Nicolás Petro y Day Vásquez casi ponen lujosa camioneta a nombre de escolta del presidente Petro para ocultar el origen de sus bienes

Este jueves 11 de enero se llevó a cabo la audiencia de acusación en contra de Nicolás Petro Burgos por los presuntos delitos de lavado de activos y enriquecimiento ilícito. Durante la diligencia, la Fiscalía hizo un recuento de los hechos por los cuales el hijo del presidente de la República será llevado a juicio.

Estos incluyen la presunta recepción de altas sumas de dinero de dudosa procedencia, con las cuales la pareja habría llevado una opulenta vida que incluía la adquisición de bienes considerados lujosos.

Uno de estos bienes es la camioneta blindada de marca Mercedes Benz avaluada en 200 millones de pesos que Day le pidió a Nicolás como regalo. De acuerdo con la Fiscalía, luego de hacer la compra, y como había ocurrido ya con otros bienes, la pareja buscó a nombre de quién podía poner el vehículo para darle a la compra apariencia de legalidad.

Es así como, según reveló la Fiscalía, se pensó en poner la camioneta a nombre de la hermana de Day Vásquez, uniformada de la Policía Nacional y quien para ese momento trabajaba dentro del esquema de seguridad del presidente Gustavo Petro.

“Se busca la persona a nombre de quien colocarlo, de suerte que se piensa, en primera instancia, su señoría, para desarrollar los dos verbos rectores: ocultar y encubrir, ponerlo a nombre del padre de esta, refiriéndome a Daysuris del Carmen Vázquez Castro. Después, de su hermana, situación que se descarta por Petro Burgos ante la ausencia de justificación de parte de ellos de un bien como este. Ello evidencia el absoluto conocimiento de la irregular adquisición, más cuando esta, la hermana a quien se pretendía dejar a nombre el bien, hace parte del esquema presidencial”, relató el fiscal Mario Burgos durante la audiencia.

Finalmente, según ha documentado la Fiscalía, la camioneta se puso a nombre de Blanca Isabel Gutiérrez, amiga de Day Vásquez y excontratista de la Gobernación de Atlántico.

La Fiscalía hizo un rastreo minucioso de las cuentas de Nicolás Petro y consignó cada movimiento en el escrito de acusación que se leyó en la audiencia. Precisamente, lo que llamó la atención de la Fiscalía fueron los millonarios gastos que por ningún lado cuadraban con el sueldo que para ese momento ganaba Petro en su cargo como diputado del Atlántico.

“El señor Nicolás Petro no cuenta con ninguna otra actividad económica que le genere ingresos (...) No reportó tener obligaciones financieras ni ser participante en sociedades o tener actividades económicas de carácter privado”, dice el escrito de acusación.

“Para 2022, el señor Petro Burgos solo contaba con 280 millones de pesos, por lo que existen 1.053 millones que no son producto de su labor como diputado y, al no haber reportado ni encontrado otra actividad económica legal y que le genere ingresos ni apalancamiento financiero, estos se reputan como un incremento patrimonial injustificado, y lo es porque estos no son el resultado y fruto de su trabajo, sino de los constantes ingresos clandestinos de dinero recibidos en efectivo”, dice la Fiscalía en el escrito.