| Foto: Juan Carlos Sierra

NACIÓN

Óscar Naranjo: ¿Vicepresidente?

Aunque no está confirmado, todo parece indicar que el general (r) será el segundo a bordo de la fase final del gobierno Santos. Semana.com revela algunos detalles.

29 de diciembre de 2016

El miércoles un almuerzo pudo haber solucionado uno de los interrogantes más importantes de la alta política. En Anapoima (Cundinamarca) se sentaron en la misma mesa el presidente Santos, el vicepresidente Germán Vargas Lleras y el fiscal Néstor Humberto Martínez. Lo que podía ser un informal encuentro en épocas navideñas de los tres más altos funcionarios del Estado, aparentemente resolvió una de las jugadas clave del ajedrez del poder del 2017: quién será el próximo vicepresidente.
 
El elegido parece ser el general Óscar Naranjo. Su nombre ha cogido fuerza en las últimas semanas y en el Palacio de Nariño se daba como el gran favorito. Una situación ha hecho pensar a muchos que es él. En el viaje de 10 días que hizo Santos para recibir el Nobel, todos los invitados se devolvieron, menos él. Naranjo acompañó al presidente a los cuatro países de la gira. Incluso estuvo en el Vaticano cuando se produjo la cita entre el papa Francisco, Juan Manuel Santos y Álvaro Uribe.
 
Puede leer: ¿Quién podría reemplazar a Vargas?
 
Hubo un detalle que para muchos era una confirmación de que es el elegido. En una comida en Italia, el presidente se acercó a la esposa del general y le dijo en tono jocoso: “Se lo voy a quitar por un rato más”.
 
Un hombre que no polariza
 
La designación de Naranjo aliviaría todas las tensiones políticas que había generado la puja por ese cargo. La razón principal es que como el general no representa a ningún partido político presidencial, su llegada al Palacio de Nariño no se interpretaría como una ventaja para ninguno de los candidatos en la contienda.
 
Ese balance es difícil de lograr con otro nombre y había generado muchas suspicacias y malentendidos. Por un lado, se había hablado de que el reemplazo tenía que ser una persona de Cambio Radical, pero en el liberalismo y en La U muchos se quejaron pues esto le daría una gabela adicional a Vargas, pues podría tener a alguien de los suyos al frente de continuar lo que más réditos ha dado en el Gobierno: la ejecución de las grandes obras, los acueductos y las viviendas.
 
Le recomendamos: Los secretos del general Naranjo
 
Sin embargo, el Consejo Nacional Electoral aclaró que el vice no tenía que ser del mismo partido que Vargas, y con eso las tensiones se disiparon. Pero los nombres de Juan Fernando Cristo, Sergio Díaz Granados y otros que estaban en el sonajero crearon los mismos temores que la llegada de una cuota de Vargas: que desde la Vicepresidencia se favoreciera al candidato del liberalismo o del Partido de la U.
 
¿Quién es Naranjo?
 
El general Óscar Naranjo ha sido uno de los altos mandos de la fuerza pública más queridos del país. Fue uno de los hombres clave en la lucha de Colombia contra el narcotráfico en los 90. En sus años de trabajo en la Policía Nacional, participó en la caída de dos carteles y la captura de los más importantes delincuentes de un país. Además logró la liberación de Juan Carlos Gaviria y muchos años después también fue clave en la de Íngrid Betancourt, los norteamericanos y los soldados que regresaron a la libertad en la Operación Jaque.

En el año 2008 fue nombrado el “mejor policía del mundo” y en sus años como director de la Policía tuvo más del 80 % de favorabilidad, siendo el personaje más popular del país, después del entonces presidente, Álvaro Uribe. Hasta José Miguel Vivanco, el director de Human Rights Watch que ha criticado con ahínco los excesos de los militares, lo ha reconocido como uno de los hombres que más han luchado contra el crimen en el país.

En 2012, luego de 36 años de servicio y cinco años como director, Naranjo se retiró de la Policía en medio de homenajes. Meses después, el presidente Santos lo llamó para lo que sería la misión más vital de su mandato: el proceso de paz.
 
El general retirado conformó el primer grupo de cinco plenipotenciarios junto con el presidente de la Andi, Luis Carlos Villegas; el general (r) Jorge Enrique Mora Rangel; el exministro y excomisionado de Paz Frank Pearl. y el alto consejero de Seguridad Nacional, Sergio Jaramillo, quien fue nombrado nuevo Comisionado de Paz.
 
Como La Habana al comienzo no era un trabajo de tiempo completo, Naranjo se convirtió en una cotizada estrella de las consultorías de seguridad en el mundo. México lo llevó para que ayudara con la creciente crisis de los carteles de la droga. Cuando llevaba ya un buen tiempo en ese país, el presidente Santos lo llamó para que volviera y se dedicara de lleno al proceso. En ese momento se dijo que hubo un malentendido pues el presidente le sugirió que él sería su fórmula vicepresidencial. Finalmente el tema no se concretó y el general llegó en un cargo nuevo como ministro consejero del Posconflicto.
 
En círculos allegados al Palacio de Nariño se dice que el presidente siente una deuda con él desde entonces y que esta sería la mejor forma de recompensarlo. Aunque en ese nuevo organismo Naranjo estructuró algunos de los planes para el momento que se vive hoy.
 
Puede leer: Perfil de Óscar Naranjo, el general se retira de la Policía
 
Para Santos, Naranjo tiene una doble ventaja. Por un lado, la confianza. Como ministro de Defensa, el hoy presidente trabajó de cerca con el entonces director de la Policía y juntos lograron muchos de los grandes golpes. Por otro lado, el general fue uno de los primeros en sumarse al proceso con las FARC, en un momento en que esa posición era incómoda e impopular para cualquiera que hiciera parte de las Fuerzas Armadas.
La confirmación de quién será el vicepresidente se puede, sin embargo, demorar. Vargas Lleras tendría hasta finales de enero para presentar su carta de renuncia al Senado. Muy seguramente la expectativa sobre quién será su sucesor durará varias semanas más.