Autoridades descartan explosivos en paquete sospechoso que obligó al cierre de la estación de TransMilenio El Tiempo-Maloka

Momentos de tensión se vivieron en la tarde de este jueves 10 de agosto en la avenida El Dorado o calle 26 en Bogotá, producto de un paquete sospechoso que despertó la alerta de las autoridades y obligó al despliegue de varios uniformados.

El paquete sospechoso fue abandonado, de un momento a otro, en la estación de TransMilenio El Tiempo-Maloka, ubicada en esta importante troncal del sistema de transporte masivo, el cual moviliza más de dos millones de personas al día.

El paquete sospechoso fue abandonado al lado de la taquilla, por lo que de inmediato se ordenó el cierre de la estación y el servicio de la misma quedó cancelado de manera transitoria.

Desde las 2:08 p. m., TransMilenio informó, a través de sus redes sociales, de la presencia del paquete sospechoso y del cierre de la estación.

Policías del grupo antiexplosivos hicieron presencia en el lugar para determinar qué había al interior del paquete abandonado en la estación.

Mientras los uniformados hacían la respectiva inspección, los usuarios del servicio de TransMilenio esperaban en el puente.

No obstante, hacia las 3:30 p. m., las autoridades descartaron la presencia de explosivos, pues lograron establecer que al interior del paquete tan solo había ropa, por lo que se restableció la operación en esta estación.

Es de mencionar que la presencia de paquetes sospechosos les ha arrebatado la tranquilidad a los ciudadanos en las últimas semanas, por ejemplo, el pasado 24 de julio, la capital vivió un día bastante oscuro con sentimientos de angustia por la inseguridad. Ese día, en la noche, la Policía Metropolitana de Bogotá tuvo que llegar hasta la calle 127 con carrera séptima para inspeccionar un posible artefacto explosivo. En la zona se presentó gran congestión vehicular.

El hecho generó zozobra e incertidumbre, no solo para los que transitaban por esa importante vía de la ciudad, en una de las horas de mayor congestión mientras los ciudadanos van de vuelta a sus hogares, sino para los habitantes de esa zona que también es residencial.

Sin embargo, minutos después, la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, anunció que un canino descartó que se tratara de un explosivo. “Hasta ahora el canino descartó que sea un explosivo”, informó la mandataria local en su momento.

Capturaron a uno de los presuntos responsables del ataque con explosivos que cobró la vida de una mujer en el centro de Cúcuta

En las últimas horas, fue capturado Keiver Alejandro Moreno Ranuare, alias El Pelón, quien sería uno de los presuntos responsables del atentado terrorista presentado el pasado 17 de abril de 2023, en la avenida 8 con calle 8, parque Mercedes Ábrego (barrio El Llano).

Allí se activó un artefacto explosivo improvisado al interior de una caneca de basura, el cual -al momento de detonar- le ocasionó la muerte a Neida Coromoto Bolledo Tovar, así como resultaron heridas siete personas.

SEMANA conoció que El Pelón se encargó de contratar a personas en condición de habitantes de calle (consumidores de estupefacientes), con el fin de instalar el artefacto explosivo en el parque Mercedes, por lo que una de estas personas fue golpeada y amenazada de muerte al no acceder a su propósito.

Este sujeto haría parte del Grupo Delincuencial Común Organizado AK-47 o Los Alemanes, con injerencia en el barrio Callejón y sector de la avenida 7. En la operación que se realizó el pasado martes 1 de agosto, también se capturó a Miguel Ángel Rojas Montilla, alias Dientes, quien también es parte de la banda.

De acuerdo con las autoridades, estas personas se dedicaban al tráfico, la comercialización de estupefacientes y el control territorial en el sector conocido como el parque Lineal, avenida 7 y parque Antonia Santos, junto al canal Bogotá.

Ellos se encargarían de la distribución de estupefacientes hacia las personas en condición de habitante de calle, amenazando a quienes no le compraban o a quienes fueran a otros sectores a hacerlo.

Por otra parte, alias El Pelón sería el encargado de recoger el dinero producto de la venta de estupefacientes y, así mismo, ocasionar lesiones con arma cortopunzante a las personas que no entregaban en su totalidad el dinero de la actividad delincuencial; dicho dinero se lo entregaba a alias Saúl (cabecilla de la estructura criminal).