Paro Nacional | CIDH le ordena al Estado determinar el paradero de líder estudiantil desaparecido en Cali

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) le ordenó al Estado colombiano tomar todas las medidas para proteger los derechos fundamentales de los hermanos Fernando Alberto y Fredemy Alberto Marín Marín, representantes estudiantiles y líderes en las manifestaciones que se adelantaron en la ciudad de Cali durante el Paro Nacional del año 2021.

En el caso de Fredemyr se le ordena al Estado “adoptar las medidas necesarias” para determinar la situación “y paradero”. Esto teniendo en cuenta que fue declarado como desaparecido el 10 de noviembre de 2021 después de salir a realizar una vuelta personal. Ese día, su hermana recibió una llamada de un número desconocido en el que le confirmaban que estaba retenido.

“(…) a su hermano lo tenemos por culpa de su hermanito (en referencia a Fernando)”. Tras esa lapidaria frase le colgaron y pese a que intentó comunicarse nuevamente con dicho celular, lo habían apagado. Dos meses después no se ha podido establecer el paradero del líder estudiantil ni quién lo retuvo.

El organismo internacional pidió todas las medidas necesarias para “proteger sus derechos fundamentales a la vida e integridad personal; garantizar acciones efectivas de búsqueda a través de sus mecanismos especializados y creados para tales efectos”.

Por su parte, haciendo referencia al caso de Fernando, se manifiesta que ha sido víctima de seguimientos, amenazas e intimidaciones constantes por su trabajo en la misión médica que tuvo un papel activo en medio de las protestas que se adelantaron en Cali. En el informe se reseñan llamadas amenazantes, envío de coronas fúnebres a su hogar e incluso al hotel en el que se quedó por algunos días, insultos mientras ejercía su labor como médico, y señalamientos constantes, en los que incluso ha sido catalogado como “guerrillero”.

“Pensás que es un juego, te estábamos siguiendo, estás en el puente de los mil días”, esto fue lo que le dijo una persona que lo llamó a su teléfono celular mientras estaba trabajando. Esto con el fin de señalarle que lo estaban siguiendo y que sabían cada uno de sus movimientos. Muchas llamadas de este estilo se repitieron durante meses.

La CIDH le pidió al Estado “adoptar las medidas necesarias para proteger los derechos a la vida e integridad de John Fernando Marín Marín y su núcleo familiar; e informar sobre las acciones adoptadas a fin de investigar los hechos alegados que dieron lugar a la adopción de la presente medida cautelar, y así evitar su repetición”. Esto tras catalogar como grave la situación que están viviendo por su labor social y liderazgo.

Este caso tiene como antecedente los graves hechos que se presentaron durante el Paro Nacional, la polarización que se presentó durante las manifestaciones y los ataques en contra del personal médico en las protestas.

“(…) la CIDH consideró la información disponible que indica que no se han adoptado medidas para la protección de John Fernando, pese a la persistencia de graves hechos de riesgo desde el Paro Nacional. Con respecto a Fredemyr Alberto, la Comisión tomo nota de la falta de información sobre su situación o paradero desde el 10 de noviembre y concluyó que ambos se encuentran en una situación de gravedad y urgencia, puesto que sus derechos a la vida e integridad personal están en riesgo”, precisó el organismo internacional.

Finalmente, le da un plazo de 15 días al Estado con el fin que envíen un informe sobre los avances de las investigaciones, las acciones que se tomen para esclarecer estos hechos y las medidas de protección a los dos hermanos Marín.