Judicial
Narcos usaban contenedores para mover cocaína hacia Europa escondida entre bananos; operaban con complicidad de policías y funcionarios portuarios
De manera paralela, varios bienes fueron afectados con medidas cautelares de extinción del derecho de dominio.
Las autoridades colombianas lograron desarticular una importante red de narcotráfico en una operación conjunta que involucró a la Fiscalía General de la Nación, la Delegada para las Finanzas Criminales y el Grupo de Rastreo de Activos Ilícitos del CTI, así como a la Policía Nacional y las autoridades británicas. En esta contundente acción, se propinó un golpe significativo a una estructura dedicada al tráfico transnacional de cocaína.
El modus operandi de esta red implicaba la utilización de contenedores que aparentemente transportaban bananos con estupefacientes. Estos contenedores se movilizaban sin las revisiones necesarias, facilitando así el envío de la droga hacia Europa. Para llevar a cabo esta operación, se presume que contaban con la colaboración de varios policías y funcionarios de distintos puertos.
Como resultado de esta operación, se logró la captura y posterior judicialización de cinco presuntos integrantes de la red narcotraficante. Entre ellos se encuentran José Uriel Caizedo Terán, considerado el cabecilla de la organización y un policía en retiro; Ramón Eliecer Álape Gaitán, pensionado de la policía; Luis Alberto Molina Pombo, conocido como ‘Lucho’, quien es un policía activo; Jaider Manuel Álvarez Flórez, alias Chichi; y Karen Lorena Caizedo Terán, quien presuntamente administraba los recursos del narcotráfico y apoyaba el transporte de dinero ilícito.
La red narcotraficante en cuestión es señalada de ser responsable del envío de 300 kilos de cocaína que fueron interceptados en Algeciras, España, en octubre de 2021. Bajo la operación ‘Rabino’, se logró no solo la captura de 6 personas, sino también el decomiso de 3.450 euros y tres vehículos.
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Esta operación es parte de la estrategia Argenta, impulsada por el fiscal general de la Nación, Francisco Barbosa Delgado. En el marco de esta estrategia, se ocuparon 5 inmuebles, 8 vehículos, 1 sociedad, 1 establecimiento de comercio y 1 fundación que habrían sido adquiridos y constituidos con dinero proveniente del tráfico de estupefacientes. El valor preliminar de estos bienes supera los 3.246 millones de pesos.
Estos bienes han sido sometidos a medidas cautelares de suspensión de poder dispositivo, embargo, secuestro y toma de posesión. Todos ellos serán administrados por la Sociedad de Activos Especiales (SAE), con el objetivo de asegurar su correcta gestión y evitar que vuelvan a ser utilizados en actividades ilícitas.
La operación contra esta red de narcotráfico representa un paso importante en la lucha contra el crimen organizado y el tráfico de drogas. Las autoridades continúan trabajando para descubrir más eslabones en esta cadena ilegal.
Cayó alias Niko, albanés señalado de forjar alianzas con narcos colombianos
Por otro lado, en una operación conjunta entre la Fiscalía General y la Policía Nacional, llevada a cabo en Santa Marta, se logró la detención del ciudadano albanés Besnik Nikolli, conocido en el bajo mundo como alias Niko o El Gordo.
Alias Niko ha sido objeto de búsqueda por parte de las autoridades francesas desde octubre de 2021, cuando Interpol emitió una circular roja en su contra por cargos relacionados con el tráfico de estupefacientes. Además de esta acusación, se le vincula con actividades de lavado de dinero, y su perfil delictivo lo tenía en la mira de más de 180 países.
Las investigaciones realizadas por las autoridades colombianas revelaron que este individuo habría operado al servicio de redes narcotraficantes con presencia en varios países europeos, incluyendo Francia, Albania, Holanda y Alemania. Su reciente ubicación en Colombia parecía estar relacionada con el intento de establecer conexiones con organizaciones de narcotráfico en el país.
El arresto de alias Niko no solo representa un importante avance en la lucha contra el tráfico internacional de drogas, sino que también demuestra la colaboración efectiva entre agencias de seguridad y fuerzas del orden de diferentes naciones. El detenido había sido identificado como un objetivo de alto valor por agencias como Europol e Interpol, así como por las propias autoridades francesas.
