Nación
Los dolorosos testimonios de las víctimas de Fabián Sanabria que lo acusan de presunto abuso sexual
La Fiscalía acusó formalmente al profesor de la Universidad Nacional como presunto responsable de un delito.
“Se sacó el miembro y quería que yo lo acariciara. Entonces me dijo, si usted lo hace conmigo, yo lo quiero hacer con usted”, advierte un testimonio de las víctimas de un presunto abuso sexual que deja al profesor Fabián Sanabria como el presunto responsable.
Las declaraciones fueron contundentes para la Fiscalía al momento de presentar la acusación en contra de Sanabria, investigado, imputado y ahora a las puertas de un juicio por el delito de acceso carnal abusivo.
SEMANA reveló los testimonios de las víctimas, las mismas que se atrevieron a contar su historia al colectivo feminista Las que Luchan, responsables de tener contra las cuerdas de la justicia a Sanabria, incluso con el riesgo de resultar condenado por los delitos imputados. Un testimonio tomó tanta fuerza que se convirtió en un proceso en la Fiscalía.
Ese testimonio fue crudo en detalles y completo para construir una hipótesis criminal, la misma que quedó en el escrito de acusación contra el profesor Sanabria. “Utilizó palabras como bonito, mi gatico, mi cosita… cosas así para halagarlo a uno. Yo era muy noble, sin carácter e inmaduro”.
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Al menos cuatro víctimas se acercaron a las investigadoras de Las que Luchan para contar su tragedia. Esos reportes se convirtieron en el sustrato de tres informes con otras denuncias que incluyen a otros docentes de la Universidad Nacional. “Me dijo que mejor nos viéramos en su apartamento para hablar sobre el proyecto… Al subir me recibió en bata de seda y supuse lo obvio”, advirtió a SEMANA un denunciante.
Otros testimonio fueron dramáticos y obliga a la Fiscalía a iniciar la investigación, luego imputar cargos. Las víctimas detallan cómo ocurrieron los abusos, al parecer, en el apartamento de Sanabria ubicado en el centro de Bogotá.
“En ese momento que él ve la sangre es como si un monstruo en él se hubiera despertado y empezó a golpearme con el cinturón, empezó a darme correazos. Me decía que no gritara, que si me dejaba dar unito más, él me dejaba ir. Me dijo: déjate consentir como los gatos, esas palabras nunca se me van a olvidar”, señala un testimonio.
Las víctimas advierten que los abusos ocurrieron mientras aceptaron llegar hasta el apartamento de Sanabria, al parecer, con una oferta de trabajo, luego en el sitio el profesor, según la denuncia, les ofreció una gaseosa que los dejó mareados y al reaccionar estaban en la cama.
“Se abalanzó sobre mi cuerpo, eso nunca se me va a olvidar, sus dos manos sobre mis manos, sobre mis brazos, haciendo presión tratando de besarme. En vista de que yo no me dejé besar me hizo un chupón en el cuello y yo le dije ¿Qué le pasa? Déjeme! Esto no me gusta, me quiero ir”, señaló la víctima.
La agresión en este caso fue brutal. La víctima cuenta que Sanabria lo golpeó, que le tapaba la boca para evitar que gritara, mientras le decía que quería golpearle las nalgas y quería darle un correazo.
“Él le había colocado seguro a la puerta tan pronto yo entré, y yo tenía muchísimo mareo y él cogió un cinturón como si quisiera atarme a la cama y no podía, como si quisiera amarrarme y su expresión en su cara era como si algo se hubiera apoderado de él en esos momentos y no fuera él, sino que fuera un ente”, dijo la víctima.
El caso que llevará al profesor Sanabria a un juicio ocurrió en 2013 y estaba por prescribir, de ahí que la Fiscalía pisó el acelerador para evitar la impunidad. Esto mientras la Procuraduría simplemente se remitió a decir que no había elementos para investigarlo, o que las actuaciones estaban vencidas.