Sara Tufano, excandidata por el Pacto Histórico.
Sara Tufano retiró su candidatura al Senado por el Pacto Histórico por diferencias con Petro. | Foto: CORTESÍA SARA TUFANO

POLÍTICA

“Petro está instrumentalizando la paridad de género para construir las listas”: excandidata del Pacto Histórico

Sara Tufano desistió de aspirar al Senado por esa alianza. Cuestiona la influencia del líder de la Colombia Humana, los apoyos que ha recibido y algunos nombres relacionados a personas cuestionadas.

15 de diciembre de 2021

Previo a que se cerrara el plazo de la inscripción de las listas al Congreso, en el Pacto Histórico se generó una fuerte discusión que aún genera recelos por cómo quedaron conformadas esas listas. Cuotas de políticos, apoyos de sectores cuestionables y hasta familiares de líderes con escándalos son algunas de esas denuncias.

La socióloga Sara Tufano, quien desistió de su postulación por varias de esas razones, conversó con SEMANA sobre lo que pasó en ese proceso en el Pacto Histórico. Dice que Petro toma las decisiones más importantes y que están contradiciendo lo que se proponía inicialmente la alianza.

SEMANA: ¿Por qué renunció a su aspiración al Senado por el Pacto Histórico?

SARA TUFANO.: Mi distanciamiento de Petro y del Pacto Histórico no es porque no estoy en los primeros lugares de la lista, que es lo que andan diciendo, sino por las alianzas que se empiezan a hacer. Yo entro al Polo cuando la lista todavía era abierta, una situación muy diferente. En el momento en que cierran la lista, a mitad de año, todas las mujeres candidatas y demás candidatos del Polo sabíamos que los cuatro senadores irían a ocupar los primeros lugares. Lo que cuestiono es la estrategia política del Pacto Histórico, y en particular de Petro, que es realmente el que toma las decisiones más importantes.

SEMANA: ¿A qué tipo de decisiones se refiere?

S.T.: La posible llegada de Luis Pérez no fue consultado, la llegada de Piedad Córdoba no fue consultada, y hay otras cosas que no han sido consultadas con los demás líderes del Pacto. Es él quien toma las decisiones más importantes porque piensa que es lo mejor para el Pacto. Yo no estoy de acuerdo con la llegada de (Alfredo) Saade, por ejemplo, esa es otra contradicción. Tú no puedes promocionar la paridad en las listas del Pacto y al mismo tiempo traer un antiderechos a tu coalición, eso es un contrasentido. Y no solamente traerlo sino que no dar ninguna explicación sobre el por qué de su llegada.

SEMANA: ¿Esas fueron las razones por las que terminaron peleados por las listas en el Pacto Histórico?

S.T.: El problema con las listas, y lo que dijimos a propósito de ellas, era que no había un método de selección democrático para ordenarlas, esa fue siempre mi crítica, y en ese sentido los primeros puestos iban a ser para los senadores ya elegidos y después se iba a privilegiar a personas cercanas a los líderes del Pacto Histórico y principalmente de Gustavo Petro. No había una forma de que eso no sucediera porque son las personas que tienen más poder las que deciden.

SEMANA: ¿Petro puso a dedo a los candidatos al Congreso?

S.T.: No sé si a dedo pero el que niegue que Petro no tuvo nada que ver con la elaboración de las listas está mintiendo. Claramente él tuvo que ver. No mas en el Atlántico con el actor Agmeth Escaf. Petro llegaba a algunos lugares y se tomaba la foto con alguien y ese era el candidato de Petro y ya tenía mucha más posibilidades de encabezar que otros candidatos que de pronto no tenían el apoyo de Petro pero que llevaban mucho más tiempo trabajando en esas regiones y departamentos en procesos territoriales. Es lo que se ve ahora, la imposición desde Bogotá, Petro imponiendo algunos liderazgos que no hacen parte de los procesos colectivos y sociales de esos territorios.

SEMANA: ¿Petro privilegió en sus listas prácticas políticas tradicionales que ha criticado?

S.T.: El Pacto Histórico no está haciendo un proceso de construcción de unidad popular, como se está diciendo, sino que básicamente es un acuerdo electoral. Y las disputas que se están dando es porque precisamente iba a ser un acuerdo de unidad popular en la que los pueblos afro, las comunidades indígenas, las víctimas, las clases populares iban a tener mayor representación en las listas y lo que vemos es todo lo contrario. Como sabíamos que eso iba a pasar, la solicitud era que se abrieran las listas, pero Petro las está impulsando instrumentalizando el argumento de la paridad.

SEMANA: Precisamente usted es una feminista reconocida y Petro dice que puso las listas cerradas pensando en la cuota de género, ¿realmente ese es el propósito?

