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Multados los agresores de Douglas, el perro quemado con agua hirviendo en Cota, Cundinamarca
La policía sancionó tanto a la agresora como a los dueños del perro, tras establecer que sufría descuido y mala tenencia. Es el primer caso de multas por maltrato animal en el municipio, aseguran animalistas.
El pasado 27 octubre de 2020, la fundación Rescate Animal Colombia recibió un llamado de alerta acerca de un perro que se encontraba entre la vida y la muerte.
Al llegar al lugar donde se encontraba, en el sector conocido como El Ceuca, en el municipio de Cota (Cundinamarca), hallaron a Douglas, un perro adulto criollo que presentaba graves laceraciones y quemaduras producidos por un ataque con agua hirviendo.
Seis meses después, y tras haber denunciado el caso en SEMANA, las autoridades tomaron cartas en el asunto y sancionaron tanto a la persona que fue identificada como la agresora del animal, así como a los dueños del mismo.
“La Policía determinó que una mujer de unos 40 años fue la que le lanzó la olla de agua caliente a Douglas, porque el animal se acercaba a sus mascotas hembras, que en ese momento estaban en celo. Varios vecinos fueron testigos del brutal ataque y telefónicamente la señalaron con los agentes. Igualmente, ella misma se presentó al comando de Cota y admitió haber agredido al perrito”, relató Lorena Cifuentes, activista de la fundación Rescate Animal Colombia.
Óscar Guerrero, inspector de Policía de Cota, tomó la decisión de multar con cinco salarios mínimos mensuales legales vigentes (4′542.630 pesos) a la atacante y a los dueños de Douglas, pues el funcionario corroboró que el perro se encontraba todo el tiempo afuera de la vivienda, sin supervisión y claramente descuidado.
“La multa la tendrá que pagar en un 60 % la señora agresora, mas o menos unos 2′700.000 pesos y el resto tendrá que asumirlo la dueña de Douglas. A pesar del fallo, ambas partes apelaron la decisión y no se sabe cuándo se puede definir, pero mientras tanto el proceso legal en su contra avanza y la multa sigue en pie”, aclaró Cifuentes.
A pesar de las múltiples heridas que sufrió, el perro fue entregado a sus dueños, quienes tuvieron que firmar un compromiso con las autoridades para garantizar un nivel de vida digno. “Se ordenaron visitas frecuentes para velar por su bienestar y, si bien ahora tiene una guaya para evitar que se acerque de nuevo a la casa de la atacante, le permite suficiente movilidad. También hay que decir que su recuperación física es satisfactoria”, enfatizó.
Según la fundación, este tipo de sanciones pecuniarias nunca había sido impuestas en Cota, por lo cual marca un hito en la lucha por la protección de los animales. “Esto va a generar conciencia en las personas, porque se van a dar cuenta de que tanto la mala tenencia como el maltrato son graves y tienen sanciones. Lo que buscamos es que les brinden una vida digna a todos los animales y se respeten sus derechos”, puntualizó la activista.
“Llegó con la piel quemada en carne viva”: veterinaria de Douglas
Douglas contaba con una herida en carne viva, infectada y sucia, según el reporte de la veterinaria que lo atendió luego que su agresora le arrojara agua hirviendo encima y no fuera conducido a recibir atención médica por parte de sus dueños.
“El perrito tenía mucha sensibilidad, solo al tocarle la cabeza se le paraban todos los pelos. Su estado era terrible, por lo cual le pedimos autorización a la señora para trasladarlo al Hospital Veterinario para Mascotas, una clínica privada del municipio que nos ha ayudado a salvar miles de animales víctimas de maltrato”, comentó la médica.
Allí, lugar al que la Fundación Rescate Animal Colombia le debe millones por los animales que le ha ayudado a sanar sus heridas, Douglas empezó a recibir un tratamiento especializado, que incluyó radiografías y láser.
“Lida, la médica veterinaria del hospital, nos informó que Douglas requería primero de una limpieza profunda de la herida en el costado derecho de su cuerpo, cerca del pulmón. La zona estaba demasiado sucia, tanto así que no se podía ver la evolución de la herida. Decidimos autorizar que le aplicaran anestesia”, comentó Lorena Cifuentes.
El perrito necesitaba atención urgente. Si la herida seguía abierta, una infección podría afectar el pulmón. “Le dijimos a la veterinaria, una persona que para nosotros es un ángel de la guarda, que no escatimara en gastos y nos fiara lo que valiera el tratamiento. Para buscar ayudas, publicamos la historia en nuestras redes sociales”, agregó la activista Cifuentes.
Desde el miércoles 28 de octubre, cuando Douglas ingresó al hospital, recibe dos terapias de láser diarias, control de dolor, comida especializada y cremas especiales para que la herida cicatrice más rápido. “La cuenta por el tratamiento de Douglas ya superó el millón de pesos. No lo hemos querido sacar de la clínica porque nos da miedo que sus dueños lo vuelvan a dejar suelto en la calle y se vuelva a infectar”, afirmó.