Bogotá
Patio taller del Sitp en Usme en Bogotá ahora funcionará con más de 100 paneles solares
A través de esta iniciativa, TransMilenio busca contribuir a la carbono neutralidad.
Con el fin de iniciar la transformación del uso y aprovechamiento de los recursos, el Patio Taller Gran Américas Usme del Sistema Integrado de Transporte Público (Sitp) puso en marcha el nuevo sistema de suministro de energía, a través de 122 paneles solares, para fomentar el uso de energías limpias que permitan consolidar el uso de fuentes no convencionales de energía y aportar a la ciudad por medio de acciones efectivas contra el cambio climático.
El sistema de paneles solares instalado por la Compañía Enercer en la cubierta del taller de mantenimiento de los buses del Sitp aprovecha la infraestructura con la que se cuenta en el patio El Uval de Gran Américas Usme para aprovechar al máximo la energía solar, abarcando un área de 349 metros cuadrados y contiene un sistema fotovoltaico interconectado de auto generación de energía eléctrica de 54,3 kilovatios-pico kWp.
Dicha auto generación de energía se traduce en una capacidad de suministrar el 57 % de las necesidades de energía eléctrica que requiere el patio taller para funcionar. El proyecto cuenta con el aval de conexión con el operador de red (Enel Colombia).
TransMilenio a través de esta iniciativa, busca aportar a los objetivos de desarrollo sostenible de la administración distrital y a su avance por contribuir a la carbono neutralidad, no solo a través del transporte, también en la construcción de una política pública comprometida con los acuerdos mundiales para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y contrarrestar en el calentamiento global.
Desangre de TransMilenio
En 2019, la evasión en TransMilenio fue estimada en 15,36 %, lo que implica que de 100 usuarios que utilizan el sistema, aproximadamente 15 evaden el pago del pasaje. Entre suma y suma el hueco es enorme y los diagnósticos están, pero no las soluciones.
Así, existen estudios, como el realizado en la Universidad Nacional, según el cual el 10,45 % del total de la evasión del sistema se da por medio de los torniquetes, es decir, prácticamente a los ojos de todos. Existe otro 4,91 % que se produce a través de otras entradas: desde el que se le tira a los carros por la avenida para subirse por una de las puertas de embarque y desembarque, hasta el que se pasa pegado al cuerpo del otro o detiene el giro del torniquete para aprovecharse del que pagó adelante.
Otros de los hallazgos que hay en los estudios es que los días de mayor evasión son los domingos y festivos, cuando hay una proporción enorme, de 25,21 % de colados. Le siguen en el deshonroso escalafón, los días sábados, con una evasión de 16,42 %.
Entre tanto, en los días hábiles, con todo y el mundo de gente que permanece abordando el TransMilenio durante todo el día, también se presentan colados y no una suma menor. En esas jornadas hay 14,22 %, según el mismo estudio.
De hecho, según la concejala Lucía Bastidas, también otra investigación realizada por la Universidad de los Andes halló datos similares, lo que indica que la problemática es mayúscula. “La evasión de la tarifa es de 15,4 % diarios de lunes a sábado, los domingos la cifra aumenta al 25,2 % lo que representa dos millones de colados por semana”, son algunas de las cuentas del segundo estudio sobre el tema.
Sin olvidar que el sistema de transporte público en Bogotá fue objeto de daños durante las protestas, lo que también demanda muchos recursos para las reparaciones, hay que decir que hay muchas fuentes de desangre.
En el sistema TransMilenio también se presentan otras formas irregulares que ayudan al desangre del sistema. Por ejemplo, durante este año, la Policía Nacional capturó a personas que tenían montado un negocio, aprovechando que hay un beneficio en el pasaje para las personas del Sisbén. Lo venden a menor precio al usuario, lo que a la larga constituye menos plata para el recaudo y ningún efecto sobre la población pobre y vulnerable.