NACIÓN
Militar reveló ante la JEP cómo pasaban a jóvenes por guerrilleros tras asesinarlos
El uniformado les pidió perdón una vez más a las madres de los jóvenes que fueron ejecutados inocentemente.
Este miércoles en la mañana se reanudaron las diferentes audiencias en la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) por el caso de la ejecuciones extrajudiciales, llamadas popularmente como ‘falsos positivos’, por parte del Ejército Nacional.
Sandro Pérez, que se desempeñaba como suboficial de inteligencia del Batallón de Infantería Número 15 Francisco de Paula Santander, admitió públicamente que fue uno de los coautores de estos macabros asesinatos.
“Yo represento para ustedes una máquina de muerte. Acepto ante ustedes, el país y el mundo, que utilicé mi uniforme del ejército como pretexto para dar resultados operacionales, haciéndoles creer que eran legítimos, pero en realidad eran asesinatos que se cometieron contra seres humanos inocentes”, indicó inicialmente.
El militar, de igual manera, aprovechó el momento para revelar cómo intervino directamente en estas ejecuciones y el procedimiento que utilizaron para hacer pasar a las víctimas por guerrilleros.
Lo más leído
De acuerdo con el testimonio de Pérez, él era el encargado de la logística para que nadie pudiera encontrar a los jóvenes asesinados. Además, admitió que falsificó varios documentos.
“Planeé cómo debían llegar de Soacha (Cundinamarca) a Ocaña (Norte de Santander), y cómo debían entregarse a los militares. Les robé la identidad a los hijos que ustedes tanto amaban”, precisó ante la JEP.
Luego, añadió: “Entregué documentos falsos para que fuera creíble lo que estábamos haciendo y les robé sus documentos para que pasaran como ‘NN’. Esto hacía para que fuera más difícil poder encontrarlos y saber la verdad”.
El uniformado, por último, les pidió perdón una vez más a las madres de los jóvenes que fueron ejecutados extrajudicialmente y les agradeció por enseñarle a valorar cada instante de la vida.
“Jamás se me quitará la vergüenza. Gracias por enseñarme el valor de celebrar un cumpleaños, un abrazo. Hoy ustedes no están con ellos y pasan necesidades por mi culpa, por mis actos. No soy digno de recibir su perdón”, concluyó.
Aunque no entregó mayores detalles, el militar admitió que muchos casos de bajas en combate que se reportaron en aquella época no se trataban de guerrilleros, sino de campesinos, es decir población civil inocente.
“Me arrepiento de corazón de haber mancillado el nombre de ustedes y quiero que sepan que esos asesinatos que realizó el Batallón de Infantería Francisco de Paula Santander, cuando fui oficial de operaciones, eran personas de bien. Eran campesinos”, enfatizó.
Cabe mencionar que los señalados por la Justicia Especial para la Paz pertenecían en su mayoría a la Brigada Móvil 15 y al Batallón de Infantería Numero 15 General Francisco de Paula Santander, entre los que se destacan el general Paulino Coronado; los coroneles Santiago Herrera y Rubén Darío Castro; los tenientes Álvaro Diego Tamayo y Gabriel de Jesús Rincón Amado, y el mayor Juan Carlos Chaparro Chaparro.
En la audiencia también están presentes algunos de los familiares de las víctimas, que corresponden con las dos modalidades que configuraron el patrón criminal perpetrado entre enero de 2007 y agosto de 2008 en Norte de Santander.