Política
“El mío ha sido un perdón liberador": Luis Eladio Pérez
El excongresista, quien estuvo en la JEP contando el drama de su secuestro durante siete años por parte de la guerrilla, habla sobre las razones que lo llevaron a recibir el apoyo del partido FARC a su candidatura a la Gobernación de Nariño.
SEMANA: ¿Por qué tomó la decisión de aceptar el apoyo de las Farc a su candidatura?
Luis Eladio Pérez: Porque me parece un mensaje importante a las nuevas generaciones que quieren vivir en un país en donde la confrontación y el odio son remplazados por la reconciliación y el entendimiento social. El odio y el resentimiento obstaculizan las soluciones a tantas problemáticas que afectan el día a día de la gente y que son las que tenemos que solucionar.
SEMANA: ¿Cómo interpreta ese gesto de parte de la Farc?
L.E.P: Como un gesto de reparación hacia una persona a la que afectaron gravemente durante siete años con sus actos. Ojalá ese gesto lo llevaran a la vida de cada una de sus víctimas.
Frente al apoyo expresado por el @PartidoFARC a mi candidatura a la Gobernación de #Nariño, esta es mi respuesta ⬇️ pic.twitter.com/In0fKLAcQX
— Luis Eladio Pérez (@LuisEladioPe) July 25, 2019
Ver:Los dolorosos testimonios de los secuestrados de las Farc ante la JEP
SEMANA: ¿No le preocupa que en medio de tanta radicalización algunos sectores lo estigmaticen por aceptar ese apoyo?
L.E.P: Lo que me preocupa es que las nuevas generaciones tengan que vivir en un país llenas de rencores, odios y resentimientos. Quiero mandar un mensaje a la Colombia del futuro para que entendamos que es posible reencontrarnos y vivir juntos solucionando inteligentemente los enormes desafíos que tienen nuestros territorios. El odio es estéril y nuestros niños y jóvenes necesitan vivir en lugares fértiles para ellos y sus sueños.
SEMANA: Usted dijo ante la JEP que en siete años en que estuvo secuestrado usted no sintió voluntad de las Farc para liberarlo, ni a usted ni al grupo. ¿Por qué ahora este gesto de reconciliación?
L.E.P: El apoyo que me dan hoy lo interpreto como un gesto en el camino correcto. No quiero responder a ese gesto con un portazo, no me parece ni sano ni constructivo, y yo ya no estoy pensando en mi pasado sino en el futuro de mis nietos y de tantos niños y jóvenes que no merecen estar condenados a vivir la misma tragedia que nosotros vivimos.
SEMANA: ¿Qué representa el perdón en su vida?
L.E.P: Mi perdón ha sido un perdón liberador, lúcido y militante. Es liberador porque a través de él logre continuar mi vida sin el lastre del resentimiento, del odio, del dolor y del deseo de venganza, sentimientos que con seguridad me hubieran sumergido en un escenario en donde mis secuestradores seguirían presentes día a día en mi vida como cuando me encontraba en cautiverio. Es lúcido porque no es el fruto del miedo, la ansiedad, la cobardía o el traumatismo sino de un acto consciente donde tomé la decisión de recuperar mi destino y encauzarlo en forma serena y libre por los rumbos que mi voluntad tenga la capacidad de trazar. Es militante porque es consciente que no podemos olvidar lo sucedido. La mía es una memoria que busca que no se repitan los hechos y que la indiferencia de algunos se vea trastornada por la presencia perturbadora de mi relato.
SEMANA: ¿Cómo puede asumir Nariño, un departamento tan afectado por la guerra, esta decisión de aceptar el respaldo de la Farc a su candidatura?
L.E.P: Nariño tiene más 400.000 víctimas del conflicto, y es un pueblo que quiere vivir en paz y seguir adelante. Estamos llenos de niños que no queremos que hereden odios y resentimientos sino esperanzas, optimismo y oportunidades. A ese proceso de reconstrucción yo le aporto mi dolor, mi perdón y mi memoria.
¿Saldrá a marchar por los líderes sociales?
L.E.P: Si, porque no podemos ser indiferentes a esa situación que nos muestra la peor cara de lo que ya vivimos y que ya supimos cómo terminó. Los colombianos vimos esa película que empieza con asesinatos selectivos y ya sabemos cómo termina.