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Órganos de Víctor Escobar, quien cumplió su voluntad y recibió eutanasia, serán donados

“Esta es una batalla que abre las puertas para los demás pacientes que vienen detrás de mí y que, en estos momentos, desean una muerte digna”, dijo el hombre días atrás.

8 de enero de 2022
Víctor Escobar
Víctor Escobar | Foto: Twitter @LuisCGiraldo

Víctor Escobar entró este viernes a la clínica en la que se le realizó el procedimiento de eutanasia. Su historia fue contada en SEMANA y dividió opiniones a nivel nacional. “Hoy para mí es un día lleno de alegría, de felicidad, de saber que hoy me reuní con el comité médico y ya quedamos listos en que el procedimiento va a ser el 7 de enero a las 7:00 p.m. y, para mí, es una gran felicidad que termine mi sufrimiento de tantos años”, dijo en su momento.

Y justamente a las 9:20 p. m. su abogado, Luis Giraldo Montenegro, quien lo acompañó en toda su lucha legal, confirmó a través de redes sociales que oficialmente se le realizó el procedimiento al caleño por parte de su EPS, Coomeva.

“Víctor acaba de lograrlo... Acaba de descansar del dolor. Dios tendrá misericordia de él... eres un guerrero”, publicó en su cuenta de Twitter.

Y fue el mismo Giraldo Montenegro quien contó que los órganos funcionales de Escobar serán donados. “Víctor Escobar solicitó donar sus órganos funcionales. Falleció a las 9:20 p. m. del viernes 7 de enero de 2022, como fue su deseo”, puso en su cuenta en la misma red social.

El procedimiento fue aprobado después de que la Corte Constitucional extendiera el derecho de eutanasia a personas que no necesariamente padezcan una enfermedad terminal.

El mensaje de despedida de Víctor Escobar

“Para mí, cada día es un sufrimiento más, un sufrimiento de dolor, de angustia, de padecimiento. Gracias a Dios y al abogado se nos dieron ya las cosas. Mis enfermedades son dos accidentes cerebrovasculares. Tengo Epoc pulmonar, fibrosis pulmonar, hipertensión pulmonar, el lado derecho del corazón grande, hipertensión y diabetes. Entonces es un poco complicada mi situación de salud”, contó el hombre en su momento y ya resignado, esperando la práctica de la eutanasia.

Víctor hablaba poco porque el aire le faltaba hasta para levantar la mirada. Sus días, desde hace 11 años, estuvieron conectados a dos respiradores artificiales con los que tomaba aliento para hilar tres o cuatro palabras antes de caer presa de su ahogo perpetuo. Dos accidentes cerebrovasculares y los pulmones operando solo al 40 % lo hicieron reflexionar sobre su vida: llegó al punto en el que solo quería una muerte digna.

Tal fue el punto de planeación de su muerte que él mismo eligió la fecha. “Yo siempre he querido un día viernes en la noche, cosa que el cuerpo lo entreguen el día sábado, el velorio en la casa de mis padres y el domingo ya sea el entierro normal para la cremación. Quería que mi familia no tuviera el duelo en Navidad o Año nuevo, que pasen su Navidad tranquilos, que disfruten su Año Nuevo, que compartan en familia –que compartamos, porque me incluyo ahí–. Por eso escogí el 7 de enero”, dijo en declaraciones a SEMANA.

Lo más difícil creo que será el momento de la partida. Pero a Dios gracias, he tenido el apoyo y la compresión de cada uno de mis hijos, de mi familia y de mi esposa, pero sé que es duro y es difícil. La verdad sí hay muchas posturas encontradas, en verdad yo les digo que este fue un camino largo, pero en el cual se han abierto las puertas de la esperanza para muchos pacientes no terminales como en el caso mío, pero la lucha fue constante y gracias a Dios se dio, esta es la puerta que muchos pacientes necesitan”, agregó Escobar en un último video divulgado por su familia el viernes, al señalar que la decisión fue muy difícil, pero al tiempo muy sensata.

Siempre trabajó como conductor de tractomulas y en una fábrica de cemento donde manipulaban altos niveles de asbesto. Antes de los accidentes cerebrovasculares era un tipo sano, fumador y de poco descanso; deja tres hijos que no vivían con él y conoció a su esposa cuando ya la salud le era esquiva. Diana era su ángel de la guarda: lo bañaba, vestía, llevaba al médico, lo auxiliaba en las noches, limpiaba la sangre de su ropa, arreglaba la casa y lo alimentaba con los cuidados propios de un bebé de apenas meses de nacido. Víctor comía poco y todos los alimentos debían ser semiblandos para poder ingerirlos. “Mis hijos y mi esposa son lo más lindo que me llevo de este mundo. Haber compartido con ellos y haber tenido un hogar es lo más lindo”.

La promesa del congresista Reyes Kuri a Víctor Escobar

“Víctor siempre manifestó la importancia de regular la eutanasia en el país, su proceso estuvo lleno de tramites y trabas innecesarias, por lo que no quiere que ningún colombiano pase por lo mismo. Él ahora es un referente en la lucha por las libertades, en su libre decisión de despedirse del dolor y morir dignamente. Yo le prometí seguir en esa lucha, la de respetar las decisiones de los demás que no afecten a los otros. No me alegra saber que morirá, pero sí que su decisión por fin fue respetada”, aseguró Reyes Kuri.