JUSTICIA
Líder de los camioneros, acorralado por la justicia
Pedro Aguilar fue enviado a la cárcel. Habría comprado a los investigadores que le seguían la pista hace tres años; la clave de su caída fue su antiguo vicepresidente en el Valle.
La pelea más costosa de Pedro Aguilar, presidente de la Asociación Colombiana de Camioneros (ACC), no fue con el Gobierno ni con un sector del gremio camionero, cuando lideró hace un año un paro nacional que provocó pérdidas superiores a 2,5 billones de pesos.
Su mayor dolor de cabeza ocurrió en el 2014, cuando su antiguo vicepresidente en el Valle del Cauca, Andrés Villegas, fue capturado dentro del cartel de la chatarrización. Villegas fue condenado a cuatro años de cárcel. Terminó colaborando con la justicia y señalando al líder de los camioneros de ser el jefe de una banda delincuencial.
Este capítulo tiene a Aguilar, el líder más polémico de los camioneros, respondiendo ante la justicia por los delitos de concierto para delinquir, fraude procesal, uso de documento falso; destrucción, supresión u ocultamiento de documento público, y estafa agravada.
En audiencia de imputación de cargos, la Fiscalía reveló que fue en el 2014, en el marco de la captura de Villegas y de Luis Aguilar (hermano de Pedro Aguilar) cuando se logró llegar al desmantelamiento de una “empresa criminal” que este lunes terminó en 22 órdenes de captura y otras seis imputaciones de cargos.
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Hace tres años, en Cali, la investigación apuntaba a los agentes de la Sijín Jesús Alirio Laso, John Jairo Calambás y Alexánder García Candela, quienes como técnicos de peritaje automotriz se encargaban de verificar y avalar los vehículos que entrarían al proceso de chatarrización. Por medio de documentos falsos Pedro Aguilar y Andrés Villegas son señalados de influir en este proceso para lograr el cobro de los cupos de vehículos que nunca salían de circulación; se calcula que el cupo vale entre 35 millones y 90 millones de pesos, dependiendo del automotor.
Según los investigadores de la Fiscalía, tres días antes de la captura de Villegas y de Aguilar, el agente de la Dijín Sergio Antonio Martínez Orozco, que llevaba la investigación, puso sobre aviso a Villegas en relación con las capturas, y le pidió dinero para no detener a los miembros de su familia. Al enterarse de la investigación, Pedro Aguilar les ofreció a Martínez y a Luis Orlando Cruz Jiménez, el otro investigador, 14 millones de pesos para que congelaran el caso.
En este momento comenzó el segundo capítulo de la investigación de la Fiscalía. Según el ente investigador, Aguilar también sacaba provecho de su compañera sentimental, que trabajaba en el Ministerio de Transporte, quien está prófuga de la justicia. Junto con Aguilar fueron capturadas dos personas que trabajan con él, y la mamá de uno de ellos.
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El fraude al sistema de chatarrización ocurrió durante el 2011 y el 2015. Los tres agentes recibieron entre uno y cuatro millones por camuflar en el papel los vehículos con otras características y presentarlos en otros municipios. Según el Gobierno, al menos 12.000 vehículos de carga han sido chatarrizados de manera fraudulenta en el país, lo que podría representar pérdidas al Estado por 600.000 millones.
Ante el juez 71 de control de garantías acaba de enviarlo a la cárcel La Modelo. Audios, testigos y documentos lo tienen dando muchas explicaciones a la justicia.