Se estima que en Colombia cerca de dos mil personas están a la espera de un trasplante de órganos. | Foto: Archivo particular.

NACIÓN

Desde el próximo año todos los colombianos serán donantes de órganos

Una ley permitiría que los órganos de las personas fallecidas podrán ser utilizados para trasplantes, a menos de que hayan manifestado lo contrario.

18 de diciembre de 2015

Se estima que en Colombia cerca de 2.000 personas están a la espera de un trasplante de órganos para mejorar sus condiciones de vida. Sin embargo, sólo hay un donante por cada 22 pacientes. Por eso, sólo en el 2014, 72 personas perdieron la vida esperando un órgano. Todo porque el país tiene una de las tasas más bajas de donantes en el continente.

Actualmente la legislación colombiana establece que para utilizar los órganos de las personas fallecidas, se necesita la autorización de la persona y la de sus familiares, circunstancia que, precisamente, ha dificultado la donación de órganos.

Sin embargo, el Congreso decidió cambiar esas condiciones, por eso aprobó una ley que convierte a todos los colombianos en potenciales donantes. Esta semana, el Senado aprobó el último debate de un proyecto del representante Rodrigo Lara y para que entre en vigencia, sólo le falta el trámite de la conciliación con la Cámara de Representantes y posteriormente, la sanción del presidente de la República.   

Según Lara, los alcances de la ley pretenden ampliar la presunción legal de donación a las personas que fallecen y no declaren en vida que sus órganos sean donados. Quiere decir que los órganos de las personas fallecidas podrán ser utilizados para trasplantes, a menos de que hayan manifestado lo contrario.

Incluso, la futura ley también elimina la autorización de los familiares, y estos no se pueden oponer a que los órganos de sus parientes sean utilizados en beneficio de los pacientes que lo requieran.

“Este es un proyecto que salva vidas y les permite también a muchas personas tener una calidad de vida digna. Todos los colombianos son donantes de órganos a menos que una persona en vida manifieste que no desea serlo. Como dice un sacerdote amigo, una persona tiene una vida para oponerse y no se entiende que lo hagan por él sus familiares una vez fallece”, explicó Lara.

La ley beneficiará directamente a las más de 2.000 personas que hoy esperan la donación de un órgano. Eso sí, incluye un capítulo de sanciones para quienes trafiquen o comercialicen con órganos, quienes serían castigados con prisión entre cinco y siete años de cárcel.

El proyecto fue respaldado por todos los partidos políticos y con esa decisión, se espera que después del mes de marzo todos los colombianos se conviertan en donantes de órganos.