S.T.: No, claramente él no está pensando en las mujeres. Tú no puedes tomar el argumento de la paridad y usarlo solamente durante las elecciones si en tu propio movimiento político no haces nada para que se respeten los derechos de las mujeres. Me refiero sobre todo al asunto de la violencia política de género. La izquierda y aquí no es solamente el movimiento de Petro sino también el Polo, porque también lo he vivido en mi partido, no construye espacios seguros para las mujeres porque son muy machistas, son los hombres son los que tienen poder e imponen las reglas, y se terminan viendo casos de acoso sexual como lo que pasó con (Hollman) Morris y las denuncias que hubo con respecto a su caso, pero también en el Polo con (Álvaro) Argote, sin que haya voluntad política para erradicar esta violencia de género.

Si uno ve las mujeres que están en los primeros 20 puestos del Pacto Histórico, María José Pizarro, Aida Abella, Clara López, Isabel Zuleta, son mujeres muy valiosas, no se puede desconocer, pero son mujeres que no cuestionan a Petro ni a ninguno de los líderes del Pacto Histórico y dentro de sus principales luchas no está la de que la izquierda y los movimientos progresistas se conviertan en espacios seguros para las mujeres. La representación no es suficiente porque pueden llegar mujeres machistas al poder. Si tu no conviertes el espacio político en el que trabajas, las mujeres se van a ir, se van a decepcionar y además no vas a poder atraer más.

SEMANA: Con respecto a la polémica de Argote, se volvió a generar un cuestionamiento porque hay un familiar de él en esas listas del Pacto...

S.T.: Está la hija. El Polo, el sector que tiene más poder, que es el del secretario del partido, (Jaime) Dussán, y el del presidente, Alexánder López, lograron imponer en la lista a la Cámara a la hija de Argote. Petro logró imponer a David Racero, que es de Mais pero realmente es de la Colombia Humana y a Mafe Carrascal que también entra allí, impone a dos personas de su partido. Sigue la UP que es cercana a Petro y a quien le debe mucho por las elecciones pasadas, y el cuarto es la hija de Argote, Támara Argote, y después está Alirio Uribe.

¿Qué mensaje está transmitiendo el Polo ahí? Primero que no le importan las denuncias en contra de Argote y que el comité de ética no va a hacer su trabajo. Al imponer a su hija, además de nepotismo, es un claro mensaje a las mujeres de que no les interesa hacer absolutamente nada para esclarecer las denuncias, es decir, si hay otro caso de acoso sexual a ellos no les interesa resolverlo. Es un pésimo mensaje que se le envía a las mujeres porque imagínate si la hija de ese señor va a aceptar o va a querer hacer algo para esclarecer lo que sucedió con su padre. Es como Petro, no nos puede dar cátedra de feminismo popular si él ni si quiera es mujer. Él de lo que se tiene que ocupar si de verdad está comprometido con las mujeres es de que los hombres de su partido, si de verdad sabe tanto de feminismo popular, les enseñe a ellos, pero no a nosotras las mujeres.

SEMANA: ¿Ve un futuro para la izquierda en el país?

S.T.: Sigo siendo una persona de izquierda. Creo que en Colombia tiene que haber más liderazgos de izquierda y no solamente que el único sea Petro. En este momento él es el más fuerte, el que ha logrado articular un descontento social, pero creo que también se equivoca y hay que decírselo y ese es el problema de la gente que no se lo dice porque como en estos momentos es el que más tiene poder, de alguna forma decírselo significa que te excluyan de ese proceso porque no son capaces de resistir a una crítica. Pienso al mismo tiempo en que es una persona valiosa que ha sabido articular muchos procesos sociales y colectivos que tiene una trayectoria envidiable, no la desconozco, pero que tiene unas prácticas con las que no comparto, que no me parecen democráticas.

Yo porque tengo una cierta opinión a nivel nacional, pero en los territorios personas de las clases populares están en desacuerdo con lo que está pasando y me buscan para que les ayude a denunciar. Entonces no es una cosa de unas personas urbanas, de Bogotá, que no tienen ni idea de lo que está pasando en el territorio. Yo sí le veo futuro a la izquierda. El Pacto Histórico necesita corregir sus errores porque está siendo una decepción para muchas personas que tenían muchas expectativas a partir del estallido social y de la movilización de los jóvenes, pero se está reduciendo a un acuerdo electoral y está excluyendo a ciertas poblaciones.

SEMANA: ¿El Pacto Histórico gira en torno a Petro?

S.T.: Algunas cosas sí. Lo que pienso que gira en torno a Petro son las decisiones más importantes, quién entra y quien sale lo decide él. Por ejemplo en la cuestión de Saade él lo impuso y si llega Luis Pérez él lo va a imponer y no sé si escuche si alguien se opone. Pero claramente hay anhelos de cambio y transformación que vienen desde las elecciones pasadas en las que Petro casi llega a la presidencia. Yo le hice campaña a él, estuve de acuerdo con él en esa campaña, creo que ahora ha optado por otra estrategia política porque cree que le puede dar más votos y por eso he empezado a cuestionar al Pacto Histórico públicamente. Creo que hay algunos errores y eso es lo que he señalado. En términos de que hay un descontento popular y una necesidad de cambio que va más allá de Petro, y el Pacto Histórico no alcanza a recoger todas las aspiraciones de cambio que hay en el país.