La odisea de seis leones enjaulados en Barranquilla para llegar a un santuario en México

Seis leones estuvieron encerrados durante más de dos años ininterrumpidos en una jaula estrecha, al interior de un criadero de babillas en Barranquilla. Estaban flacos y achicopalados y sin garras.

En junio de 2015, según registró El Heraldo, el Circo Americano decidió entregarle los felinos a la Corporación Autónoma Regional del Atlántico, luego de que por ley se prohibiera la exhibición de estos animales en los circos. Desde entonces estaban a la espera de un traslado.

El pasado viernes, la pesadilla se acabó para los leones -4 hembras y 2 machos- que despertaron en México, en uno de los santuarios de felinos más famosos del mundo. Durante un año y medio, la fundación Black Jaguar White Tiger estuvo tramitando los permisos para poder llevar a los leones a su sede, donde se unieron a decenas de leopardos, tigres, jaguares y otros leones que han sido rescatados.

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La semana pasada, finalmente, un equipo de cuatro miembros de la fundación llegó a Colombia a ultimar el viaje. El viernes, los seis felinos, que rondan los 10 años, se embarcaron en un vuelo charter que los llevó a su nueva hábitat.

Según los dictámenes de los expertos, no pueden ser puestos en libertad, porque fueron criados en cautiverio y no están preparados para la vida salvaje.

Todo el proceso del viaje, que costó más de cien millones de pesos y fue financiado con donaciones, quedó documentado en la cuenta de Instagram de la fundación mexicana, que con 6,4 millones de seguidores es todo un fenómeno de redes.

Algunas de las fotos de los leones colombianos en su nuevo hábitat tienen más de 40.000 reacciones. Precisamente, una de las críticas que le han hecho algunos ambientalistas a la fundación, que suele ser visitada por famosos, es la exposición de los animales al público.

En la imágenes se ven sus nuevas jaulas, cada una triplica el tamaño de la que ocupaban en Barranquilla, y también los espacios amplios y naturales del santuario donde podrán moverse los felinos a sus anchas.