Nación
“Sálvese quien pueda”: el estremecedor clamor de un neurocirujano frente al colapso de las UCI y la “toma de Bogotá”
El doctor Remberto Burgos cuenta el dramático panorama de las clínicas de la capital, en donde ya no se pueden hacer cirugías vitales. “Se abrió la puerta para que los cachos de la covid-19 lastimen a tantos ... todo se va a unir y va a ser un desastre epidemiológico lo de Bogotá”.
Cuatro situaciones particulares, no personales, rebosaron la copa de un neurocirujano que no pudo cumplir sus compromisos con pacientes que requerían de urgencia intervenciones para curar dolores agudos. El doctor Remberto Burgos se cansó de morderse el codo y aguantar lo que a su consideración dejan los bloqueos y convocatorias del paro nacional.
En entrevista con Semana este neurocirujano aseguró que por cuenta de los bloqueos no pudo llegar a tiempo a varias cirugías, una para curar un mal conocido como el “dolor del suicidio” nombrado así porque el padecimiento es tan fuerte que al paciente le provoca acabar con su vida y así eliminar el trauma. Ese, es un solo caso de los cuatro que impactaron la paciencia del doctor Remberto.
Otro caso que tuvo que enfrentar este neurocirujano dejó sin la posibilidad de intervención urgente a un paciente con hemorragia cerebral, pues el doctor no pudo llegar a tiempo por cuenta de un bloqueo. “Quería operarle en la ventana terapéutica precoz, las primeras dos horas. Un atraso de 45 minutos marca la calidad funcional del enfermo que no da espera y disminuye sus posibilidades de vida”.
Así, y de forma sucesiva, el doctor Remberto ha tenido que superar situaciones que sobrepasan la incomodidad de los bloqueos y ponen en riesgo la vida de cientos de pacientes, al punto que, a su criterio, esto dejó de ser un paro y se convirtió en una masacre colectiva por cuenta, además, del contagio de la covid-19, mientras las personas esperan la llamada inmunidad de rebaño.
“Más que una inmunidad de rebaño lo que vamos a tener es una desbandada de ovejas, bajo el lema sálvese quien pueda. Imagínese a los colombianos que asistan este sábado, este martes, miércoles a convocatorias, es mayor la exposición, mayor contaminación, mayor contagio esto es exponencial”, señaló el doctor Remberto.
El neurocirujano calificó de infames a quienes convocan a nuevas movilizaciones en medio de la difícil situación que vive el país por cuenta de la covid-19, aseguró que es irresponsable hacer ese tipo de convocatorias cuando las Unidades de Cuidado Intensivo están al tope, sin la posibilidad de recibir más pacientes contagiados. “Yo tengo una gran preocupación y tengo también un profundo dolor, pero la gran preocupación es que hay un colapso en el sistema de salud, las UCI están saturadas y no hay camas hospitalarias”.
El doctor Remberto considera inaudito que mientras las UCI están colapsadas, quienes convocan al paro no piensen en eso e insistan en aglomerar personas. “Eso es una infamia”, en criterio del médico, “es abrir la puerta para que los cachos de la covid-19 lastimen a tantos colombianos, no vamos a tener pausas en las horas críticas de la covid, y con esta irresponsable convocatoria todo se va a unir y va a ser un desastre epidemiológico lo de Bogotá”.
Para el médico, los colombianos están pasando por encima de las cifras de contagio, no les importa, con “la obtusa idea de la inmunidad de rebaño”, que según el doctor, está muy lejos con la situación y la realidad sanitaria que vive el país. “¿Usted cree que no conmueve el alma cuando no le permiten el paso a una ambulancia?, ¿cree que no me duele cuando hay que decirle a una familia que no le pueden llegar los insumos para su ser querido?, esto más que paro parece una masacre colectiva que afecta la vocación de los médicos”.
Las críticas del médico ocurren en el momento en que los miembros del Comité del Paro anuncian que se levantan de la mesa de diálogo con el Gobierno nacional que tenía como objetivo conjurar el paro. El doctor Remberto hace un llamado a la sensatez de los jóvenes para que entiendan la responsabilidad que tienen, no solo con las movilizaciones, sino con la salud de la gente que dicen representar en las calles.
“El sistema de salud está colapsado y esto exige de la ciudadanía en general un comportamiento estricto, en cuanto a los protocolos y las medidas de bioseguridad… las UCI no dan abasto y adicionalmente personal sanitario, médicos, enfermeras, auxiliares están entregando el corazón y el alma para poder atender a todos”, explicó el médico.