Nación
Ocupan bienes avaluados en más de $2.500 millones de la organización delictiva Los Tierreros; están ubicados en varias regiones del país
Los delincuentes estarían involucrados en la deforestación agresiva del denominado cordón verde de Villavicencio y la venta ilegal de lotes.
Un total de 25 inmuebles rurales, 11 urbanos y 3 vehículos, de la organización delictiva Los Tierreros o Los Topos, fueron ocupados por la Fiscalía General de la Nación en diferentes ciudades del país.
De acuerdo con las investigaciones, estas personas estarían involucradas en la deforestación agresiva del denominado cordón verde de Villavicencio, la venta ilegal de lotes en esta zona protegida y el desarrollo de proyectos urbanísticos.
Los bienes tienen un avalúo superior a los 2.500 millones de pesos y entran en un proceso de extinción de dominio porque son considerados patrimonio ilegal de la organización delincuencial; así mismo, quedan afectados con medidas cautelares de suspensión del poder dispositivo, embargo y secuestro y a disposición de la Sociedad de Activos Especiales (SAE).
Luz Ángela Bahamón Flórez, delegada para las Finanzas Criminales, indicó que “a esta red se le atribuye la tala indiscriminada de árboles en el llamado cordón verde, considerada área especial de importancia ecológica, donde además habrían sido contaminadas varias fuentes hídricas”.
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Fueron ocupados 25 inmuebles rurales, 11 urbanos y 3 vehículos, cuyo valor supera los $2.500 millones. Las diligencias se cumplieron en Bogotá, Hobo, #Huila; Combita, #Boyacá; Manizales, #Caldas; Cali, #ValleDelCauca, y Villavicencio, Restrepo y Barranca de Upía, #Meta. pic.twitter.com/mTvnRwWGXL
— Fiscalía Colombia (@FiscaliaCol) November 6, 2022
La investigación e información entregada por la Corporación para el Desarrollo Sostenible del Área de Manejo Especial La Macarena, Cormacarena, informa que el área afectada asciende a 7,1 hectáreas, en la que fueron talados 1.164 árboles.
Adicional a esto, las personas habrían modificado el terreno y contaminado las fuentes hídricas, entre otros graves daños al ecosistema de la región.
“Con esto generaron un daño ambiental de lenta y muy difícil recuperación, además de una afectación económica cercana a los 12.000 millones de pesos”, expresó Bahamón Flórez.
El operativo, que fue desarrollado a través de la Dirección Especializada de Extinción de Dominio, la Dirección de Carabineros de la Policía Nacional y el Ejército, se cumplió de manera simultánea en Bogotá, Hobo (Huila), Cómbita (Boyacá), Manizales (Caldas), Cali (Valle del Cauca) y Villavicencio, Restrepo y Barranca de Upía (Meta).
Durante el proceso de investigación incluyeron varias inspecciones en las que las autoridades constataron el uso de maquinaria amarilla y la presencia de topógrafos, arquitectos y otros trabajadores.
Según la delegada, “esta red criminal tendría a su servicio operarios de maquinaria amarilla, topógrafos, arquitectos y un abogado que buscaban garantizar el éxito de las estafas a personas ilusionadas con adquirir un inmueble o un lote”.
El abogado, de acuerdo con la investigación, sería el encargado de las maniobras fraudulentas en notarías de Villavicencio para concretar la venta de los lotes. “Quedó en evidencia un componente armado señalado de intimidar a las personas que se oponían o hacían reclamos al darse cuenta de las irregularidades”, aseguró la Fiscalía.
Presuntamente detrás de esta actividad ilícita comercial estaba una supuesta organización sin ánimo de lucro que sería la encargada de darles apariencia de legalidad a los proyectos al publicitar y ofrecer los predios.
Los terrenos al parecer fueron invadidos, loteados y vendidos fraccionadamente con promesas de redes de servicios.
Desarticulación de la banda Los Tamales que operaba en Bogotá
En un trabajo conjunto entre la Fiscalía General de la Nación y la Sijín de la Policía, autoridades lograron la desarticulación de la banda delincuencial llamada Los Tamales, responsables del tráfico de estupefacientes en la localidad Rafael Uribe Uribe de Bogotá, al suroriente de la ciudad.
De acuerdo con las autoridades, los miembros de la banda se vestían y actuaban como habitantes de calle para no ser detectados por los investigadores.
De acuerdo con la Fiscalía, los delincuentes escondían las sustancias ilegales en canecas de basura y que transportaban en carretillas. Así, buscaban evadir el control de las autoridades.