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“Oneida está encerrada y así permanece todos los octubres”: papá de Colmenares

Luis Colmenares narró el enorme dolor que vive la madre del universitario, a diez años de esa tragedia. Este es el testimonio que la mujer, en medio de su dolor, le entregó a la justicia en el proceso por su muerte.

14 de octubre de 2020
Oneida mamá de Colmenares
“Oneida está encerrada, así permanece todos los octubres”: papá de Colmenares | Foto: Archivo

Cerca de cumplirse 10 años de la muerte de Luis Andrés Colmenares, los recuerdos alrededor de ese caso que estremeció al país comienzan a salir de nuevo. En una entrevista con Vicky Dávila, el papá del universitario Luis Colmenares habló de los momentos de dolor que ha vivido la familia en todo este tiempo.

El padre de Luis Andrés narró que la mayor tristeza de la familia la ha tenido la mamá del fallecido joven. “Oneida está encerrada y así permanece todos los 31 de octubre del año. Lo que pido es que en medio de mi fe es que le de fortaleza y que nos ayude que esto pase rápido”, dijo.

Vea la entrevista de Luis Colmenares con Vicky Dávila

“A nosotros el dolor se nos ha ido aliviando. La herida ha ido curándose. La cicatriz permanecerá siempre. Si tuviéramos que decidir una sola persona que haya sentido el dolor de su familia, diríamos que nadie sufre más que su mamá. Los hijos son de la mamá. Nadie puede sentir más ese dolor que ella”, dijo.

El caso por la muerte del universitario fue resuelto ya en primera instancia en la justicia. La jueza absolvió a las compañeras de curso de Colmenares, Laura Moreno y Jessy Quintero, quienes fueron acusadas de ser coautoras de un supuesto homicidio. La jueza le dio crédito a la tesis de los peritos que sostenían que hubo una caída. “A este despacho no le queda duda de que las lesiones corresponden a una caída”. La jueza concluyó que no hubo múltiples impactos (golpiza), sino una sola caída, que resultó fatal", dijo en la audiencia en la que leyó su fallo.

Laura Moreno (izq.) y Jessy Quintero (centro), fueron absueltas por la muerte del joven Luis Andrés Colmenares. | Foto: Archivo SEMANA

El caso está en apelación ante el Tribunal Superior de Bogotá. Don Luis Colmenares asegura que “el tribunal lleva tres años en ese análisis, en ese examen. Confiamos en que allí, donde la decisión la toman tres jueces, el caso se mire de una manera distinta...Todas las pruebas me demuestran que a Luis Andrés lo asesinaron".

| Foto: SEMANA

El dolor de una madre

La madre de Luis Andrés Colmenares no suele salir mucho a los medios de comunicación. La mujer ha vivido un drama silencioso y ha contado su testimonio en pocas oportunidades, algunas en los medios de comunicación y una vez ante la justicia.

Este fue el testimonio que entregó a la jueza penal que llevaba el caso de su hijo durante el juicio.

“Yo estaba durmiendo con mi hijo Jorge porque mi esposo se había ido para Chile y Luis había salido para una fiesta. En la madrugada sonó el teléfono, Jorge contestó y le habló Gonzalo Jiménez, compañero de Luis Andrés. Él le preguntó a Jorge que si su hermano había llegado a la casa. Le dijo que fuera al cuarto a revisar si estaba ahí. Gonzalo le dijo ‘no le vayas a decir a tu mamá: tu hermano salió corriendo y lo estamos buscando’”.

“La llamada que recibió mi hijo Jorge fue a las 4:05 de la madrugada. Era del número telefónico de mi hijo. Yo empecé a llamar y no me contestaron. A los 20 minutos Gonzalo me marcó y dijo que mi hijo había salido corriendo y que no lo encontraban. Me dijo que me calmara, que me quedara allá, y me colgó”, narró.

La mujer recordó ante la juez lo feliz que estaba su hijo el día que salió a la fiesta de disfraces organizada por sus compañeros de universidad. “Salió a la fiesta en compañía de Gonzalo Gómez y Laura Moreno. Iban en el carro de Laura. Se fueron los tres, iban a recoger a Guillermo”. Agregó en su declaración que “Luis Andrés iba muy contento con la sonrisa que lo caracterizaba. Salió en sano juicio de la casa. Él había estado todo el día conmigo. El 31 salió vestido de diablo con camisa y pantalón negro, un saco rojo, una cola de diablo y los cachos”.


Oneida relató como, tras la llamada en la que le advertían que no se sabía nada de Luis Andrés, se le derrumbó el mundo. “Yo me desespere y salí como una loca a buscar a mi hijo. Hablé con Gonzalo y él decía insistentemente que no fuera. Luego de preguntar varias veces, me informó que estaban en el CAI del parque El Virrey. Faltaba un cuarto para las 5:00 a. m.”.Ella, según manifestó, llegó allá 20 minutos después.

“Cuando llegue a El virrey estaban Gonzalo, Laura Moreno, un policía y un supuesto borracho que estaba pendiente de nosotros. Estaba la camioneta de Laura. Yo busqué a Jessy porque sabía que era su mejor amiga. Yo esperaba que Jessy estuviera porque Luis me había dicho que la iba a llevar a su casa”, agregó.

Luis Andrés Colmenares. | Foto: Captura imagen/LACE

“Laura me contó que Jessy le dijo: ‘el Negro (Luis Andrés) salió corriendo’. Luego me indicó que ella le pasó a Jessy los cachos y el saco y que corrió detrás de él. Me contó que a Luis se le cayó el reloj y que le dijo: ‘No me devuelvo por ti, sino por el reloj que me regalo mi papá’. Ella dijo que logró alcanzarlo y lo abrazó y le dijo ‘Negro, no más’. Él se le soltó y salió corriendo. Ella dijo que vio los pies de Luis volando en el caño. Le pregunté si no sintió ruido de agua. Ella me dijo: ‘No, parece que se lo hubiese tragado la tierra’”.


Tras ello la madre afirma que observó el caño en búsqueda de evidencias. “Busqué sangre, pero no vi nada raro. Le pregunté (a Laura) por el corbatín que tenía mi hijo. Ella me dice que él se lo enrolló en las manos. Me asomé y no había gran cantidad de agua, estaba limpia y se veía el piso. Ella me dijo que se había metido y que el agua le daba en los talones”."Me llamó la atención que Laura me dijo que los dos saltaron las barandas del parque. A mí me pareció imposible porque esas barandas son muy altas. Miden 70 centímetros y mi hijo, supuestamente, iba borracho. Pero si estaba así ¿cómo salió (del caño)? Y ella me decía: “Pero él salió, él salió”."Jorge estaba con la misma desesperación que yo tenía. Me dijo: ‘Mami yo me meto al caño’. Y no sé, por los nervios nos dejamos llevar por lo que decían. Laura me dijo ‘ya salió’. Como que me confié. Me preguntaba para qué perder tiempo. Ahora me arrepiento", declaró ese día.

*Este testimonio fue originalmente publicado por SEMANA en julio de 2015.