Judicial
Los funcionarios del Inpec que se habrían vuelto millonarios dejando ingresar celulares, licor y hasta droga a la cárcel La Modelo
Hace dos meses, el director de ese centro penitencial, Élmer Fernández, fue asesinado en la capital del país.
La cárcel La Modelo de Bogotá tiene unos niveles tan altos de corrupción que en las últimas horas la Fiscalía General de la Nación le hizo extinción de dominio a un grupo de funcionarios del Instituto Nacional Penitenciario (Inpec), que habrían utilizado su cargo para realizar actos de corrupción al interior de eso centro carcelario.
La historia sucedió entre los años 2020 y 2022, cuando los funcionarios, según la Fiscalía, se habrían aliado con algunos presos que se encontraban en esa cárcel y terceras personas, como dueños de tiendas ubicadas cerca a La Modelo, para almacenar en esos lugares droga, licor, SIM cards, entre otros elementos prohibidos dentro de la prisión pero que paraban allá.
Las pruebas de los investigadores permitieron establecer que aprovechando su cargo, los funcionarios habrían recibido diferentes sumas de dinero que terminaron utilizando para comprar varios predios en Cundinamarca y hasta una flotilla de vehículos públicos y particulares.
La Fiscalía General confirmó que “los bienes, avaluados preliminarmente en 1.300 millones de pesos, están representados en un lote ubicado en zona rural de Granada (Cundinamarca); 2 inmuebles urbanos, 12 vehículos y 4 establecimientos de comercio en los que funcionaban un restaurante, un spa y dos negocios de venta de llantas y rines en Bogotá”.
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En total fueron 19 inmuebles a los que la Fiscalía les hizo extinción de dominio, después de que la investigación que avanza contra los integrantes del INPEC, permitiera establecer que se habrían adquirido con recursos que lograron conseguir a partir de la corrupción que protagonizaron en la cárcel La Modelo, en Bogotá.
Lo más delicado del asunto es que mientras estos funcionarios habrían incurrido en múltiples delitos para beneficiar sus arcas personales, el anterior director de esa prisión, el coronel (r) Élmer Fernández, fue asesinado después de advertir que iba a aumentar el control penitenciario. Apenas duró un mes y medio en el cargo.
De hecho, hasta el entonces ministro de Justicia, Néstor Osuna, confirmó días después del crimen que en la investigación se estaba tratando de determinar si hubo participación de miembros del Instituto Nacional Penitenciario (INPEC) en el ataque que le quitó la vida al coronel (r) Fernández.
La Procuraduría hace menos de un día le abrió una investigación disciplinaria al coronel Daniel Fernández, actual director del INPEC, por la presunta falta de medidas de protección que habrían evitado el asesinato del entonces director de esa cárcel cuando se movilizaba en un vehículo en el norte de Bogotá.
En un comunicado, el órgano de control confirmó que “con la apertura de la investigación, la Procuraduría busca verificar la ocurrencia de la conducta, determinar si es constitutiva de una falta disciplinaria, esclarecer los motivos determinantes y verificar si se ha actuado al amparo de una causal de exclusión de la responsabilidad”.
Lo cierto es que el coronel (r) Fernández ya había recibido varias amenazas de un delincuente conocido como ‘Pedro Pluma’, quien estaba preso en la cárcel La Modelo intimidando a los funcionarios del INPEC por los controles que venían adelantando.
