POLÍTICA

Luis Ernesto Gómez será el nuevo secretario de Gobierno de Bogotá

El disidente liberal y exviceministro de Santos, jugará un papel protagónico en el gobierno de Claudia López. ¿Cuáles son sus ideas?

9 de diciembre de 2019
Luis Ernesto Gómez. | Foto: Archivo Particular

La alcaldesa electa de Bogotá, Claudia López, designará a Luis Ernesto Gómez como secretario de Gobierno. Así lo acaba de anunciar en sus redes sociales.

“Es un honor hacer parte del equipo de gobierno de la alcaldesa electa, Claudia López. Los ciudadanos están reclamando un cambio de rumbo. Lo hicieron el pasado 27 de octubre en las urnas y ahora en las calles. Un gran desafío para quienes estaremos en el equipo de gobierno de Bogotá, pero también una gran oportunidad de entender que en esta era de ciudadanos activos y participativos, que no tragan entero, y de las tecnologías de la información, tenemos que hacer un gobierno abierto de consensos y de diálogo franco con la gente. Lograr que los bogotanos entendamos que para que cambie la ciudad no basta con que cambie el alcalde o la alcaldesa, o el secretario de gobierno, cada uno de nosotros tenemos que cambiar y ese es el sello que le imprimiremos a esta nueva administración desde la Secretaría de Gobierno”, indicó Gómez.

Luis Ernesto Gómez casi siempre usa tenis, el calzado que se convirtió en el símbolo de Activista, un movimiento que fundó el año pasado, luego de que salió del Partido Liberal. Se retiró de las toldas rojas cuando el jefe de esa colectividad, César Gaviria, adhirió a la campaña presidencial de Iván Duque, una decisión con la que Gómez nunca estuvo de acuerdo. 

El líder de Activista tiene 38 años. Es politólogo, economista y además hizo un master en Ciencia Política de la Universidad Humboldt de Berlín y otro en Administración Pública del London School of Economics. Antes de unirse a la campaña de Claudia López este año, también quería competir por llegar al Palacio Liévano. Sus propuestas para la ciudad mostraban que definitivamente representa a una nueva generación de políticos en el país. Está interesado en la protección del medio ambiente y de los animales, los derechos de las minorías sexuales y étnicas, el uso de la tecnología como respuesta a las necesidades de los ciudadanos y en conformar un gobierno de la mano de la ciudadanía. En su vida personal también es diferente a los políticos tradicionales. Es descomplicado, usa tennis “porque es cómodo”. Se casó después de vivir años en unión libre con su pareja y de tener dos hijos, Julieta y Emiliano. Se operó para no tener más “porque dos hijos son suficientes”. Y no niega que algún día le gustaría ser presidente.

Aunque todos los políticos dicen que sus campañas son distintas e innovadoras, una que realmente se destacó, a pesar de lo corta, fue la de Luis Ernesto Gómez como precandidato a la Alcaldía de Bogotá. La sede de Campaña de Activista fue un contenedor en frente del Parque del Virrey, como una manera de decir que es realmente accesible a los ciudadanos. Hizo un challenge (reto) de basura, que consistía en enseñarle a la gente a reciclar, mientras que se limpiaba alguna zona de la ciudad de forma voluntaria. 

Para hablar de la importancia de la movilidad eléctrica, Gómez puso cabinas de oxígeno en algunas troncales de TransMilenio para que la gente sintiera la diferencia entre respirar aire contaminado, como el de la ciudad, y un aire limpio. Y por último se inventó un reality para ver cómo se podían solucionar problemas cotidianos de los bogotanos, entre otras cosas que tuvieron gran acogida entre jóvenes y las redes sociales. Este tipo de propuestas innovadoras podrían ser claves para recuperar la cultura ciudadana que Claudia López prometió en campaña y seguramente opr eso fue elegido como secretario de Gobierno por su espíritu conciliador y capacidad para dirigir. 

Gómez fue viceministro de Trabajo en el gobierno de Juan Manuel Santos. Desde allí impulsó el programa de 40.000 primeros empleos y la Ley Pro-joven que eliminó el requisito de la libreta militar para trabajar, y creó incentivos tributarios y financieros para el emprendimiento y la empleabilidad juvenil. También fue viceministro del Interior. Desde allí implementó la iniciativa digital Causas Ciudadanas, apoyada por más de un millón de firmas por redes sociales y plataformas digitales, que obligaron a las instituciones del Estado a responder diferentes peticiones de los ciudadanos. También es autor del libro La Googlecracia, un análisis inédito de la relación entre ciudadanos y gobernantes en el mundo.

Hace unos días estaba en Cuba descansando un poco de todo el trajín de las elecciones. En la mañana bucea y el resto del día juega en la playa con Julieta, Emiliano y Karol. Quienes lo conocen lo definen como una persona centrada, optimista y que no vende sus convicciones. Cuando se le pregunta por su optimismo dice que a pesar de los momentos difíciles “he escogido concentrarme en todo lo bueno. Creo que como país tenemos buenas razones para ser optimistas y esta elección es prueba de ello”.