NACIÓN
Libre John Jairo Velásquez ‘Popeye’
Una caravana de vehículos del Inpec y de la Policía sacó al exjefe de sicarios de Pablo Escobar de la cárcel de Cómbita.
John Jairo Velásquez Vásquez, 'Popeye', pasó más de 24 años detenido por cuenta de los crímenes que cometió, siempre al lado del temido Pablo Escobar. Los últimos 12 estuvo en la cárcel de máxima seguridad de Cómbita (Boyacá), de donde acaba de salir libre, aunque aún debe cumplir una pena de cuatro años de libertad condicional.
La boleta de libertad expedida por el juez primero de Tunja de ejecución de penas estaba rotulada con el número 057. Esa fue el punto de partida para que uno de los más temidos sicarios del cartel de Medellín recobrara su vida más allá de las rejas.
El hombre salió del penal -en el que tenía casi que un pabellón para él solo- fuertemente escoltado por cerca de 15 hombres de la Policía que se trasladaron hacia Bogotá en cinco camionetas de alto blindaje.
‘Popeye’, según aseguran funcionarios del Inpec, se quedará por ahora en Bogotá. Se ha dicho que hará parte de un grupo de reintegración y socialización donde pueda cumplir la pena que tiene pendiente.
Seguramente estará protegido todo el tiempo, pues se trata de uno de los sicarios más temidos del país y sus enemigos no serán pocos. De hecho, en entrevista con SEMANA, en el 2013, dijo que habría matado alrededor de 300 personas con sus propias manos, "pero he participado y coordinado alrededor de 3.000 muertes".
Velásquez, además, se convirtió en última década en el testigo de decenas de los más importantes y sonados procesos judiciales del país. Uno de ellos, el esclarecimiento del asesinato del líder Luis Carlos Galán.
Por estos días el país, a través de los medios, recordó historias relacionadas con ‘Popeye’ y su largo recorrido criminal, así como su arrepentimiento y su colaboración con la justicia. En una de las entrevistas concedida a la revista Don Juan aseguró que uno de sus mayores secretos a lo largo de estos años, era una caleta con armas de Pablo Escobar que han buscado mucho y no han encontrado.
En esa misma entrevista ‘Popeye’, quien habla tan rápido como las ráfagas que disparó a lo largo de su vida criminal, aseguró que había una larga lista de políticos y empresarios que lo protegían en la sombra.
Ahora muchos se preguntan si existen esos presuntos protectores y si es así quiénes son. Pero además si ellos están dispuestos a ayudarlo en esta nueva etapa de su vida en la que tendrá que no ahorrar esfuerzos para mantenerse con vida.
Según ‘Popeye’ por su cabeza había una recompensa de un millón de dólares. No hay certeza de que eso sea así, pero de todas formas el ex lugarteniente de Escobar tendrá que cuidarse de sus innumerables enemigos, que quizá todavía no le perdonan su oscuro pasado.
Acostumbrado en sus mejores épocas a la opulenta vida de la mafia, 'Popeye' pasó por los penales de Bellavista y La Catedral (ambos en Antioquia), La Modelo y La Picota (los dos en Bogotá), la de máxima seguridad de Valledupar, en San Diego (California, EE. UU.) y, finalmente en Cómbita.
Así termina, por ahora, el tránsito de este antiguo sicario en las cárceles de Colombia en donde estuvo cumpliendo penas por terrorismo, narcotráfico, concierto para delinquir con fines terroristas y homicidio.