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Lo último: Ejército denuncia cerco de la comunidad en base de Tibú, Norte de Santander
En las imágenes se observa a los uniformados rodeados por la comunidad que se niega a permitir la sustitución de cultivos.
Una grave denuncia hicieron varios militares que se encuentran en Tibú, en Norte de Santander, señalando que están siendo cercados por la comunidad. En el sitio conocido como Caño Indio, se puede observar a los militares rodeados por personas de la zona, que lanza silbidos y groserías contra los uniformados.
Fuentes militares indicaron a SEMANA que en la zona se vienen presentando confrontaciones entre cocaleros y uniformados, por las labores que estos últimos están desarrollando para erradicar cultivos ilícitos.
Según las informaciones en terreno, los cocaleros se oponen a que los uniformados erradiquen las plantas de cultivos de hoja de coca que hay en la región de Tibú, Norte de Santander, uno de los departamentos más afectados por negocios de narcotráfico, en donde la situación de seguridad es crítica.
En la región hacen presencia las disidencias de las Farc, bajo la estructura 33 de alias Jhon Mechas, a quien le atribuyen varias acciones terroristas en el país. También hace presencia ELN bajo las estructuras de alias Pablito, Los Pelusos y demás grupos de crimen organizado.
No es la primera vez
Es de anotar que no es la primera vez que se presenta una situación similar, en donde la comunidad se enfrenta con integrantes de la fuerza pública, que desarrollan labores de erradicación de cultivos ilícitos.
Recientemente, en el departamento del Cauca, las Fuerzas Militares denunciaron que la comunidad cometió una asonada en contra de las tropas que desarrollaban operaciones contra el narcotráfico.
“Integrantes de la comunidad, mediante un intento de asonada, de forma agresiva contra la Fuerza Pública, atentaron contra su integridad, oponiéndose al cumplimiento del procedimiento legal que allí se realiza (presencia institucional). Ante esto, y para evitar cualquier tipo de confrontación con la población y salvaguardar los derechos humanos, las unidades se retiran del sector”, indicaron las Fuerzas Militares.
Agregaron que, “esta no es la primera vez que se obstruye y detienen las acciones de las autoridades en ese sector, donde constantemente algunas personas buscan evitar el actuar legal de las instituciones. Se insta a la comunidad a no obstruir las operaciones militares ni agredir a los uniformados, ya que esto puede ser constitutivo de tipos penales, como los consagrados en los artículos 226, 429 y 469, del Código Penal Colombiano”.
Así mismo desde el alto mando militar se hizo un llamado “a las autoridades municipales y departamentales, para que desde sus roles y funciones adelanten las acciones legales frente a estos sucesos de hechos violentos por parte de la población civil, en cumplimiento del principio constitucional de colaboración armónica entre las instituciones”.
Es de anotar que, en el municipio de Suárez, Cauca, en el mes de marzo, un grupo de al menos 100 militares fue sacado de una zona cocalera, en donde la comunidad impidió que los militares hicieran presencia.
En las imágenes en su momento se observaba a los militares rodeados por comunidad, que impedía que los uniformados siguieran caminando por el territorio, y quienes tuvieron que aguantarse los improperios que lanzaban en su contra.
En algunas ocasiones, desde la fuerza pública han denunciado que estas actuaciones violentas por parte de la comunidad son propiciadas por parte de las organizaciones ilegales armadas, como las disidencias de las Farc, que obligan a los campesinos a enfrentarse con la autoridad para evitar que se hagan las actividades de erradicación de cultivos ilícitos.
“Los están instrumentalizando”, han dicho en repetidas ocasiones los oficiales de la policía y el Ejército, al señalar que las organizaciones ilegales constriñen a los campesinos para que tomen las vías de hechos contra los uniformados, quienes para evitar fuertes confrontaciones se apartan del territorio.