Magnicidio de Luis Carlos Galán: Corte Suprema ratifica condena de 24 años de prisión contra Alberto Santofimio

Alberto Santofimio Botero perdió la batalla para tumbar el fallo que lo condenó en 2011 a 24 años de prisión por su responsabilidad en los hechos que rodearon el magnicidio de Luis Carlos Galán Sarmiento. La Corte Suprema le negó el recurso de revisión que había presentado por medio de su defensa y en el cual alegaba que no se habían evaluado todas las pruebas.

Con ponencia del magistrado Luis Antonio Hernández, de la Sala de Casación Penal, se determinó que no existían motivos para revisar la condena que encontró culpable al exministro por el delito de homicidio agravado con fines terroristas. Galán Sarmiento fue asesinado por sicarios cuando se disponía a dar un discurso en la plaza central de Soacha, Cundinamarca, el 18 de agosto de 1989.

En la decisión de la justicia se determinó que Santofimio instigó al entonces jefe del Cartel de Medellín, Pablo Escobar Gaviria, con el fin que ordenara el asesinato del candidato presidencial por el Nuevo Liberalismo, indicando que representaba un peligro para sus intereses, puesto que tenía una posición firme para la extradición de colombianos relacionados con el tráfico de drogas.

Santofimio Botero se encuentra en libertad condicional desde marzo de 2020, cuando un juzgado de ejecución de penas de Bogotá determinó que había cumplido las tres quintas partes de su condena. Recientemente ha aparecido, fiel al estilo que lo hizo famoso, en tarima pública apoyando a candidatos para las elecciones que se celebrarán en octubre próximo.

Esta situación ha generado indignación en un sector de la sociedad que no entiende cómo un convicto puede seguir participando en actos políticos y públicos.

Mátalo Pablo, mátalo

En el fallo emitido en el 2011, la Corte Suprema revocó la decisión que años antes había absuelto a Santofimio Botero y ordenó su recaptura para que siguiera cumpliendo su condena por haber motivado el crimen de Luis Carlos Galán Sarmiento, quien en su momento marcaba las encuestas para convertirse en el presidente de la República para las elecciones que se iban a disputar en 1989.

Varios testigos revelaron la forma en cómo el exministro de Justicia había instigado a Pablo Escobar Gaviria para que le ordenara a sus hombres preparar un atentado contra Galán. “Mátalo Pablo, mátalo”, fueron las palabras que, según varios integrantes del Cartel de Medellín, le dijo Santofimio casi que al oído al narcotraficante para sacar del “camino” a quien el consideraba su peor enemigo en la política.

De esta forma convenció a Escobar para que, junto a sus temidos socios, orquestaran el crimen del dirigente político liberal. El Cartel contactó a dos sanguinarios sicarios quienes ingresaron totalmente armados a la plaza central y se ubicaron muy cerca de la improvisada tarima para atacar al candidato cuando se disponía a dar uno de sus discursos de cierre de campaña.

Por el crimen de Galán también fue condenado el exdirector del DAS, general (r) Miguel Alfredo Maza Márquez. En este caso, la Corte Suprema de Justicia determinó que ordenó modificar, sin justificación alguna y omitiendo todas las amenazas que pesaban contra el candidato a la Presidencia, el esquema de seguridad.

Esto, según varios testigos, debilitó notablemente la seguridad de Galán quien para ese momento era el hombre más amenazado del país. El nombre del general Maza también ha estado vinculado a la captura de tres personas que fueron acusada de ser los determinadores del crimen.

Años después se comprobó que nada tenían que ver con estos hechos. Para la familia Galán, esto entorpeció enormemente la investigación y desvió la mira sobre los verdaderos determinadores.