NACIÓN
Ministro de Transporte asegura que este viernes han registrado 20 vuelos a San Andrés, provenientes de Bogotá, Medellín y Cali
Los habitantes de la isla denuncian que esta crisis no la vivieron con la pandemia de la covid-19.
El ministro de Transporte Guillermo Reyes González estará dos días en San Andrés para revisar los planes de contingencia con los que esperan promover el turismo a la isla afectada por la disminución de vuelos por la crisis generada ante la suspensión de operaciones de Viva Air y Ultra Air.
Inicialmente, se realizó inspección del aeropuerto Gustavo Rojas Pinilla, en compañía del gobernador de San Andrés, Everth Hawkins Sjogreen y el administrador del aeropuerto, José Luis Luján.
“Durante este recorrido se logró determinar que se está recobrando la normalidad de los vuelos que entran y salen de este importante lugar turístico, pues al día se han podido registrar aproximadamente 20 vuelos provenientes de Bogotá, Medellín y Cali”, precisó el ministro de Transporte este Viernes Santo.
Reyes indicó que decidieron realizar una visita oficial con el objetivo de conocer el estado en el que se encuentra la movilidad de esta terminal y de los pasajeros de Viva y Ultra, asimismo verificar como está fluyendo el tema aéreo de las otras aerolíneas que operan en la isla.
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“Nuestro propósito es informar que el Gobierno Nacional está preparando medidas importantes para la isla, los comerciantes y el turismo. De igual forma, ratificamos que continuaremos trabajando con la Aeronáutica Civil, las Superintendencias de Transporte, Industria y Comercio para lograr que los pasajeros que tenían reservas en San Andrés puedan cumplirlas”, aseguró ministro de Transporte.
Seguido de esto se realizó un recorrido por el archipiélago para verificar el estado de la Circunvalar de San Andrés, obra que según MinTransporte, demuestra su inversión, pues todos sus frentes están siendo ejecutados y con el apoyo del Instituto Nacional de Vías (Invías) se han logrado acuerdos con los raizales de la isla para así cumplir con el cronograma de entrega. De igual forma, se proyecta la adecuación de una ciclorruta para mitigar los siniestros viales.
“Sin embargo, se sabe que este es un lugar que cuenta con muchas dificultades dentro del proceso de mejoramiento y adecuación de las vías, entre estas el control de las aguas lo que genera erosión costera y para esto se estudia la implantación de bolas de arrecife artificial que permitirían reducir el impacto de las olas, esto de la mano de un proyecto de dragado para mejorar el acceso al muelle y así generar un impacto positivo en el comercio de la isla”, explicó Reyes.
A esta hora se sostiene una mesa de diálogo con el sector del turismo y comercio para establecer una hoja de ruta de mano con las autoridades locales y así mitigar significativamente el impacto que ha dejado la suspensión de operaciones de las dos aerolíneas de bajo costo, Viva Air y Ultra.
Igualmente, garantizar a los usuarios una infraestructura aeroportuaria digna de una isla que genera millones de visitas de turistas nacionales e internacionales.
Ni la pandemia ni los estragos causados por el huracán Iota estresaron tanto a los sanandresanos como lo que está ocurriendo hoy, tras el cese de operaciones de las aerolíneas Viva Air y Ultra Air. Al depender casi que ciento por ciento de los ingresos del turismo, esta población pasa por uno de sus peores momentos, justo en una de las temporadas en las que recibe más turistas.
La isla pasó de tener 35 vuelos diarios a tan solo ocho y esto no solo impacta toda la cadena turística, que va desde los taxistas que los recogen en el aeropuerto, hasta los hoteleros y todos los empresarios que ofrecen servicios turísticos de manera formal e informal.
También, la vida diaria de los habitantes de San Andrés, cuyo abastecimiento de víveres y diferentes artículos también se ha visto afectado, lo que ha disparado los precios de su canasta familiar (de por sí ya altos por la elevada inflación que registra el país).
“Acá un plátano ya vale 4.000 pesos; una libra de carne medio buena, 25.000, y un botellón de agua, 10.000. Estamos viviendo mal, sobre todo porque ahora no podemos generar los ingresos para pagar cosas tan caras”, dice Alberto Gordon, líder del gremio de los taxistas de la isla, quien hace un llamado urgente al presidente Petro para que les “dé una manito”.
“En otras partes del país, si no llegan aviones, llegan buses, pero acá eso es imposible. Parecería que el Gobierno no quiere ayudarle a San Andrés, porque de poder, puede”, insiste.
En su caso, representa a 200 transportadores y sus familias, que antes de la crisis de las aerolíneas alcanzaban a hacer entre seis y diez viajes al día entre el aeropuerto y los hoteles, pero hoy no alcanzan, sino a hacer uno y tampoco se van al centro a buscar carreras, porque simplemente no hay suficientes turistas.