el martes.

La ocupación de UCI general también está en un nivel muy alto, ya que de las 2.713 camas de cuidados intensivos que tiene la ciudad se encuentran ocupadas 2.599 (el martes eran 2.579 unidades), según cifras divulgadas por el Observatorio de Salud de Bogotá (SaluData).

En este momento quedan 114 camas (20 menos que el martes), lo cual pone en más dificultad a las autoridades del Distrito y del Ministerio de Salud, que ya han mencionado que no hay capacidad para seguir expandiendo las unidades de cuidados intensivos de Bogotá, por lo que se han hecho varios llamados a que la gente se siga cuidando con el lavado de manos, el uso del tapabocas y evitar las aglomeraciones.