CRIMEN
Lo que se sabe del caso de la holandesa asesinada en Cartagena
Las autoridades investigan aparentes inconsistencias en la versión dada por el esposo de la extranjera. Ambos estaban en un velero que fondearon en las islas del Rosario.
La muerte de Durdana Bruijn, de 54 años, sigue siendo un misterio. Ella y su esposo –de similar edad- habían llegado el pasado 15 de septiembre al Caribe, frente a Cartagena, en un velero de su propiedad y planeaban pasar cinco días disfrutando de las islas del Rosario.
El pasado sábado fondearon su embarcación, el Lazy Duck, en la ensenada de isla Manta, a unos 50 metros de las orillas de isla Grande, donde hay oferta de cabañas y hoteles, según narró el diario local El Universal. Todo parecía presagiar una fenomenal estada, hasta que una llamada a la línea de emergencias dio cuenta de una historia macabra.
De acuerdo con la versión de la Policía, el hombre les dijo que seis individuos habrían abordado el velero, le habrían agredido y asesinado a su esposa con el fin de robarles.
El capitán de fragata Jorge Herrera, comandante guardacostas del Caribe, recordó que los hechos sucedieron hacia las 9:00 p. m. del sábado.
El marido contó que estaba en el baño y dos de los asaltantes lo golpearon con la cacha de un revólver. "Que cuando salió (del baño) con los dos tipos, su esposa ya estaba muerta", agregó el oficial a la agencia AP.
La versión no cuadra del todo para las autoridades, pues en una embarcación tan pequeña (12 metros de eslora) es muy difícil no darse cuenta en caso de que se suban seis personas.
El consulado de Holanda en Cartagena está asistiendo al esposo, también holandés y capitán del velero, quien se encuentra a disposición de las autoridades.
El capitán Herrera, por su parte, dijo no tener registro de que en los últimos años un yate o un velero hayan sido asaltados en el sector donde ocurrió el asesinato.
Según las declaraciones iniciales, los ladrones habrían hurtado únicamente unos 200.000 pesos en efectivo, correspondientes a unos 67 dólares. Las demás pertenencias permanecieron en el velero.
Por lo pronto las autoridades investigan y la Fiscalía General de la Nación anunció este lunes que tomaría cartas en el asunto. No se descarta ninguna hipótesis, incluida la de un asunto pasional.
“Estamos analizando todos los aspectos”, recalcó en rueda de prensa el general Carlos Rodríguez, comandante de la Policía Metropolitana de Cartagena.
El capitán Herrera señaló que la víctima mortal tenía fuertes contusiones en distintas partes y que, aparentemente, no presentaba heridas de arma de fuego o de arma blanca. Según El Universal, la extranjera habría sido maniatada. En la nave se hallaron rastros de sangre que son analizados.
Un detalle adicional no encaja para los investigadores. El aviso del supuesto ataque fue dado por el esposo de Durdana desde su teléfono celular y no desde el radio del velero, que sería lo usual. El hombre adujo que no servía, pero una posterior revisión de las autoridades halló lo contario.
“La información que entrega el extranjero es incompleta, muy difusa, por eso se están estableciendo las versiones que él entrega inicialmente, de cómo llegaron esas seis personas, qué características tienen y qué se llevaron”, puntualizó Herrera.
Por su parte, el fiscal Luis González, director de Fiscalías, manifestó que ya se recaudaron evidencias para tomar determinaciones sobre el caso, “no tenemos una hipótesis de los hechos. Ya tenemos las evidencias y material probatorio sobre lo que pudo haber ocurrido y esta tarde podremos tomar las primeras decisiones”.
Por lo pronto, el hombre está en calidad de testigo dentro de la investigación de los hechos. Las autoridades determinarán si fueron atacados por seis encapuchados, por los que las autoridades ofrecen una recompensa de 30 millones de pesos, o qué otra cosa pudo haber ocurrido en el velero de bandera holandesa, el mismo en el que unas vacaciones de lujo se convirtieron en tragedia.