Paro nacional | Primeras capturas por incendio al Palacio de Justicia de Tuluá

Las imágenes que se vivieron en el municipio de Tuluá en el Valle del Cauca y donde el Palacio de Justicia terminó envuelto en llamas, se convirtieron en una muestra violenta de la actual coyuntura que vive el país. La Fiscalía aseguró que por esos actos vandálicos ya tiene a los presuntos responsables capturados.

Así lo confirmó el fiscal Francisco Barbosa tras una visita que hizo a Tuluá en compañía de su equipo directivo y de los fiscales encargados de adelantar todas las investigaciones por actos de terrorismo en el marco de la protesta y el paro nacional. “Quiero decirles a los vallecaucanos y a los tulueños que la Fiscalía General de la Nación capturó, con la Policía Nacional, a nueve personas”.

De esas personas capturadas al menos tres estarían implicadas en los actos vandálicos que terminaron con el incendio y destrucción del Palacio de Justicia de Tuluá. La Fiscalía aseguró que les imputaron cargos y un juez de control de garantías ordenó enviarlos de manera inmediata a una cárcel por representar un peligro para la sociedad.

“Asimismo, los tres procesados serían los presuntos responsables del saqueo a un establecimiento comercial de motocicletas. En el momento de la captura se logró la recuperación de cinco de los vehículos que habrían sido hurtados del lugar”, aseguró el fiscal Francisco Barbosa.

En otras palabras, luego de asaltar y saquear el establecimiento comercial dedicado a la venta de motocicletas y guardar los cinco vehículos que hurtaron, decidieron desplazarse y acompañar la turba que terminó por incendiar el Palacio de Justicia y con ello, miles de procesos que estaban en investigación. “La Fiscalía les imputó los delitos de terrorismo, hurto calificado y asonada. Un juez de control de garantías los cobijó con medida intramural”.

El resto de personas que fueron capturadas también estarían vinculadas a las investigaciones que se adelantaron por cuenta de los hechos de vandalismo, saqueo, hurto y daño en bien ajeno, que afectó al municipio de Tuluá el pasado martes. Las pérdidas fueron millonarias y por eso la Fiscalía les imputó los delitos de terrorismo, amenazas, obstrucción y daño en bien ajeno.

“Las otras seis personas se presentaron ante juez de garantías por cuenta de los saqueos que se vivieron en el centro Tuluá, cuando atacaron al comercio y a las personas que trabajan todos los días en esta zona. También atacaron las sedes de la Alcaldía, la Fiscalía y parte del mobiliario público de este municipio”, informó el jefe del ente acusador.

Se trató de una jornada de terror, dicho por los propios habitantes del municipio de Tuluá, que debieron enfrentar, con impotencia, y ver cómo los delincuentes atacaban a los propios ciudadanos, saqueaban los establecimientos comerciales y completaron su acto criminal con la destrucción del Palacio de Justicia, que entre otras cosas es un edificio representativo para el Valle del Cauca.

“La Fiscalía General de la Nación continuará en la tarea de cumplir con sus misiones constitucionales de investigar todos los hechos que sean constitutivos de delitos y de no permitir que se erosionen las instituciones. Seguiremos dándole resultados al país y manteniéndonos firmes frente a la delincuencia”, concluyó el fiscal.

El rechazo y el dolor fueron generalizados en todo el país al ver las imágenes del Palacio de Justicia envuelto en llamas. Justamente en ese espacio estaban los procesos contra narcotraficantes y grupos de delincuencia organizada, de ahí que la hipótesis de una planeación y financiación para destruir el edificio se encuentra en verificación.