Los trinos que inhabilitaron a Augusto Ocampo

Este jueves, la Personería de Bogotá tomó la primera decisión disciplinaria, en el país, sobre el uso de las redes sociales. La entidad sancionó a Augusto Ocampo, director distrital de asuntos disciplinarios de la Secretaria General de la Alcaldía Mayor.

La sanción se debe a las "afirmaciones irrespetuosas, deshonrosas y/o calumniosas" escritas por el funcionario en su cuenta personal de Twitter, que, en el criterio de la Personería, "constituyen una falta disciplinaria grave, independientemente del medio por el cual se realicen". La entidad también consideró su conducta "grave a título de dolo, es decir, con plena conciencia de estar incurriendo en una actuación irregular".

Por esa razón, la Personería delegada para la coordinación de asuntos disciplinarios suspendió del cargo a Ocampo por diez meses y lo inhabilitó para ocupar cargos públicos por el mismo término.

"Por publicar en su cuenta de Twitter expresiones irrespetuosas y calumniosas contra reconocidos periodistas del país y contra la veedora distrital, Adriana Córdoba", agrega el comunicado de la entidad.

¿Qué significa que un altísimo funcionario lance graves acusaciones contra periodistas a través de su cuenta de Twitter? ¿Está hablando a título personal o expone el pensamiento de sus superiores? ¿Recibió una orden para decir lo que otros no pueden? Estas fueron algunas de las preguntas que surgieron en el momento de la polémica, cuando en diciembre del 2012, la Personería abrió la investigación en contra de Ocampo, quien debió su explicar su conducta en proceso verbal.

En ese entonces, el abogado Ocampo trinó los más fuertes señalamientos contra los medios de comunicación por su cubrimiento de la crisis de las basuras.

Ocampo fue durísimo: "Periodistas vinculados con cartel Nule crítican administración distrital", aseguró. "Curioso que microfoneros fletados por cartel son los únicos que critican TODO lo de @petrogustavo", añadió.

Hasta ahí eran apreciaciones generales, pero luego pasó a las individuales. Así, a Yesid Lancheros, periodista de El Tiempo, lo tildó de "microfonero barato del combo de Yamit, Darío, Julio". "Sé consecuente con lo que dice sobre denuncias contra corrupción. No le haga el juego al cartel. ¿Critica sin ver camiones?".

A Erika Fontalvo, de Caracol Radio, le escribió: "No será de las periodistas fletadas por los Nule a quienes Álvaro Dávila les daba $ para patrocinar carrusel? Esta tuiteadora". A Darío Arizmendí, director del servicio informativo también de Caracol Radio, le dijo: "@CaracolRadio Gravísima la campaña terrorista de desinformación del microfonero Darío Arizmendi". Sobre Yamid Amat, director de CM&, anotó: "Yamit Amat, el Rey de la desinformación resentido porque le quitaron el escenario para lucirse en la Plaza de Toros ataca a @petrogustavo".

Sobre Vicky Dávila, directora de La F.m., señaló: "@vickydavilalafm Increíble Vicky también en la lista de quienes desinformando atacan los intereses de los bogotanos. Fletada por las mafias?". A Clara Elvira Ospina, exdirectora del Canal RCN: "@ClaraEOspinaG Ud. también desde Perú haciéndole el juego a las mafias que se apoderaron la ciudad? Sea seria".

También lanzó acusaciones contra la periodista Camila Zuluaga, de La W, e incluso, contra la veedora distrital, Adriana Córdoba, a la que tildó de "oportunista y desleal", debido a sus observaciones sobre los carros de basuras importados de Estados Unidos. "Ella lo que busca es arar el camino para que el marido se decida de nuevo a pretender Presidencia", en referencia a Antanas Mockus.

El fallo de primera instancia, conocido este jueves, se constituye en el primer precedente, en el país, "en materia de uso de redes sociales por parte de servidores públicos, que distingue el alcance del derecho de opinión y sus límites en torno a imputaciones injuriosas y calumniosas", concluye la Personería.

La decisión dentro del proceso verbal fue apelada por el funcionario, aseguró la entidad.