Bogotá

“No jueguen con mi dolor”: la súplica de una madre sobre extraña muerte de su hijo adolescente

José Mauricio Ospina falleció hace tres meses en la localidad de Kennedy; a la fecha, ni Medicina Legal, ni Fiscalía, han dicho qué sucedió.

22 de julio de 2022
Claudia Ospina ruega a las autoridades saber qué pasó en la madrugada del 13 de abril, cuando su hijo terminó desnudo y sin vida en la casa de un compañero del colegio.
Claudia Ospina les ruega a las autoridades saber qué pasó en la madrugada del 13 de abril, cuando su hijo terminó desnudo y sin vida en la casa de un compañero del colegio. | Foto: Claudia Ospina

Desesperada, así se encuentra Claudia Ospina, la madre de José Mauricio Ospina, el joven de 17 años de edad que cursaba decimoprimer grado en el colegio Eduardo Umaña Luna, de Patio Bonito, y que al tiempo adelantaba un técnico en el Sena, pero terminó desnudo y muerto en la casa de uno de sus compañeros, cuando se suponía que tan solo iba a hacer una tarea.

La muerte de José Mauricio ocurrió entre la noche del 12 y la madrugada del 13 de abril, y hoy, tres meses después, ni el Instituto de Medicina Legal, ni la Fiscalía General de la Nación, han logrado explicar lo que sucedió esa noche en Patio Bonito, en la localidad de Kennedy, al sur de en Bogotá.

La extraña muerte fue reportada por SEMANA el pasado 8 de junio; a la fecha, las autoridades siguen sin esclarecer las razones de su muerte y mientras tanto, los posibles responsables o involucrados en el fallecimiento -denuncia su madre- siguen libres como si nada, sin responder ni explicar qué pasó ese día.

Mientras tanto, las noches de Claudia no volvieron a ser las mismas, pues además del fuerte dolor que le ha causado la ausencia de su hijo, tampoco es capaz de conciliar el sueño por la burla -dice ella- de las autoridades, que para otros casos sí actúan con prontitud, pero en el de su hijo no muestran avance alguno.

“No es justo, yo necesito saber qué pasó con mi hijo, por qué me lo arrebataron. No entiendo cómo mi hijo resultó desnudo en la casa de un compañero y fuertemente golpeado, y las autoridades siguen sin darme razón de lo que ocurrió esa noche”, asegura Claudia.

De acuerdo con la madre del menor, el Instituto de Medicina Legal, además de que no le ha hado explicación de cómo su hijo terminó fuertemente golpeado, ordenó hacerle un examen de toxicología al cuerpo del joven y se comprometió a entregarle a ella información en un plazo de dos meses, pero a la fecha no ha dado los resultados.

La falta de claridad sobre qué pasó con su hijo llevó a Claudia a interponer un derecho de petición a Medicina Legal para saber cómo avanza el proceso. “Me respondieron que se requirió ampliación del análisis toxicológico, quiere decir que tienen dudas y todavía no saben con exactitud por qué murió mi hijo, y a mí no me dicen nada, ni me dan una fecha, lo único que hacen es jugar con mi dolor de madre”, precisó.

Irónicamente, Medicina Legal le asegura a Claudia que, al tener los resultados, estos se enviarán directamente a la Fiscalía, pues el examen forma parte de un proceso de investigación, “pero en la Fiscalía me dicen que ellos tampoco pueden hacer nada y lo que debo hacer es presionar a Medicina Legal para que aceleren el examen. Es una completa falta de respeto”, dijo Claudia.

Lo que más atormenta a Claudia es que, mientras ella tiene que llorar todas las noches a su hijo, pues se lo quitaron de su lado y no pudo verle cumplir el anhelado sueño de graduarse de bachillerato, los compañeros de José Mauricio, que son los únicos que en verdad saben qué paso en la madrugada del 13 de abril, siguen con sus vidas como si nada, a la sombra de la muerte de este joven, que está impune y sin esclarecerse.

“Yo estuve hace poco en el colegio en el que ellos estudian y las directivas me confirmaron que están estudiando de manera virtual, ni siquiera están asistiendo al colegio. Me tiene bastante preocupada que el caso de mi hijo quede impune, y si las autoridades no toman cartas en el asunto, lo que le pasó a mi hijo le puede suceder a cualquier otro joven”, subrayó Claudia.

“Él era muy juicioso, dedicado a su estudio, tenía buenas notas, cuando no tenía colegio le tocaba ir a McDonald’s a trabajar en las prácticas. Me le arrebataron la vida y no sé qué sucedió, merezco saber la verdad”, enfatizó la madre.