Fin a la espera, Ramos no será candidato presidencial

Hace cuatro años cuando Álvaro Uribe lo invitó a ser precandidato presidencial del naciente Centro Democrático, pocos dudaban que Luis Alfredo Ramos ganaría la candidatura frente a Óscar Iván Zuluaga, Juan Carlos Vélez y Francisco Santos.  Era el auténtico gallo tapado del uribismo, se dijo en aquel momento. Pero cuando apenas empezó a aletear, la Corte Suprema de Justicia ordenó su captura por presuntos nexos con paramilitares. Su candidatura se fue a la lona.

Dos años después, Ramos recuperó su libertad, pero no fue absuelto. Salió libre por términos del proceso, pero siguió vinculado a la investigación y a la espera de ser declarado inocente. Mientras se defendía, empezaron los cantos de sirena a su alrededor, y entre conservadores y uribistas lo sedujeron para que participara en las elecciones presidenciales. Los conservadores porque no tenían con quién, y los uribistas porque confiaban en su músculo electoral para ganar la presidencia. El pasado mes de enero se le vio en los tendidos de la plaza de toros de Manizales, y parte del público lo ovacionó y le decía “¡presidente, presidente!”  

Pero cuando la suerte parecía sonreírle al exgobernador de Antioquia y expresidente del Congreso, la captura del exfiscal anticorrupción Gustavo Moreno, quien había sido su abogado y lo defendió con la tesis de los falsos testigos, era capturado y empezaron a destaparse todos sus escándalos. Uno de ellos golpeaba a Ramos. El presunto soborno a magistrados de la Corte Suprema para detener órdenes de captura contra congresistas.

En ese momento, cuando algunas encuestas incluían su nombre, Ramos barría en la candidatura uribista. Y aunque advirtió que no estaba inhabilitado para participar, en el Centro Democrático, partido en el que se inscribió como militante hace tan solo un mes, le dieron un tiempo de prudente espera, precisamente hasta que estuviera “libre de todo pecado” con la justicia, esto para no arriesgar una candidatura ante alguna decisión judicial, como la que se produjo en el 2013.

"No obstante mi inocencia y no tener impedimento alguno para presentar mi nombre a la presidencia de la república, reafirmo mi posición de no presentarme a la contienda electoral sin una decisión judicial a mi favor", dice Ramos en un comunicado. 

Si el jueves fue el día en el que los cinco precandidatos del uribismo (Iván Duque, María del Rosario Guerra, Paloma Valencia, Carlos Holmes Trujillo y Rafael Nieto) llegaron un acuerdo para escoger el candidato, este viernes era el último día en que podrían inscribirse otros aspirantes.

Oscar Iván Zuluaga, que ha sido tendencia el viernes con el #ZuluagaColombiaTeNecesita, y Ramos eran los esperados. El exgobernador de Antioquia ya dijo que no.