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“No sería el gobernante para sacar adelante las reformas que necesita Colombia”: Alejandro Gaviria sobre Petro

El candidato presidencial fue enfático en decir que, a pesar de la carrera política del líder el Pacto Histórico, no sería el mejor político para llevar los cambios del país.

20 de noviembre de 2021
El exrector de la Universidad de los Andes Alejandro Gaviria dio su opinión sobre Gustavo Petro y aseguró que no es el político idóneo para la transformación del país. Fotomontaje Semana
El exrector de la Universidad de los Andes Alejandro Gaviria dio su opinión sobre Gustavo Petro y aseguró que no es el político idóneo para la transformación del país. Fotomontaje Semana. | Foto: Fotomontaje Semana

El exrector de la Universidad de los Andes Alejandro Gaviria habló con Vicky en Semana y, además de dar todos los detalles de su ruptura política con el expresidente César Gaviria, se refirió a uno de los candidatos que más ruido ha hecho: Gustavo Petro.

Respondiendo a la pregunta sobre qué opinión le merecía Petro, Gaviria aseguró que tenía una perspectiva de él como un político que entiende la realidad política por la que está atravesando el país: “Gustavo Pedro me parece que es un buen candidato, un buen político, una persona que ha dado unas luchas importantes en Colombia, ha sido capaz de articular esa frustración colectiva y entiende bien la realidad política de Colombia en este momento”.

Sin embargo, también expresó que una de sus preocupaciones es la gran brecha que existe entre su capacidad de diagnosticar los problemas de la sociedad y su capacidad de llevar a la práctica las reformas que se necesitan en Colombia. “Yo he dicho que tal vez el principal problema de un eventual gobierno de Gustavo Petro sería su ineficacia y, si quisiera utilizar un símil o una comparación —aunque no quiero mucho fungir de analista político—, sería parecido a lo que está ocurriendo en México con López Obrador: mucha discusión, mucho debate, pero poca acción y pocos cambios de verdad”.

Sobre si considera que el líder del Pacto Histórico pueda ser un mal gobernarte, señaló que era difícil de descifrar, pero comentó: “No sería el gobernante para llevar a cabo las reformas que necesita Colombia”. También señaló que, aunque no lo ve como un “peligro” para el país, lo respeta éticamente: “No me gusta decir que tiene las manos manchadas de sangre, respeto algunas de las cosas que ha hecho y creo que, en vez de infundir miedo sobre esa opción, la responsabilidad que tenemos es derrotarlo en el ámbito de las ideas’'.

También fue claro en decir que sobre el miedo infundido y casi cliché de que Colombia sería una Venezuela con Petro al mando las personas están subestimando el poder de las instituciones y de la misma población para dejar que eso pase.

“Ese no es el escenario más probable, yo creo que mi crítica está en su capacidad de poner en práctica y de llevar a la práctica las reformas de fondo que es lo que necesita nuestro país, esa reformas en temas específicos como las pensiones al sistema de impuestos, a la forma como se conduce la política agropecuaria y a la necesidad de tener seguridad territorial en buena parte de Colombia”, aseveró.

Cabe destacar que, en medio de la contienda política, Petro ha sido el blanco de varios políticos, críticos y partidos, teniendo en cuenta su liderazgo en todas las encuestas de intención de voto que se han realizado hasta el momento en el territorio nacional.

A seis meses de que los colombianos asistan a las urnas para elegir al sucesor de Iván Duque, lo cierto es que hoy la campaña de los rivales del líder de la Colombia Humana está planteada, en buena parte, en no dejar ganar a Petro.

Sobre esta realidad política, algunos sectores productivos creen que, si el candidato de izquierda llega a la Presidencia, habría una gran afectación de la economía de mercado y de las libertades. El Pacto Histórico, como Petro bautizó su movimiento, ha ganado cada día más adeptos de la nomenclatura partidista. Ha recibido en su seno a líderes de quienes antes se mostraba distante.

Sin lugar a dudas, en los últimos días, durante sus recorridos por el país, Petro ha enviado dos mensajes puntuales: que sigue sacando gente a las calles y que puede convocar a empresarios. Y algo muy singular de él: no para de hacer política con la gente.