La entrega de los cuerpos se realizó en Manaure, La Guajira. | Foto: Fiscalía

NACIÓN

Un entierro digno para los niños que murieron en La Guajira

Cinco cuerpos de menores de la comunidad wayúu que habrían muerto por desnutrición fueron entregados a sus familias para que sean enterrados según sus tradiciones.

18 de noviembre de 2016

Indignación, esa fue la palabra que embargó a Colombia al tomar conciencia de que hay niños que están muriendo por desnutrición. Dicho fenómeno se presenta en distintas partes del país, pero La Guajira ha sido uno de los departamentos que han encendido las alertas. Los indígenas wayúu han visto morir a sus niños y han pedido ayuda al gobierno nacional para mitigar sus necesidades.

Puede leer: ¡La Guajira S.O.S!

Este viernes se realizó una solemne y sentida ceremonia en Manaure. La Fiscalía y Medicina Legal hicieron entrega de cinco cuerpos de menores que habrían muerto por desnutrición, según los primeros informes oficiales.

La idea, era hacer “una entrega digna de los cuerpos (…) para que sean objeto de una ceremonia religiosa de acuerdo con los usos y costumbres de esta etnia”, aseguró la Fiscalía.

Pero ¿cómo es ese ritual? Para despedir de este mundo a uno de los suyos, los wayúu tienen sus propias formas. “Primero los bañan, les echan chirrinche para que no huelan mal”, le explicó a Semana.com Zunilda Iguaran, miembro de esta comunidad.

Después, la familia los vela día y noche. “Nunca hay que dejar el cuerpo solo, la idea es que no se sienta abandonado porque el espíritu siente eso”, comentó Zunilda.

Para los wayúu enterrar a alguien significa también convocar a toda la familia, esperan a que sus miembros lleguen al lugar de velación. Matan un chivo para que todos coman. Luego lo entierran. Todos los días durante un mes lo visitan, le llevan bebida y comida al difunto.

Le puede interesar: ¿La Guajira, departamento fallido?

Pero allí no acaba todo. Años después hay un segundo entierro, pueden pasar cinco, siete o los años que decida cada familia para la nueva ceremonia. Es decir, todos vuelven a encontrarse y desentierran el cuerpo. “Es necesario volver a limpiarlo y volver a enterrar los restos donde está toda la familia”, cuenta Zunilda.

A grandes rasgos, esta sería la manera como los cinco pequeños descansarían como sus costumbres mandan.

La Fiscalía deberá seguir en la tarea de recabar y esclarecer los hechos que rodean las muertes de los niños por presunta desnutrición. La investigación está en etapa de indagación y hace parte del cumplimiento de las medidas cautelares otorgadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.